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El Ministerio del Interior de Egipto informó este sábado, que unos 60 estudiantes islamistas fueron detenidos en El Cairo, capital del país, durante las manifestaciones realizadas en la Universidad de Al Azhar, en el marco de una jornada de protestas denominada como «Semana de la Ira», reporta Telesur.
El movimiento Hermanos Musulmanes denunció que los enfrentamientos producidos en las protestas entre la policía y los manifestantes dejaron el saldo de un muerto y decenas de heridos.
Sin embargo, el portavoz del Ministerio del Interior, Hani Abdelatif, negó estas afirmaciones y declaró que en estas manifestaciones unos estudiantes intentaban impedir que otros entraran a la Universidad para recibir clases.
«La Universidad está bajo el control de las fuerzas de seguridad y los exámenes han podido comenzar sin problema», dijo Abdelatif.
Abdelatif detalló en un comunicado que en la provincia de Al Manufiya unas 16 personas fueron arrestadas por atacar varias comisarías de policía e incitar a la violencia y propiciar disturbios.
La jornada de protestas de este sábado es el segundo día de la denominada Semana de la Ira que fue convocada por la Coalición para la Defensa de la Legitimidad, a la que pertenecen los Hermanos Musulmanes y otras agrupaciones.
Estas protestas ocurren sólo dos días después de que el movimiento Hermanos Musulmanes fuera declarado por el Gobierno egipcio como grupo terrorista.
Según un comunicado de la Comisión, la Semana de la Ira tiene como objetivo denunciar «las agresiones contra las mujeres manifestantes y los detenidos islamistas, así como la congelación de las asociaciones vinculadas con la cofradía».
En el inicio de la Semana de la Ira, este viernes unas cinco personas fallecieron, otras 50 resultaron heridas y unas 265 resultaron detenidas en las protestas que se realizaron en todo el país.
El Gobierno de facto egipcio aumentó su presión contra la Hermandad Musulmana congelando los fondos de la cúpula de la entidad y de organizaciones no gubernamentales afines.
La medida abarca a 132 dirigentes de alto nivel de la Hermandad Musulmana, ilegalizada en septiembre pasado y declarada organización terrorista esta semana.
Los fondos de la Hermandad fueron incautados en el pasado mes de julio cuando el Ejército depuso al presidente islamista Mohamed Mursi. El gobierno dijo en su oportunidad que había encontrado grandes cantidades de dinero en efectivo en un arsenal improvisado.
Asimismo sucedió con las cuentas bancarias de la cofradía que fueron congeladas en septiembre y que pararían al Estado, según el panel formado para administrarlas.
