23
Representantes de los medios de prensa nacionales, y de las provincias de Ciudad de La Habana y La Habana, denunciaron la arbitraria decisión del gobierno norteamericano. Foto: Franklin Reyes
Cientos de periodistas cubanos se reunieron anoche en el Monte de las Banderas, frente a la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana, para protestar contra la decisión del gobierno norteamericano de liberar al terrorista confeso Luis Posada Carriles.«Para el pueblo cubano es inadmisible aceptar que ese asesino ande suelto hoy por las calles de Miami, mientras cinco jóvenes cubanos continúan cumpliendo injustas condenas en cárceles estadounidenses por evitar que se cometan acciones terroristas contra los pueblos latinoamericanos», dijo Juvenal Balán, fotorreportero del diario Granma.
José Alejandro Rodríguez periodista de este diario, se refirió a varios crímenes cometidos por Posada Carriles en diferentes partes del mundo, lo que evidencia que su liberación es una amenaza para la paz mundial y una burla a la justicia.
«En Italia hay un balón de fútbol inerte, sin las traviesas fintas de Fabio Di Celmo. En Venezuela hay carne magullada, cicatrices de torturas con la autoría de ese orfebre de la violencia de nombre Luis Posada Carriles. Y hay más: maternidad sesgada en sus umbrales. En Centroamérica, jóvenes extirpados de este mundo...», manifestó José Alejandro.
Y habrían sido muchos más los muertos —agregó— si no hubiéramos aprendido a defendernos y preservarnos. Sería mi hija, tu padre, su hermana, e incluso, quien ahora blasfema en una esquina. En un segundo un cruel zarpazo, y en tres días de gracia una orgía de sangre.
Otro colega que alzó su voz para condenar el doble rasero de la política norteamericana en su supuesta lucha contra el terrorismo fue Jean-Guy Allard, reportero de la publicación Granma Internacional.
«Los dos últimos años que ha pasado Posada Carriles en prisión pueden catalogarse como una obra de teatro. Su caso pasó de mano en mano, y al final: sube el telón, baja el telón, y el terrorista libre nuevamente en Miami.
«Hasta Alberto Gonzales, fiscal general de Estados Unidos, estuvo al lado de este criminal. Cuando le preguntaron recientemente por qué no declaraba a Luis Posada como terrorista, dijo que le faltaba información para tomar una decisión como esa, con el gran historial de asesinatos y atentados que tiene ese sicario», dijo.
José A. Martín, vicepresidente de la Unión de Periodistas de Cuba, denunció que abrir las rejas a Posada Carriles es estimular la impunidad, la misma que ampara a quienes asesinan anualmente a cientos de periodistas en el mundo por denunciar a matones como Posada Carriles.
En estos momentos —expresó— algunos reporteros de la publicación Por Esto, en México tienen su vida en peligro. Fueron ellos quienes denunciaron la entrada en territorio norteamericano del terrorista. Ahora, ese sanguinario anda suelto y, de seguro, querrá mucha sangre para saciar su sed de venganza.
