El pueblo venezolano rechaza la injerencia de EE.UU. Autor: Malva Suárez Publicado: 21/09/2017 | 06:04 pm
CARACAS, marzo 9.— El presidente Obama ha dado el paso más agresivo, injusto y nefasto que jamás se haya dado desde Estados Unidos contra Venezuela, tierra de Bolívar, afirmó el presidente Nicolás Maduro en una alocución al pueblo en la que anunció que este martes solicitará ante la Asamblea Nacional una ley habilitante, antiimperialista, que le de poderes para defender la paz y la soberanía.
El Jefe de Estado llamó a las definiciones y a dar un paso adelante para decir al imperio que hay un pueblo que está unido, cohesionado, para garantizar que «esta tierra no la toca nunca la bota yanqui».
Estamos ante una agresión a la paz, a la soberanía y a la integridad de la patria venezolana, aseveró el líder bolivariano al analizar en cadena de radio y televisión la orden ejecutiva de la Casa Blanca declarando una «emergencia nacional» en EE.UU. y a Venezuela una «amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional».
Reunido con su Gabinete ministerial y con el alto mando militar venezolano, Maduro denunció el «error tan garrafal del presidente Obama», de quien dijo se ha metido en un callejón sin salida. Obama entró personalmente en «la agresión contra el pueblo de Venezuela, que es un pueblo de paz». Son ustedes la amenaza, puntualizó Maduro.
Es una desproporción, es una grosería, dijo en otro momento de sus palabras en la reunión en el Salón Sol de Perú, durante la cual expresó su confianza en el pueblo movilizado.
«Tengamos confianza en la historia patria. Nuestra historia es grande, demasiado grande, somos Venezuela», afirmó.
En su detallada explicación de los antecedentes de la orden presidencial emitida en Washington este lunes, dijo que esa movilización del pueblo fue cortando la cadena de eventos, una por una, refiriéndose a las guarimbas, la emboscada económica, los saqueos, la movilización de la derecha en la calle y el atentado violento con aviones desde el exterior, intentos de hacer un nuevo 11 de abril, un golpe de Estado violento, cruento, que estaba en marcha, y de lo cual ha demostrado suficientemente con pruebas, grabaciones, videos y testimonios.
«El golpe de Estado de factura gringa ha sido derrotado», enfatizó, al tiempo que acotó: «la gran conciencia de los pueblos se crea en medio de la batalla», puntualizando que era tiempo de tener confianza en la fuerza moral de la patria de Bolívar, en la ética bolivariana y la ética chavista.
Maduro llamó a la unión de todos los patriotas, a la unión cívico-militar para que en Venezuela triunfe la paz. Vamos a salir victoriosos de esta agresión, de esta amenaza.
Este conflicto viene de lejos, y se va a ir Obama, y la Revolución seguirá y seguirá América Latina, agregó.
Además del llamado al nuevo despertar de la conciencia bolivariana, una conciencia de dignidad, y a decir como una sola voz ¡a Venezuela se respeta!, hizo también la convocatoria a los Gobiernos y pueblos de América Latina y el Caribe, de los que dijo ha recibido varias llamadas de total apoyo, como el del presidente Evo Morales, y además del Alba, la Unasur y del mundo en general.
Tras destacar a los siete dignos, honestos venezolanos y venezolanas que fueron sancionados por el indigno decreto imperial, y felicitarlos porque esa decisión que les hiciera Estados Unidos «es una condecoración», anunció que el mayor general González López ha sido nombrado ministro de Interior, Justicia y Paz, y que la almiranta en jefa Carmen Meléndez asumía el Ministerio de la secretaría de la Presidencia de la República.
Obama estrecha cerco a Venezuela
WASHINGTON, marzo 9.— En una explícita medida injerencista y de acoso al Gobierno del presidente Nicolás Maduro, el mandatario estadounidense Barack Obama reforzó este lunes sanciones contra funcionarios venezolanos y calificó la situación en el país sudamericano como una «amenaza a la seguridad nacional» de Estados Unidos.
Según informó un despacho de la agencia AP, la orden de Obama expresa que Venezuela es una «amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior estadounidenses».
En la nueva arremetida, la Casa Blanca justificó su hostigamiento diciendo: «Estamos profundamente preocupados por los esfuerzos del Gobierno de Venezuela de intensificar la intimidación contra sus opositores».
Con falsedad, intentan presentar el asesinato de 43 personas en 2014 durante las guarimbas y manifestaciones violentas como acciones represivas de las autoridades contra la oposición, cuando la mayor parte de esas víctimas eran de las filas chavistas e incluso integrantes de la Guardia Nacional Bolivariana.
Las medidas están dirigidas contra siete funcionarios y exfuncionarios de instancias policiales, militares y judiciales, y con ellas implementan y amplían las sanciones aprobadas por el Congreso estadounidense el año pasado y que el propio mandatario, a pesar de su reticencia inicial, sancionó en diciembre, dijo AFP.
En febrero el Departamento de Estado incluyó un número adicional de funcionarios venezolanos susceptibles a la restricción de visas, agrega la información.
