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El cielo de naranja por segunda vez

Este viernes se sabrá en la Ciudad Deportiva qué elenco será el nuevo dueño de la diadema de la Liga Superior femenina

Autor:

Javier Rodríguez Perera

La primera mitad del cuarto partido por el título de la Liga Superior de Baloncesto (LSB) masculino entre Artemisa y Villa Clara tuvo matices muy parecidos al del segundo encuentro, cuando los occidentales terminaron con amplia ventaja de 17 cartones. En el juego más reciente, los artemiseños cerraron los primeros 20 minutos con 16 puntos por delante y de haberle hecho caso al guion del segundo desafío, el triunfo lo hubiesen conseguido y el quinto encuentro y decisivo sería un hecho. Repito, de haberle hecho caso al guion…

En el tabloncillo de la villaclareña sala Amistad los locales jugaron la segunda mitad necesaria para conseguir remontar el marcador y refrendar la condición de favoritos que muchos les acuñaron para retener la corona, incluso desde la etapa clasificatoria cuando terminaron primeros. Villa Clara, con pizarra de 95-92, se coronó este miércoles por segunda ocasión consecutiva en la LSB, de-sempeño que los declara como el nuevo elenco con pretensiones de iniciar una dinastía en este deporte.

En el partido que le sirvió de pasarela a los alumnos de Carlos Valle para colgarse la presea de oro, trascendental fue el período conclusivo, en el que los vigentes campeones lograron 35 puntos. Los años de experiencia del alero Andy Bofill le indicaron que para un despunte dorado de su elenco, su protagonismo valdría mucho, y en el cuarto período anotó 23 de sus 36 unidades, para encabezar un ataque de-sestabilizador, que igualmente sumó a filas a Neslier Raúl Abreu (26 puntos) y Yoel Cubillas (17 puntos y 18 rebotes), principalmente.

Del lado contrario, Artemisa se dio el lujo de contar con la mejor versión en la final de Osmel Oliva (31) y del refuerzo pinareño Yosiel  Monterrey (28), binomio que anotó 59 rayitas y seis triples. Con ellos dos casi al tope de sus posibilidades, se sabía que las huestes de Raudel Balaguert serían un hueso duro, como realmente fueron, solo que necesitaron, entre otros factores, un mejor juego colectivo para resistir más ante el elenco naranja.

Según publicó el periódico Vanguardia, en la mitad inicial «las malas decisiones con el balón en posesión condujeron a los Lobos —Villa Clara— a acumular pérdidas, y un pésimo balance defensivo alimentó la ofensiva de los Toros», lo que desencadenó en la ventaja de 16 puntos. Dicha publicación relató los instantes finales así: «un error en pase de Villa Clara que derivó en triple de Borlot —Legismel—, una excelente defensa de Abreu sobre Oliva, forzando una pérdida de Artemisa y otros dos tiros libres de Boffil, para sellar el definitivo 95-92».

Luego de concluido el cuarto desafío, se procedió a la selección del Jugador Más Valioso de la final: el interior Cubilla, quien se incluyó en el Quinteto Ideal de la postemporada, junto a Mario Luis Troyano (refuerzo espirituano de Capitalinos), Oliva, Bofill y el artemiseño Joice Daudinot. En la edición precedente el Jugador Más Valioso recayó en Andy Bofill.

De acuerdo con las informaciones ofrecidas por nuestro estadístico Benigno Daquinta, el refuerzo avileño Vanier Reyes, con el cetro de la escuadra naranja, empató con su coterráneo Yoan Luis Haití en más finales y títulos en la LSB. Ambos han jugado 15 discusiones por la corona y han vencido en 12 ocasiones. Todas las finales del «Papa» Haití fueron de forma sucesiva, algo extremadamente difícil de igualar, mientras Reyes participó en 13 seguidas.

Vanier también tiene el mérito de ser el único jugador con títulos en tres equipos diferentes (Centrales, Ciego de Ávila y Villa Clara). Igualmente, él y su co- provinciano Yasser Rodríguez —refuerzo de los Lobos— se convirtieron en el tercer y cuarto atletas en ser campeones con dos provincias. Antes lo consiguieron el avileño Dayner Martínez —con su territorio y con Pinar del Río en 2017— y Bofill, quien hace 12 años fue monarca con los Búfalos avileños.

Definido el titular del certamen masculino, este viernes se sabrá en la Ciudad Deportiva qué elenco será el nuevo dueño de la diadema de la Liga Superior femenina. Capitalinas y Guantánamo poseen dos triunfos por bando, luego de que las habaneras perdieron sus dos primeros encuentros en la sala Rafael Castiello y emparejaron la serie en sus predios.

El nuevo monarca del certamen femenino se conocerá hoy cuando se midan por quinta vez Capitalinas y Guantánamo. Foto: Abel Rojas Barallobre

A priori, las anfitrionas parten con la ventaja anímica de haberse repuesto a par de reveses como visitantes. Sin embargo, algo muy cierto es que ambas escuadras están en igualdad de condiciones en cuanto a triunfos, por lo que una victoria de Guantánamo podría ser lo más normal del mundo.

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