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la integración es necesaria y posible. Autor: Estudios Revolución Publicado: 14/12/2019 | 11:45 pm
Convencidos de que la integración es necesaria y posible, jefes de Estado y otros altos dignatarios de países miembros se reunieron en La Habana este sábado, a 15 años de la fundación de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra Anérica, para analizar la convulsa coyuntura regional e internacional, y trazar estrategias frente a ella.
En momentos en que el imperialismo estadounidense trata de restablecer la aplicación de la Doctrina Monroe, profundizar el neoliberalismo y regresar a los tiempos del macartismo, el ALBA-TCP unida ha defendido, en su 17ma. Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, los postulados de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, al adoptar una Declaración Final de 33 puntos, en los cuales el mecanismo integrador ratifica sus principios fundacionales.
En horas de la mañana, al dejar abierta la cita, el Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, animó a los presentes a analizar propuestas para potenciar las capacidades y fortalezas del ALBA-TCP, y enfatizó al organismo como «plataforma de coordinación política en defensa de la independencia, la paz y la integración desde la solidaridad y la cooperación».
En medio de las amenazas intervencionistas y actos de agresión que se ciernen sobre América Latina y el Caribe, Díaz-Canel también invitó a un diálogo que contribuya a seguir avanzando en la concreción de la Proclama aprobada en 2014, precisamente en La Habana, por los jefes Estado y de Gobierno de los países de la región, que la declararon entonces como Zona de Paz.
Díaz-Canel apuntó que los debates estarían centrados, justamente, en la actual situación latinoamericana y caribeña y en las perspectivas de la Alianza frente a ella.
La primera mención del Presidente cubano fue para Fidel y Chávez, padres fundadores del ALBA-TCP, a quienes recordó en el aniversario 15 de la elaboración y suscripción por ambos de la Declaración que dejó fundado el arco integracionista sobre las bases de la complementariedad, la solidaridad y la integración.
Luego le siguió en el uso de la palabra, el presidente venezolano Nicolás Maduro, quien ratificó los postulados integracionistas y la confianza en la victoria al señalar: «Es nuestra hora, es nuestro tiempo, es nuestro siglo».
La cita prosiguió a puertas cerradas con la presencia de jefes de Estado de los países miembros como Daniel Ortega, presidente de Nicaragua; Ralph Gonzalves, primer ministro de San Vicente y las Granadinas; y de otros altos dignatarios en representación de sus países, así como David Choquehuanca, secretario ejecutivo del ALBA-TCP; y como invitado Sacha Llorenti, exembajador del Estado Plurinacional de Bolivia ante la ONU. También otras delegaciones de naciones invitadas a este esquema de integración.
Los debates concluyeron con una Declaración final que fue leída por el canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla, conocida al cierre de la sesión, en horas de la tarde.
En el documento los países miembros renovaron el compromiso con la solidaridad, la concertación política, la cooperación e integración y la defensa de la unidad frente a la injerencia y la dominación, tan necesarias para enfrentar el intervencionismo y el golpismo.
Al respecto, condena la política agresiva e intervencionista del Gobierno de Estados Unidos, que con la complicidad de las oligarquías nacionales y de los medios corporativos de la información, son las causas fundamentales de la peligrosa inestabilidad regional.
Con posición firme y enérgica, los países presentes reiteraron el reclamo de que se levante el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba; denunciaron el golpe de Estado contra el Gobierno del compañero Evo Morales en Bolivia; de manera contundente, el documento rechaza la activación del TIAR contra Venezuela, lo cual representa un peligro para la paz; y denuncia que las amenazas y reiterados intentos desestabilizadores contra el Gobierno legítimo de Nicaragua son profundamente injerencistas y violatorios del Derecho Internacional.
Seguimos el legado de los Comandantes Fidel Castro y Hugo Chávez por un ALBA unida, basada en la cooperación, la solidaridad y la preservación de la independencia, soberanía e identidad de nuestros pueblos, han dicho las naciones del ALBA-TCP conscientes de que la unidad e integración regional es la única vía para enfrentar la dominación que ejercen las estructuras hegemónicas de poder mundial, y que han dejado a nuestros pueblos en condición histórica de subordinación y vulnerabilidad política, económica y cultural.
Una vez más ha quedado demostrado que el ALBA-TCP constituye una fortaleza como mecanismo de concertación política y regional ante la arremetida del Gobierno de Estados Unidos y sus aliados.
La jornada tuvo como colofón un acto de masas en la Escalinata de la Universidad de La Habana.