A diferencia de las anteriores ocasiones, Obama se colocó al frente de los ataques: «Yo, Barack Obama, (...) considero que la situación en Venezuela (...) constituye una amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y la política externa de Estados Unidos», indica el decreto, y añade: «Por ello declaro una emergencia nacional para enfrentar esa amenaza».
La declaración de una «emergencia nacional» es una herramienta con la que cuenta el Presidente estadounidense para aplicar sanciones contra un país en determinadas circunstancias y que le permite ir más allá de lo aprobado por el Congreso, aclaró EFE.
Las medidas autorizan al Departamento del Tesoro a congelar los bienes en Estados Unidos de siete funcionarios y exfuncionarios venezolanos, que además no podrán ingresar a ese país. La lista incluye al ex director de operaciones de la Guardia Nacional Bolivariana, Antonio Benavides; el director del servicio de inteligencia (Sebin), Gustavo González; la fiscal Katherine Haringhton; el presidente de la Corporación Venezolana de Guayana y ex comandante de la Guardia Nacional Justo Noguera Pietro; y el director de la Policía Nacional, Manuel Pérez, entre otros.
Según un funcionario estadounidense del Departamento del Tesoro que solicitó el anonimato, las medidas no tendrán ningún «efecto directo» sobre el sector petrolero de Venezuela, primer productor sudamericano de crudo y país con las mayores reservas petrolíferas del mundo, dijo AFP.
A su vez, AP comentó que las fuentes del Tesoro dijeron desconocer cuáles o cuántos activos podrían tener en Estados Unidos, estos siete penalizados y también rehusaron explicar por qué decidieron castigar a funcionarios de medio nivel y no a dirigentes del alto Gobierno venezolano.
En diciembre pasado, el presidente Obama promulgó un proyecto de ley aprobado por el Congreso que pretende aplicar sanciones a Venezuela, las que ahora son ampliadas por la orden ejecutiva. El 20 de febrero, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, a través de la Sala Constitucional, emitió un fallo en el que deja sentado que Washington no tiene ninguna jurisdicción para aplicar fuera de su territorio alguna ley, norma legal o sanción contra la soberanía y la institucionalidad democrática de Venezuela, recordó AVN.
Al rechazar entonces de forma categórica las acciones estadounidenses, la presidenta del TSJ, la magistrada Gladys Gutiérrez, leyó la sentencia venezolana: «Los Estados Unidos de Norteamérica no tienen jurisdicción alguna, de ninguna forma, intensidad o atributo para sancionar y promulgar actos con aplicación en la República Bolivariana de Venezuela, siendo que el documento identificado como Ley para la defensa de los Derechos Humanos y la Sociedad Civil en Venezuela 2014 carece de validez y efectividad, y es absolutamente nula su ubicación o existencia en el plano jurídico para la República Bolivariana de Venezuela».
Este lunes, el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, advirtió que Estados Unidos prepara un ataque militar contra Venezuela.
«Lo que viene ya está planificado y debemos decirlo, son ataques sobre nuestra tierra, sobre nuestro país, ataques militares. Estas resoluciones de emergencia las utiliza el imperialismo norteamericano cada vez que va a atacar un pueblo», puntualizó el también dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela, publicó el diario Correo del Orinoco.
«Estados Unidos, la mayor potencia del mundo, considera que nosotros, los hijos de Bolívar y Chávez, un país pequeñito pero con una dignidad que no cabe en el alma, es una amenaza», explicó Cabello en un acto con militantes del PSUV que fue transmitido en vivo por Telesur y VTV, y aclaró que no es el pueblo estadounidense sino «el sentimiento de las cúpulas imperiales que quieren ponerles las garras a nuestro país».
«No aceptamos ninguna medida injerencista de ningún imperio del mundo, (EE.UU) no tiene ninguna moral para decir que en Venezuela se violan los derechos humanos», acotó al tiempo que señaló que el plan en marcha está planteado entre el 4 de febrero y el 11 de abril porque Obama bajo ningún concepto quiere que el presidente Nicolás Maduro esté en la Cumbre de las Américas, agregó Correo del Orinoco.
Por su parte, el canciller de Ecuador, Ricardo Patiño —quien integró la misión de la Unión de Naciones Suramericanas que acudió a Caracas para contribuir a resolver el conflicto político venezolano, dijo que Unasur no permitirá la intervención extranjera en Venezuela ni un golpe de Estado contra el presidente Nicolás Maduro.
«En la medida en que el presidente Nicolás Maduro es el presidente de los venezolanos, elegido democrática, transparente y claramente, por supuesto que vamos a oponernos de forma radical, frontal, institucional, con toda nuestra fuerza, a cualquier intento de desestabilización», dijo Patiño citado por AFP.
Defender la democracia en Venezuela es también hacerlo por la paz en la región, aseguró el titular de Exteriores ecuatoriano, quien prometió que la Misión Electoral de la Unasur acompañará a Venezuela en sus justas primarias y parlamentarias, reportó PL.
En ese sentido, corroboró el interés del grupo sudamericano de escoltar a Venezuela durante el proceso de resolución de crisis a través del voto, como parte de los venideros comicios parlamentarios. Calificó de esencial para la Unasur que las diferencias se tramiten de una manera democrática, pacífica y dentro de la Constitución y la ley.
