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Cobertura especial: ALBA-TCP, enfrentar juntos los nuevos desafíos (+ Fotos y Video)

La Conferencia de Alto Nivel sobre Economía, Finanzas y Comercio dentro del marco de la COVID-19 fue convocada por la Alianza Bolivariana para los pueblos de América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP)

Autores:

Juana Carrasco Martín
Leyanis Infante Curbelo
Libia Miranda Camellón
Loraine Bosch Taquechel

El Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, participó en la Conferencia de Alto Nivel sobre Economía, Finanzas y Comercio dentro del marco de la COVID-19 convocada por la Alianza Bolivariana para los pueblos de América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).

El evento, que se efectuó de manera virtual este miércoles 10 de junio, fue promovido por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.

Este espacio fue propicio para debatir sobre la compleja situación económica global por el efecto de la COVID-19, a fin de establecer criterios y propuestas para enfrentar desde la Alianza los desafíos económicos regionales y globales.

Vea aquí la transmisión en vivo

Ante la crisis, la alternativa de los países de la región es unirse

El intelectual español, Ignacio Ramonet, al intervenir en el cierre de la reunión virtual, comentó que, en su opinión, la pandemia es una fase de la crisis general que vive el mundo y que tiene tres tiempos: el sanitario, el económico, y el político-social.

En EE. UU. por ejemplo ya están en el tercer tiempo, pues a la pandemia, y a la crisis económica que están viviendo se les han unido las protestas sociales contra el racismo. Y ese mismo es el contexto global señaló.

Los especialistas coinciden que este escenario está teniendo dimensiones desconocidas, en relación con crisis mundiales previas, como por ejemplo la de 1929. La crisis actual se produce en los tres polos de desarrollo del mundo: Asia, Europa y Norteamérica.

A la vez, señala, están teniendo lugar simultáneamente una crisis de la oferta, pues las fábricas han estado cerradas por meses, y una crisis de demanda, ya que millones de personas han estado encerradas en cuarentena en sus casas, con una demanda reducida.

Este fenómeno no se había producido en el mundo, que se recuerde, solo en periodos de guerra y no era global, solo en los territorios afectados por el conflicto bélico, agregó.

Esto está provocando, entre otras cosas, un aumento del desempleo colosal: En EE. UU. se habla de entre 30 y 40 millones de desempleados, en Europa de entre un 15 y 20 por ciento; y una caída tremenda del PIB.

Al referirse a los países del hemisferio sur explicó que esta crisis sui géneris afecta a sus tres principales rubros de ingreso: las exportaciones de productos provenientes de la tierra, las remesas que envían los emigrados y el turismo, principal actividad económica de muchas naciones y una de las industrias más golpeadas por la crisis.

Otra condición desfavorable del sur es que sus capitales, ante el inestable escenario económico y financiero, han emigrado fuera del país, al norte, lo que provocaría una descapitalización grave.

Ante la crisis, reflexiona, la alternativa de los países de la región es unirse en dos reclamos fundamentales: primero, la condonación de la deuda externa, que en estos momentos es impagable, su anulación (como lo exigía Fidel Castro de forma muy lúcida en su momento, acota), o establecer una moratoria de pago por un periodo de tiempo.

El segundo es la interrupción en este contexto de las sanciones unilaterales impuestas por el gobierno de EE. UU. a países como Cuba, Venezuela, Nicaragua, Irá y Siria.

Es extraordinariamente importante relanzar el proyecto de soberanía alimentaria, como lo defendió el presidente Chávez y como insistió Fidel Castro. Es importante que los países tengan soberanía alienaría, que, para su alimentación, la población no dependa del exterior, agregó.

A propósito, mencionó el ejemplo de Vietnam, quien después de una cruenta guerra no solo logró autoabastecerse, sino es un gran exportados.

El ALBA debe reforzar lazos de ayuda mutua en los servicios públicos de salud, y consolidar estos servicios en cada país, pues ha quedado demostrado que son de gran ayuda en crisis inéditas como estas, concluyó.

Próximamente reunión conjunta del Consejo Político y el Consejo económico del ALBA-TCP

Nicolás Maduro propuso que se reúnan el Consejo Político y el Consejo económico del ALBA para el 29 de junio y celebrar los 15 años de PetroCaribe y ver las propuestas del día de hoy.

La tarea que nos espera incluye iniciativas a fin de llegar alcanzar los objetivos que nos hemos trazado

Peter David, canciller de la pequeña isla de Granada, mostró su satisfacción por los lazos con Venezuela y los demás países miembros del ALBA-TCP, y cuando el mundo está plagado por la pandemia de la Covid-19, expresó  también inmensa gratitud a los gobiernos de Venezuela, Cuba y China por su cooperación.

Han hecho tanto a pesar de los grandes retos y estaremos por siempre agradecidos, reiteró el representante granadino ante la reunión virtual que conduce desde Caracas el presidente Maduro y también incluyó en ese agradecimiento a la Organización Panamericana de Salud.

