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MOSCU, diciembre 13.— El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, examinará mañana en Roma con el secretario norteamericano de Estado, John Kerry, la tensa situación en Medio Oriente, aseguró PL.
La reunión de Lavrov y Kerry estará enfocada en esta ocasión a los asuntos del Oriente Medio, confirmó el vicecanciller Serguei Ryabkov, a la agencia Interfax.
Ryabkov corroboró así el programado encuentro número 17, en lo que va de año, entre Lavrov y Kerry, este domingo en Roma. El Departamento de Estado anunció por separo, desde Washington, que la cita en la capital italiana se realizaría el lunes 15 de diciembre.
El intercambio de los jefes de la diplomacia de Rusia y Estados Unidos ocurrirá en un momento de fuertes tensiones luego que el miércoles la violencia de las fuerzas de ocupación de Israel a una protesta pacífica por los ilegales asentamientos desencadenara el asesinato del ministro palestino Ziad Abu Ein.
La situación en la región es en extremo complicada y una serie de acontecimientos ocurridos allí generan preocupación, expresó Ryabkov.
Indicó el vicecanciller que se impone una labor conjunta para contribuir a una mejora de la situación y retomar los esfuerzos de cara a los procesos de estabilidad en la zona del Levante.
Ponderó en ese sentido el significado del papel de los dos países en los esfuerzos colectivos, y desde ese punto de vista el programado contacto tiene una importancia especial, subrayó el diplomático ruso.
Ryabkov confirmó que la décima séptima reunión este año entre Lavrov y Kerry se había concertado para celebrarse en Roma este fin de semana.
De acuerdo con la Cancillería, ayer los ministros sostuvieron un contacto telefónico por iniciativa de la contraparte estadounidense y evaluaron las perspectivas del conflicto israelo-palestino y la necesidad de coordinar acciones con miras a la reanudación del proceso negociador.
Rusia y Estados Unidos, más la ONU y la Unión Europea, integran el denominado cuarteto de mediadores internacionales para el proceso de paz en el Medio Oriente, estancado por el apoyo de la Casa Blanca a Israel y su silencio cómplice a las acciones del ejército sionista y las invasiones de colonos en territorios palestinos.
