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ADDIS ABEBA, marzo 7.— El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, arribó este miércoles a Etiopía, primera parada de su recorrido por África, al que llega sin muchas metas ni propuestas concretas, resaltan medios de prensa y analistas.
Este pudiera ser un viaje complejo para el diplomático, quien parece encargado de limar asperezas con el continente luego de que su presidente, Donald Trump, catalogara despectivamente a los países africanos a inicios de año.
Por ello, aunque se trata de la visita de más alto nivel que realiza un representante de este Gobierno, su impacto probablemente sea de bajo perfil.
Tillerson se reunirá con funcionarios de cinco naciones y con líderes de la Comisión de la Unión Africana, con sede en la capital etíope, en un intento por estrechar las asociaciones de Estados Unidos con los países africanos, valora AP.
El lunes, cita Xinhua, el subsecretario de Estado para Asuntos Africanos de EE.UU., Donald Yamamoto, agregó que se discutirá la situación en Sudán del Sur, República Democrática del Congo, Somalia y del G5-Sahel (Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania y Níger).
Sobre los asuntos etíopes, Yamamoto dijo que «no solo deseamos la transición de un primer ministro, sino también el fortalecimiento de las instituciones», y añadió que «también analizaremos los problemas en Oromia y la región somalí y los cerca de un millón de probables desplazados».
Según un comunicado de la vocera del Departamento de Estado, Heather Nauert, el propósito del viaje es fomentar los vínculos de Estados Unidos con los Gobiernos y la población de África, así como abordar, entre otros temas, el enfrentamiento al terrorismo y estimular el comercio y la inversión «mutuamente beneficiosa».
Abebe Aynete, investigador del Instituto de Estudios Estratégicos de las Relaciones Exteriores de Etiopía, afirmó que el viaje mostrará el giro de la política exterior estadounidense desde el mantra tradicional de los derechos humanos y la promoción de la democracia al de «hoy por ti y mañana por mí».
De hecho, al describir la política hacia África, Tillerson dijo que el rápido crecimiento económico y de la población del continente hace que su futuro esté cada vez más ligado al de Estados Unidos.
Mientras, la Casa Blanca de Trump no ha anunciado desde el cambio de mandato una sola iniciativa específica para auxiliar al continente y muchos de los recortes que hizo al presupuesto afectan numerosos programas de ayuda a África.
En su periplo de una semana, el primero de carácter oficial desde el inicio del Gobierno, el Secretario de Estado irá luego a Nigeria, Kenia, Chad y Djibuti.