Reafirmó el compromiso con los principios del ALBA-TCP y aseguró que hay que fortalecer nuestro movimiento, la solidaridad y la cooperación que nos permitirán hacer frente a los retos de la Covid, y también a los problemas económicos que ella trae.

Queremos reafirmar —agregó— el compromiso con la región del Caribe como zona de paz, independientemente de las medidas negativas que asumen algunos países.

Peter David demandó el levantamiento del embargo (bloqueo) contra Cuba y de la retirada de la base de Guantánamo y también de las sanciones injustas e ilegales contra Venezuela.

El ALBA-TCP continuará avanzando y Granada se ha beneficiado de su asistencia durante años, expuso el Canciller, quien dijo que en estos momentos ya han recibido un apoyo esencial de Venezuela en insumos médicos y de Cuba con personal médicos, por lo que estarán eternamente agradecidos, pues esto, como pequeña isla, es esencial para lograr el desarrollo en nuestros pueblos.

La Covid 19, apuntó, es una crisis de salud global que se ha desarrollado en una crisis económica y como muchas naciones Granada enfrenta la crisis, por lo que tiene que dar apoyo a los más vulnerables, especialmente a los trabajadores de la económica informal y necesitan recursos para lograr recuperación de la economía.

Por lo tanto, Peter David hizo un llamamiento en pro de la solidaridad, el diálogo y las acciones creadoras. La respuesta contra la crisis debe ser decisiva y ayudar a las naciones que necesitan recuperación económica.

En este contexto de una visión común tenemos acciones comunes que deben concentrarse en el sector público y la respuesta económica, para que el tratamiento de la enfermedad y las vacunas resulten accesibles a todos.

Cooperación dentro del ALBA para recuperar nuestras economías, a la vez que ampliar los servicios sociales productivos y de todos los sectores que luchen contra la Covid.

Pidió desarrollo de la ciencia y tecnología para mejores industrias en el sector de la salud y en el entrenamiento e intercambio entre los estados miembros, al igual que aumentar colaboración y creación de capacidades entre los estados miembros.

Nuestra colaboración y solidaridad son importantes para alcanzar el futuro sostenible por el que trabajamos para nuestros pueblos.

Con el trabajo mancomunado impediremos la propagación del virus y sus efectos en los más vulnerables, hay vidas en juego, advirtió.

La tarea que nos espera incluye iniciativas a fin de llegar alcanzar los objetivos que nos hemos trazado.

Participación de jóvenes y mujeres para impedir la muerte de nuestros ciudadanos. Desarrollo sostenible, tolerancia  y respeto para todos, concluyó el canciller de Granada.

Volveremos hecho millones

El líder boliviano Evo Morales agradeció a Nicolás Maduro por la invitación especial a esta conferencia virtual, y saludó a todos los participantes.

De igual forma reiteró varias de las ideas y propuestas presentadas por los mandatarios en sus intervenciones.

Se refirió a la situación que se vive en Bolivia hoy, y a la responsabilidad de garantizar las elecciones generales que están programadas para el 6 de septiembre.

En ese sentido comentó que era importante que conocieran que la línea de la política norteamericana y de la derecha es que no haya elecciones, y al mismo tiempo deponer la Constitución existente mediante un decreto ley y dejar a un lado nuestro Estado plurinacional, la meta es que el MAS no vuelva al gobierno ni Evo a Bolivia, destacó.

Al margen de la situación económica que existe informó que en Bolivia han comenzado a privatizar las obras que se construyeron y a paralizar las empresas públicas. El pueblo boliviano se siente ofendido, afirmó.

La vida no es una mercancía, debemos garantizar la vida, aseguró el líder boliviano.

Propuso al ALBA-TCP, hacer una campaña internacional para que los Estados o la OMS se hagan cargo de la industria de medicamentos, las investigaciones científicas, porque esas cosas no pueden estar en manos privadas, señaló.

Tenemos muchas responsabilidades, aseguró.

Una vez más reiteró el agradecimiento por la invitación.

Desde acá les acompañamos y apoyamos, cuenten con el pueblo y los movimientos sociales de Bolivia para volver. Devolveremos la libertad al pueblo, afirmó.

El ALBA fue pensada para la solidaridad

Durante su intervención, el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega Medina, recordó que el Alba, fruto de la iniciativa de Fidel Castro y Hugo Chávez, fue pensada para la solidaridad, para fortalecer las economías de aquellos pueblos que estuvieran dispuestos a unir esfuerzo y complementarse.

Nunca fue un proyecto pensado para hacer negocios en detrimento de otros pueblos o hacerles daño a otros pueblos del mundo, todo lo contrario, el alba le llevó a otros pueblos bienestar en el campo de la salud, la educación, el energético… y una fluidez en el intercambio en el orden comercial, agregó. Es un proyecto cuyo su ejemplo lo volvía más potente, por eso es que el imperio se lanzó en su contra.

