«EL sistema funcionó», declaró a la prensa la secretaria de Homeland Security, Janet Napolitano, inmediatamente después de que fuera abortado el intento de hacer estallar, en pleno vuelo, el avión que se dirigía a la ciudad de Detroit el 25 de diciembre pasado.
Realmente, no sé lo que estaba pensando esa señora cuando hizo tal declaración. No fue ni tan siquiera la acción de un alguacil de EE.UU. lo que evitó la explosión. Fueron dos las razones para que esto no sucediera; primero, la torpeza del terrorista al demorarse en detonar el explosivo, y segundo, la valentía del pasajero que se le lanzó encima. Se sabe que el sistema falló miserablemente al no prevenir nada, por lo tanto, a la señora Napolitano no le quedó más remedio que declarar, poco después, que donde dijo dije, dijo Diego y que sus palabras fueron sacadas de contexto.
La primera declaración de la secretaria fue un intento burdo para hacer creer que los sistemas de inteligencia antiterroristas de este país habían funcionado a cabalidad evitando el siniestro atentado, cuando en realidad, lo que sucedió fue todo lo contrario.
Ahora nos enteramos, por el Presidente, de detalles que se desconocían públicamente pero de los que las agencias encargadas de esos trajines sí estaban conscientes desde antes, como por ejemplo, que tenían informes de que la rama de Al Qaida en Yemen estaba preparando atentados terroristas no solo en aquel país, sino también en territorio norteamericano.
Es más, según nos dice Obama, sabían que estaban entrenando a una persona específica para que fuera el autor de uno de ellos, y que ahora se sabe que este individuo era el nigeriano que intentó volar el avión. Según Barack Obama, las agencias de inteligencia no ataron los cabos y por lo tanto, Umar Farouk Abdulmutallab pudo montarse tranquilamente en el avión, a pesar de estar en una lista maestra de sospechosos de terrorismo, de haber comprado el boleto aéreo pagando en efectivo, y de no llevar consigo equipaje alguno. ¿Y qué de la visa de entrada múltiple? Pues muy bien, gracias. Resulta que ahora el Departamento de Estado se entera de que Inglaterra le había negado una visa de entrada regular a este individuo por creerlo sospechoso de terrorismo.
¿Sería que Inglaterra tenía más información sobre esta persona que EE.UU.? Es raro que ese fuera el caso, y que teniéndola, no la hubiese compartido con las agencias norteamericanas, como también es raro que supiera más de él que la CIA ya que adonde fue directamente a denunciarlo en noviembre su padre fue a la embajada americana en Nigeria y no a la inglesa.
Además de esos detalles, el presidente ahora nos dice que va a suspender futuros traslados de detenidos en Guantánamo, pero que nadie se equivoque al creer que no va a cerrar la prisión que tiene en Cuba. Dice que sí la cerrará. Por mi parte, imagino que lo hará, pero el cuándo, será cuando la rana eche pelos? Si durante la campaña electoral prometió que lo haría, ¿por qué en un año no lo ha hecho?
En EE.UU. existen cientos de cárceles de extrema seguridad que pudieran albergar a esos detenidos. ¿Por qué no han sido trasladados para esos lugares?
El fallo de los organismos de inteligencia casi crea una enorme desgracia en el aire, y ahora nos trae, como daños colaterales, el que se dilate aún más el cierre de la nefasta prisión de Guantánamo, y medidas de seguridad más estrictas en los aeropuertos. Ahora nos van a desnudar electrónicamente cada vez que vayamos a abordar un avión.
Además, a los que viajamos a Cuba a ver a familiares, se supone que en lo adelante nos registren como si fuéramos unos delincuentes terroristas, ya que caprichosamente, y sin ninguna razón, el famoso Departamento de Estado, el mismo que le mantuvo la visa múltiple al nigeriano, mantiene a Cuba en la lista de países que patrocinan el terrorismo.
La única razón para que a Cuba la mantengan en esa lista es la política criminal y hostil del gobierno de este país contra la Isla. Las mismas agencias que no supieron detectar el fallido atentado terrorista saben perfectamente que los cubanos terroristas no están en La Habana, sino libres en las calles de Miami y que Cuba no debería de estar en esa lista, pero no hacen nada para quitarla de la misma, como no hicieron nada para evitar que Abdulmutallab abordara el avión.
*Periodista cubano radicado en Miami
