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TRÍPOLI, enero 19.— Con dos días de atraso respecto a lo planificado, el Consejo Presidencial de Libia, respaldado por la ONU, constituyó este martes un nuevo gobierno nacional que unifica el poder en el país, dividido hasta ahora entre los parlamentos contrarios de Trípoli y de Tobruk, anunció PL.
La nueva autoridad estará liderada por el actual jefe del Consejo Presidencial, Mohamad Fayez Al Serraj, e integrada por 32 ministros, además deberá establecerse en la capital, Trípoli, luego de que ambas cámaras se pronuncien sobre su aprobación.
Tras conocerse el anuncio, el enviado especial de la ONU para Libia, Martin Kobler, envió sus congratulaciones al pueblo libio y al Consejo Presidencial por la formación del gobierno de acuerdo nacional.
Kobler exhortó, en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, a los integrantes de la Cámara de Representantes de Tobruk (HOR, por sus siglas en inglés) «y a su presidencia a poner los intereses nacionales del país más allá de toda otra consideración».
No obstante, en el interior del país norafricano la implementación del acuerdo enfrenta serias dificultades, pues en los próximos diez días el nuevo Gobierno debe ser aprobado por ese Parlamento de Tobruk, que lleva sin alcanzar desde octubre el número de asistentes necesario para que sesione.
Mientras, reportes de la prensa local no confirmados anunciaron que el Parlamento de Trípoli habría amenazado el pasado fin de semana con arrestar a cualquier miembro de las fuerzas de seguridad del Consejo Presidencial que arribe a esta capital.
Por su parte, la Misión de Soporte de la ONU en Libia (Unsmil) calificó el hecho en un comunicado como una genuina oportunidad para los libios de reunirse para construir su país.
En tanto, la responsable de Política Exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini, afirmó que «solo un gobierno libio unido, apoyado por todos los ciudadanos, será capaz de poner fin a las divisiones políticas, derrotar el terrorismo y atajar los innumerables desafíos de seguridad, humanitarios y económicos» que asolan el país, informó Notimex.
La existencia en varias regiones del país de grupos extremistas como el Estado Islámico y Al-Qaeda en el Magreb, los cuales se aprovecharon de la carencia de un Gobierno centralizado luego del asesinato del jefe de Estado Muammar Al-Gadafi en 2011, impone una mayor premura al establecimiento de una administración de unidad nacional.