¿Quién puede dudar que hoy más que nunca queda al descubierto lo que es la esencia egoísta, la esencia esclavista (porque sabemos que hay diversas formas de esclavitud), del capitalismo salvaje?, señaló

Pensaban que era la única alternativa que debía imponérsele a los pueblos del mundo, y por eso se lanzaron contra el Alba, y la batalla del imperio contra Venezuela arreció, por el peso específico de Venezuela en la región.

Los que aquí hemos escuchado a los representantes de pequeñas naciones como San Vicente y las Granadinas, Aantigua y Barbuda, Cuba, entre otras, DÍaz-Canel, con poblaciones muy pequeñas, que con esfuerzo han venido luchando para desarrollarse, tenemos que destacar su fortaleza, su dignidad, pues no hay pueblo por pequeño que sea que no tenga fortaleza y dignidad para asumir los mayores desafíos.

En estas circunstancias en que se ha desatado esta epidemia global queda al descubierto la naturaleza del capitalismo salvaje, y que parecía que venía bien, organizando sus políticas, sus estrategia en el campo económico y comercial.

¿Quién podía pensar que en estos países desarrollados iba a quedar al descubierto la falta de sensibilidad, la falta de respeto a los derechos humanos de sus ciudadanos con esta pandemia? Quedó al descubierto que países que debían contar con sistemas de salud de primera línea, disponibles para sus pueblos, esos sistemas de salud no estaban disponibles realmente para sus pueblos y ante una pandemia como esta faltaban equipos, camas, espacios.

Parecía el comportamiento en el campo de la salud de países subdesarrollados. Claro, tienen la capacidad por la riqueza acumulada, de poder disponer de sumas multimillonarias en casos de emergencias para paliar el impacto económico y social, pero más difícil les ha sido completar la atención en la salud a sus ciudadanos. Pues no existía un sistema de salud público de calidad para poder enfrentarse a una epidemia como esta, detalló.

Es explicable que en los países en vías de desarrollo la situación fuera más difícil. Sobre todo porque a estos pises se les ha impuesto la dinámica del capitalismo salvaje, la privatización de la salud, sin embargo países como Cuba, Venezuela, Nicaragua, duplicamos nuestras unidades de salud y de capacidades desde años atrás, y hemos podido ir saliendo airosas de este gran reto.

A nosotros nos impacta todo, pero con la diferencia de que en el Alba, partiendo del principio de solidaridad, contamos con las herramientas para poder enfrentar estos desafíos. Está clara la crisis económica provocada por las deficiencias estructurales del capitalismo salvaje, que no estuvo preparada para enfrentar la pandemia, ni para unir y liderar fuerzas en el mundo para hacerle frente.

Las economías de estos países también han sido sacudidas, y eso, claro, afecta el comercio mundial. De ahí que esta convocatoria del presidente Maduro resulte oportuna, y es indispensable conformar ya el grupo de trabajo dentro del Alba, para enfrentar este tipo de evento epidemiológico.

A la par, retomando en las nuevas circunstancias los retos que nos hemos planteado en los campos económicos, comerciales, que son indispensables para salir adelante, en momentos donde la afectación económica está sacudiendo a muchos países, fundamentalmente a los más empobrecidos.

Se refirió a la intensificación en este contexto de las agresiones por parte de EE. UU. al pueblo venezolano, cubano y nicaragüense, en franca violación de los derechos humanos.

Contra Nicaragua han continuado sus agresiones, para buscar cómo asfixiar al país. Pero nuestro pueblo tiene una historia de lucha contra el colonialismo, contra el expansionismo norteamericano, contra los golpes de Estado articulados por gobernantes norteamericanos, una historia de batalla que nos dice con toda claridad que estos pueblos ni se venden, ni se rinden, señaló.

Concluyó enviando sus condolencias a todas las familias que, tanto por la pandemia como por otras causa, han perdido seres queridos en estos momentos de emergencia internacional.

Compromiso con la unidad para enfrentar los desafíos y las injerencias

Gaston Brown, primer ministro de Antigua y Barbuda, consideró la necesidad de mantener un mayor nivel de solidaridad dentro del ALBA-TCP.

Tenemos que ver nuestras fortalezas y debilidades. Somos naciones que dependemos muchísimo del turismo y este servicio se ha visto afectado por el cierre de las fronteras y ha creado problemas, aseguró al señalar que Antigua y Barbuda ha visto reducir sus ingresos, lo que podría quebrar a cualquier país, porque lo que están viendo abrir paulatinamente las fronteras para ir mitigando la afectación económica.

Apuntó que en la región del ALBA hemos tenido niveles muy bajos de infección, de 0,8, a pesar de los desafíos y de las sanciones y los efectos de la Covid-19, que ha sido un problema para todos nuestros países, a lo que agregó que debían celebrar que la región ha visto un reducido número de muertes, debido a la gran cooperación de los paises del ALBA.

Al respecto agradeció al presidente Maduro por la asistencia con pruebas y medios de protección personales y al presidente de Cuba, Miguel Diaz Canel por compartir experiencias con el personal médico y enfermeras que son parte del arsenal con que Antigua y Barbuda cuenta para combatir la Covid-19.

