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A la altura de Martí y nuestro tiempo

En su edición número 40, trascurren por estos días en el país las sesiones del Seminario Juvenil de Estudios Martianos. Yusuam Palacios, presidente de ese movimiento juvenil, adelantó algunas de las proyecciones para el 2015

Autor:

Héctor Carballo Hechavarría

HOLGUÍN.— Hacer de cada evento y actividad para la promoción de la cosmovisión martiana un escenario cada vez más atrayente, útil e interesante para los jóvenes, constituye el reto y el deber principales de los integrantes del Movimiento Juvenil Martiano (MJM) en el año del aniversario 25 de su constitución.

Así lo afirmó aquí Yusuam Palacios Ortega, presidente de ese movimiento juvenil, quien precisó que el MJM se encuentra inmerso en los preparativos de su Consejo Nacional —se efectuará entre los días 12 y 13 de diciembre— con el objetivo de aprobar la estrategia de trabajo para el año 2015.

«Podemos ser más eficaces no solo en la convocatoria y la divulgación de nuestras actividades, sino en las formas, el estilo con que las organizamos y realizamos. Para que no nos asocien con un evento meramente academicista, sino con un espacio que puede aportar mucho a la formación cultural, al bienestar espiritual de los jóvenes», reflexionó Palacios Ortega.

Destacó que una de las mayores contribuciones del movimiento a la sociedad, durante los últimos años, a la par de la profundización en la vida y obra martianas, ha sido la reflexión y el debate constante sobre la contemporaneidad, la promoción del ejercicio del criterio desde basamentos históricos, culturales, patrióticos, algo que jamás ha dejado de tener atractivo entre la juventud.

«Somos ante todo un movimiento cultural, y la cultura martiana es la cultura del hombre que necesitamos hoy en Cuba para seguir construyendo la sociedad socialista que queremos continuar construyendo», sentenció.

Entre las nuevas proyecciones del MJM, Palacios Ortega adelantó la necesidad de que los clubes procedan a una mayor evocación en la base de los más trascendentales acontecimientos de la historia reciente, junto con sus protagonistas y desde los mismos escenarios donde acontecieron o se desarrollaron.

Igualmente, promover el hábito de la lectura entre los niños, adolescentes y jóvenes, y conseguir un mejor posicionamiento de la vida del movimiento en las redes sociales e Internet.

«Lo conseguiremos en la misma medida que seamos capaces de acercarnos con un Martí contemporáneo, cercano a los intereses y expectativas de los jóvenes. Un Martí que no sea frío monumento, sino a la altura de lo que él mismo nos convocó: ser jóvenes de nuestro tiempo», aseveró Palacios.

Los jóvenes martianos holguineros concluyeron recientemente su evento provincial con la presentación de más de 50 ponencias defendidas por estudiantes de los distintos tipos de enseñanzas, jóvenes trabajadores, cuentapropistas y combatientes de las FAR y el Minint.

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