Este es el nivel de cooperación que se requiere no solo desde la salud, también desde el desarrollo podemos continuar compartiendo experiencias y recursos, dijo Gaston Browne.

En otro aspelcto, señaló que una de las lecciones que nos deja esta pandemia es que necesitamos trabajar en la seguridad alimentaria y convertirnos en países resilientes en este sentido, por lo que necesitamos aumentar los sectores productivos para no tener que depender de las importaciones y al mismo tiempo tratar de solucionar los problemas de la pobreza y el hambre.

Este es una esfera en la que podemos cooperar para ser más autosuficientes en el periodo posterior a la pandemia.

Puntualizó que hay esferas en las que debemos dar prioridad para poder resarcimos de los efectos, por ejemplo en el campo del comercio y necesitamos mostrar mayores niveles de solidaridad a nivel mundial, porque estamos viendo unilateralismo ante la pandemia y no estamos viendo el nivel de solidaridad global que se necesita para enfrentarla.

Entre varias propuestas que hizo el primer ministro de Antigua y Barbuda destaca que el ALBA trabaje para lograr una vacuna universal, en lo que deben trabajar todos los países del mundo, y sin embargo hay una guerra en relación al desarrollo de una vacuna, cuando hay países que pueden dedicar mucho dinero para desarrollar una vacuna y nos dejarán al resto en el riesgo de seguir contrayendo la pandemia.

Por tanto, sostuvo que se debe demandar que una vez que exista una vacuna esta sea puesta a disposición de todos los países y todos los pueblos, y como países vulnerables debemos centrarnos en esta idea que el Alba defienda esto y los países en desarrollo también se unan a nosotros para acceder a cualquier vacuna.

Ante la importancia de reiniciar los vuelos internacionales, dijo que debemos poder compartir los protocolos con los demás miembros para que puedan abrir sus fronteras y también establecer un puente entre los países del ALBA porque los riesgos que enfrentamos son similares. El riesgo de la Covid es igual para todos nuestras poblaciones, y debemos establecer un puente de protocolo y medidas para que no siga siendo un riesgo.

Gaston Browne propuso que los países del ALBA deben intercambiar con China, un país en desarrollo y con recursos que puede brindarnos los recursos que nos permitan enfrentar nuestros desafíos.

Hizo especial referencia a lo que ha pasado con las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela, contra Cuba y lo que pasó en Dominica intentando influir en el desarrollo de las elecciones; y denunció que en San Vicente y las granadinas también tratarán de intentar que el primer ministro pierda las elecciones.

El gobierno de EE.UU. —dijo— ha decidido retirar la asistencia sobre la base de que tienen una deuda de más de 50 años, de cuando Antigua y Barbuda era una colonia, y buscan  razones y argumentos y es por eso que tenemos que mostrar solidaridad porque la Covid-19 nos ha dejado más vulnerables desde el punto de vista económico y social y Estados Unidos querrá aprovechar la oportunidad. Enfatizó en la necesidad de que la Celac vuelva a ser funcional.

Venezuela también quería establecer relaciones más estrechas con Rusia para obtener más ingresos y ayudar a los demás países del ALBA para tener más producción. Si hay algo que podamos hacer en tal sentido para a provechar todas las oportunidades, pues necesitamos ingresos para poder enfrentar la Covid 19.

También abogo por acercarnos a China para buscar recursos para los países del ALBA, en el contexto de que las organizaciones internacionales financieras no están resolviendo el problema, por ejemplo Dominica recibiendo ciertos fondos, pero no sé si serán suficientes, comentó.

Hemos perdido el 70 por ciento de los ingresos de nuestras economías por el turismo. No hemos recibido ni un centavo del Banco Mundial, ni de ninguna institución financiera y necesitamos socios que nos ayuden y mantener un nivel de cooperación con China lo que nos permitiría ser menos vulnerables y obtener recursos para nuestras economías, señaló.

Invito a China a que celebre un foro Alba-China para poder  hablar de la cooperación. También utilizar las tecnologías, tener una plataforma de intercambio digital para incentivar, también fuera de la región del ALBA, de China, Rusia y otros países que puedan trabajar con nosotros e invertir en nuestros países.

Tenemos muchísimas cosas que hacer no es tiempo de quedarnos sin hacer nada o mostrar pánico, mantenernos juntos como grupo trabajar con solidaridad y tener reuniones periódicas para poder ayudarnos unos a los otros.

Todos tenemos recursos limitados —señaló Gaston Browne—, altos niveles de deuda que nos hace muy vulnerable, pero si intercambiamos experiencia, conocimientos técnicos y colaboramos podemos reducir nuestras vulnerabilidades, y aquellos que tratan de aprovechar la Covid para intervenir en nuestros países, no tendrían éxito.

Reiteró el compromiso de Antigua y Barbuda especialmente con Venezuela y Cuba y en contra de las sanciones aplicadas por el gobierno de Estados Unidos.

De igual forma reiteró la necesidad del apoyo a San Vicente y las Granadinas y la disposición a ayudar en cualquier acción en beneficio y el intercambio de experiencia y conocimientos para enfrentar los desafíos de la Covid-19.

Que la producción y distribución de la vacuna sean una prioridad para el ALBA-TCP

El Presidente de Venezuela Nicolás Maduro propuso al ALBA-TCP en esta conferencia de alto nivel que la vacuna y el tratamiento contra la COVID-19 fueran una prioridad, y se desarrollaran en alianza con China, Rusia, y las universidades que la producen.

Se trata de ir dos y tres pasos más adelante en este tema, para que una vez que exista la vacuna y se tenga acceso inmediato, pues se garantice desde el ALBA su distribución a millones de personas, a todos los pueblos del ALBA y el Caribe, destacó.

Tener una garantía para nuestros pueblos contra el coronavirus y asumirlo como prioridad en esta reunión, afirmó.

Esta pandemia significa un reto para todas las naciones

Roosevelt Skerrit, primer ministro de Dominica, ratificó el total respaldo de su nación a Cuba y Venezuela. De igual forma condenó el ataque terrorista contra la embajada de Cuba en Estados Unidos. 

Skerrit dijo que en los últimos años el ALBA-TCP ha afrontado grandes problemas tanto económicos como desastres naturales, así como ataques de distintos países.

Añadió que la Alianza es solidaridad no solo en momentos buenos sino en los malos. Reiteró el apoyo de Dominica a Ralph Gonsalves, primer ministro de San Vicente, país donde próximamente se realizarán elecciones.

Explicó que todos comprendemos que esta pandemia significa un reto para todas las naciones, pero como países progresistas ponemos en primer lugar al pueblo que son los más expuestos al os efectos de esta pandemia.

Destacó el papel de organizaciones como la OMS y la OPS, gracias a las cuales muchos países han podido avanzar. Recalcó, además el liderazgo de Venezuela que a pesar de sus retos económicos ha practicado la solidaridad. Reconoció el apoyo de Cuba con el suministro de profesional médico calificado a otros países.

Expuso que la complementariedad, la solidaridad y trabajar juntos será esencial para superar esta crisis, creo que el Alba ha demostrado su capacidad para enfrentar los retos porque nos expresamos de una manera tangible y hemos trabajo mancomunadamente en los periodos difíciles.

«Esperamos vernos físicamente muy pronto una vez que hallamos superado la peor parte de la Covid-19», expresó.

Este es un periodo que nos pone a prueba a todos

El primer ministro de San Vicente y las Granadinas, Ralph Everard Gonsalves, agradeció la oportunidad de participar en esta reunión en un momento donde enfrentamos un periodo difícil.

Cuando la COVID-19 fue declarada una pandemia el 11 de marzo pasado, casi todos, con toda razón, pensamos que esta pandemia era un reto que teníamos en mucha dimensiones, y que interrelacionaba mucha áreas como la salud, la economía, la seguridad y que habría interconexiones mundiales regionales y nacionales.

La pandemia ha llegado en un momento en el que las contradicciones con el capitalismo monopólico y el neoliberalismo se agudizan cada vez más. Es tan así que el imperio norteamericano intensificó sus acciones contra Cuba y Venezuela, y están buscado cambios de gobierno en estos países, especialmente en Venezuela.

Nosotros enfrentamos una situación en la que todos los problemas prexistentes y que se derivan de nuestras condiciones de subdesarrollo se han exacerbados. En lo que se ha convertido, metafóricamente hablando, en un baño de sangre económico.

En muchos países vemos una caída de los ingresos en un 50 por ciento. En nuestro país ha habido una caída del 18 por ciento. Hay muchos problemas sociales y económicos a los que hacer frente.

Durante la primera parte de este año hemos enfrentado la mayor sequía en 50 años, por lo que nuestra agricultura se ha visto muy afectada. Entonces llegó la COVID-19. Además, el 1ro de junio comenzó la temporada ciclónica, y es una temporada que se prevé sea muy activa, explicó.

Cuando se toma nota de estos hechos: los retos de la sequía para la actividad económica, la pandemia, y los recursos que habrá que invertir producto a los desastres naturales, nos damos cuenta de que no tenemos hacia dónde virarnos si no es para nosotros mismos. Nosotros tenemos un banco en el caribe oriental, que está aportando fondos, pero no muchos.

Tenemos el Banco para el Fomento del Caribe, pero no está muy capitalizado y también recibimos apoyo del Manco Mundial, explicó. El que vivimos es un periodo sumamente difícil, no quiero calificarlo como una crisis, pero no sabemos cómo esto va a terminar finalmente, y no conocemos aún el alcance de social de este problema.

El Alba-TCP no tiene la fuerza que tuvo hace unos años, pero nos tiene a nosotros, y tenemos que tendernos la mano y ver cómo podemos ayudarnos. En este aspecto Cuba ha sido magnífica, y nos ha bridado su aporte con su personal de salud, dijo, y agradeció al pueblo y gobierno de Cuba por su colaboración.

Creemos una muy buena idea la propuesta de Italia de otorgar a Cuba el premio Nobel de la Paz. Instó a los miembros del Alba-TCP a no lamentarse y a analizar qué se puede hacer de conjunto, y qué tipo de ayuda se pueden ofrecer los países miembros entre sí.

Establecer cooperación en las áreas tradicionales como la salud, educación, etc, pero también en la transportación y el comercio. Este es un periodo que nos pone a prueba a todos en nuestros respectivos países, y pone a prueba también al Alba, por lo que nos insta a fomentar nuestros lazos de colaboración y de trabajo.

Pueden estar seguros de que San Vicente y las Granadinas, y este gobierno, vamos a seguir siendo firmes en este propósito, concluyó Este año hay elecciones en nuestro país y es posible que através del nuevo gobierno que se elija le Imperialismo trate de sacar a San Vicenet y las Granadinas de este organismo integrador.

El ALBA-TCP ratifica su solidaridad con el gobierno y el pueblo de Cuba

Nicolás Maduro Moros; presidente de la República Bolivariana de Venezuela, envió un abrazo al General de Ejército Raúl Castro Ruz, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

De igual forma afirmó que el ALBA-TCP ratifica su solidaridad absoluta con el Gobierno de Cuba ante el ataque terrorista que sufrió su embajada en Estados Unidos, en Washington D.C., y repudiamos el silencio cómplice del Gobierno de Estados Unidos ante este hecho.

Propuso, además, realizar una reunión conjunta del Consejo Político y del Consejo de Complementariedad Económica del ALBA-TCP para darle concreción a todas las propuestas que están surgiendo en esta cita virtual.

Una pandemia que solo puede ser enfrentada con dos fuerzas al alcance de todos: cooperación y solidaridad

El Presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez inició su intervención agradeciendo al hermano Nicolás Maduro Moros, Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, por su convocatoria a esta Conferencia económica del ALBA-TCP.

Urge intercambiar experiencias y concertar posiciones para enfrentar juntos los efectos de la COVID-19, una pandemia que amenaza con profundizar significativamente la crisis multisectorial que sufren nuestras sociedades, en particular en el ámbito económico, destacó.

Por más que se prevé una afectación global, nadie discute que quienes sufrirán más las consecuencias de la crisis son las naciones del Sur, porque al pesado lastre del subdesarrollo y el endeudamiento se añaden las medidas coercitivas unilaterales a las que algunos de nosotros estamos sometidos, en el contexto de un orden internacional injusto, que compromete el desarrollo sostenible de nuestros pueblos, afirmó.

Desde principios de año asistimos a una dolorosa clase de Economía Política global.

Cada especulación financiera para obtener con ventaja medicamentos o medios de protección que todos necesitan; cada solicitud de ayuda sin respuesta; cada muerto sin tumba conocida —tragedias todas sobre las que hemos sabido a través de los más diversos medios. Cada barco al que se le cerraron los puertos; cada avión que no encontró pista para aterrizar; cada persona contagiada a la que se le exigió dinero para tratamiento, es una expresión del egoísmo y la injusticia de modelos económicos de un sistema, cuyo único fin es enriquecer minorías a costa del sufrimiento de las mayorías, aseguró.

En naciones desarrolladas de la Unión Europea, que han sido terriblemente golpeadas por la pandemia, muchas personas hablan de separación del bloque, porque sienten que la integración comunitaria no ha funcionado ante la emergencia, dijo.

Increíblemente, el mundo súper desarrollado, el que roba cerebros y deslumbra con el brillo de producciones sofisticadas, se ha mostrado incapaz de emplear sus descomunales recursos en la construcción de un frente global contra una pandemia que sólo puede ser enfrentada con dos fuerzas al alcance de todos: cooperación y solidaridad, afirmó el mandatario cubano.

Más adelante señaló que lo que podría ser una fortaleza añadida para países económicamente fuertes, ha terminado siendo una debilidad en la percepción de varios ciudadanos, por carencias éticas fundamentales.

Hoy pueden verse claramente las diferencias entre gobiernos que han defendido y fortalecido el estado como garante de estabilidad social, y los que, empujados por las teorías neoliberales, lo achicaron recortando las prestaciones sociales, los servicios públicos de salud y las investigaciones científicas, agregó.

China, con su eficaz respuesta a la epidemia en el país más poblado del planeta y sus aportes a la Organización Mundial de la Salud y a otras naciones, muestra la diferencia. Hasta aquellos que hablan despectivamente de un virus chino han sido favorecidos por la práctica solidaria de la gran nación, comentó.

En contraste, gobiernos que fueron muy eficaces para integrar sus mercados, sus finanzas, sus tropas y hasta para organizar invasiones extrarregionales, fallaron en la articulación de esfuerzos para salvar a sus propios ciudadanos.

Hoy el mundo entero paga el precio de los abusos del capitalismo en su versión salvaje. El más cercano ejemplo lo ofrece América Latina, convertida en epicentro de la pandemia, para revelarnos, en toda su crudeza, el costo de poner el destino de los pueblos en manos del mercado.

El modelo neoliberal, extendido en nuestra región, no ha podido atender las necesidades de la pandemia ni podrá enfrentar el escenario post COVID-19.

Los pueblos sometidos al fundamentalismo económico de derecha, hoy padecen los efectos de la reducción de los presupuestos destinados al sector de la salud, a la protección social, a la investigación científica y a la formación de personal médico y paramédico.

La experiencia de estos meses nos confirma que, con una administración adecuada de la política fiscal y sin descuidar los equilibrios macroeconómicos, el Estado cumple un rol principal e indelegable en el deber de proteger, regular y proveer los medios necesarios para enfrentar la crisis, salvar vidas, mantener la vitalidad de la economía, y al propio tiempo desarrollar programas de beneficio social. Los pronósticos económicos son tan dramáticos como los datos diarios de la pandemia.

La CEPAL prevé para final de 2020 una caída del 5,3% en la actividad económica de América Latina, ... Esto implica que la pobreza alcanzaría en América Latina, la región más desigual del planeta, al 34,7% de su población (214,7 millones), la pobreza extrema a 13% (83,4 millones).

Ojalá fueran sólo números, pero hablamos de seres humanos. Millones de personas que van a sumarse a las grandes masas de excluidos exacerbando los graves conflictos actuales.

El momento y el sentido común imponen a la comunidad internacional dejar a un lado las diferencias políticas y, unidos, buscar soluciones mancomunadas, mediante la cooperación internacional y la imprescindible solidaridad.

La prioridad de nuestros gobiernos en la actual coyuntura debe dirigirse al fomento y desarrollo de la producción de alimentos, con énfasis en producciones locales que garanticen el autoabastecimiento y que demanden bajos niveles de importación.

Se requiere una mayor prioridad e inversión estatal en el sector de la salud, avanzando en el acceso universal y gratuito de la población a los servicios básicos de salud. Nuestro líder histórico, Fidel Castro, lo dejó dicho y escrito en innumerables pronunciamientos: en vez de invertir tanto en el desarrollo de armas cada vez más sofisticadas, los que tienen los recursos debieran promover las investigaciones médicas y poner al servicio de la humanidad los frutos de la ciencia, creando instrumentos de salud y de vida y no de muerte”.

Debemos identificar las potencialidades de cada uno, en función de una integración económica regional que priorice la complementariedad, produciendo cada país lo que le resulte más competitivo e intercambiando bienes y servicios.

Cuba se salva y aporta a la salvación de otras naciones bajo esa filosofía. Los países del ALBA-TCP pueden hacer mucho.

La solidaridad es indispensable y no ha faltado en estos años, pero urge perfeccionar las estructuras institucionales del frente económico del ALBA-TCP para establecer una agenda económica a corto y mediano plazos, .diseñar incentivos y trabajar con mayor agilidad y flexibilidad en la identificación de oportunidades y proyectos conjuntos. Tenemos la voluntad política para llevarlo a cabo y la capacidad demostrada de cooperar y complementarnos, todo lo cual puede multiplicarse.

La “nueva economía real” precisa de un enfoque más productivo y menos inclinado a la actividad financiera. Los financiamientos han de canalizarse hacia la generación de bienes y servicios, propiciando que “se gane más produciendo, que moviendo el dinero.

Y ya que nuestros históricos adversarios la emprenden contra la concertación global tan indispensable hoy, nos corresponde promover y fortalecer el multilateralismo y apoyar la gestión de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud.

Cuba ofrece, modestamente, las experiencias de nuestra estrategia nacional para superar los efectos de la Covid-19 y, en paralelo, enfrentar la crisis económica que amenaza al mundo entero y será más grave para los que somos víctimas de bloqueos genocidas.

A pesar de la compleja situación que atravesamos, Cuba no ha renunciado a los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el año 2030 por el bienestar, desarrollo y prosperidad del pueblo.

Mientras en el resto del mundo el 80 por ciento de los pacientes graves y críticos muere, la ciencia y la medicina cubana han salvado el 80 por ciento de los pacientes críticos y graves contagiados con el virus SARS-CoV-2.

El aporte de la biotecnología cubana y de otros sectores de la ciencia ha resultado determinante. Nuestros talentosos científicos, con sus investigaciones y productos farmacéuticos de nueva creación, han derrotado literalmente a la muerte.

Y eso se ha logrado sin renunciar a la práctica internacionalista de compartir lo que tenemos. La descomunal y mendaz campaña del gobierno de los Estados Unidos contra la colaboración médica cubana, que privó de servicios de salud a poblaciones vulnerables de Brasil, Bolivia y Ecuador, donde la pandemia está provocando fuertes estragos, ha sido derrotada. En este instante, 34 brigadas médicas cubanas integradas por más de 2 mil 500 cooperantes contribuyen de manera solidaria a mitigar el impacto de la pandemia en 26 naciones, a pedido de sus gobiernos. Ellos se suman a los más de 28 mil profesionales de la salud que ya prestaban servicios en 59 países antes de la COVID-19.

Ninguno de esos aportes es reconocido por el gobierno de los Estados Unidos, cuya administración ha recrudecido el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba, con nuevas medidas coercitivas dirigidas a dificultar aún más el esfuerzo nacional de enfrentamiento a la pandemia y para la recuperación.

La paz y la seguridad regionales también se encuentran amenazadas. La administración norteamericana rehusó pronunciarse públicamente y con claridad ante un acto terrorista ocurrido en la capital de ese país contra la Embajada de Cuba, lo que confirma la actitud de complicidad y contubernio con quienes promueven actos violentos contra nuestros países, y ratifica que el lenguaje agresivo e incitador de posiciones extremas y violentas cumple objetivos estratégicos del actual gobierno estadounidense.

La actual administración insiste en dedicar recursos y energías a sus maquiavélicos planes de intervenir en Nuestra América.

En lugar de atender las justas demandas de decenas de miles de personas que, dentro y fuera de los Estados Unidos, se pronuncian pacíficamente frente a los abusos policiales, el racismo, la xenofobia y el desprecio presidencial por los excluidos del “sueño americano”.

La hermana nación venezolana ha sido víctima de múltiples agresiones en contravención de las normas y principios del Derecho Internacional, consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, y de los postulados de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz.

Despierta indignación el carácter despiadado de las medidas económicas coercitivas que unilateralmente aplica el gobierno de los Estados Unidos contra Venezuela.

Cuba reafirma su pleno respaldo al Presidente Nicolás Maduro y a la Unión Cívico-Militar del pueblo bolivariano y chavista.

No menos repudiables son las medidas contra el pueblo de Nicaragua, con el objetivo de impedir su bienestar y seguridad.

Expresamos una vez más nuestra solidaridad con el Gobierno de Reconciliación y de Unidad Nacional de la hermana República de Nicaragua, presidido por el comandante Daniel Ortega.

Reiteramos nuestra solidaridad con los hermanos países caribeños, que padecieron los horrores de la esclavitud, la trata transatlántica y el saqueo colonial y neocolonial y que enfrentan hoy los retos resultantes del cambio climático, los desastres naturales, el injusto sistema financiero y la inclusión en listas de jurisdicciones no cooperativas, que ponen en peligro sus pequeñas economías.

Demandamos para ellos un tratamiento justo, especial y diferenciado. El Caribe encontrará siempre en el ALBA-TCP una plataforma de articulación, cooperación y complementariedad para la defensa de sus legítimos reclamos.

La realidad que afrontamos requiere solidaridad contra el egoísmo. No hay modo de rendir, ni siquiera con la rodilla sobre el cuello, a los pueblos que aprendieron a respirar la libertad conquistada con la sangre de sus mejores hijos y se deciden a luchar unidos.

Estos tiempos difíciles deben motivarnos a continuar trabajando unidos con más cooperación y concertación. Este fue el sueño de nuestros predecesores y seguirá siendo una prioridad de nuestra Alianza. Trabajando juntos la victoria será nuestra, ahora y siempre.

Cepal: Urge la cooperación de los países latinoamericanos

Alicia Bárcenas, Secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), reiteró la vigencia de los objetivos del ALBA-TCP y reconoció que ya son 16 años de la creación de esta plataforma de integración de América Latina y el Caribe.

Tenemos un nuevo escenario desde todos los puntos de vistas y se hace necesario que tomemos medidas y acciones de forma urgente, destacó. En ese sentido presentó los diez mensajes que la Cepal está promoviendo y que analizan las diferencias que se acentuarán producto al paso de la pandemia por la región, tanto dentro como fuera de los países.

La funcionaria expresó el reconocimiento de la dificultad que ha traído consigo la crisis provocada por el coronavirus, entre otros efectos como la caída de la inversión, el deterioro de las capacidades productivas, un aumento del desempleo, etc.

Se espera, explicó, que el impacto en la economía traerá una caída de las economías sobre todo de América Latina, pues se estima que en el Caribe el decrecimiento sea menor. 

Y es que desde antes la región manifestaba un crecimiento bajo, limitado espacio fiscal y conflictos, de ahí que esta pandemia va a generar la peor recesión que la Cepal ha sufrido en su historia, explicó.

Tenemos un desarrollo muy desigual y los ingresos tributarios son indirectos básicamente pues están dirigidos al impuesto y al valor agregado de ahí que uno de los grandes problemas de nuestra región sea la evasión fiscal, comentó.

Estamos en un momento delicado en la región porque hay un mayor endeudamiento, afirmó.

Es por ello que a continuación llamó a la suspensión de la deuda externa que sería un gran alivio para la economía de los países de la región.

Alertó sobre la necesidad de la cooperación entre los países latinoamericanos, para poder contribuir a la disminución de la falta de recursos y el comercio exterior.

 

De igual forma subrayó los efectos de esta situación sobre las personas más vulnerables como los adultos mayores, pueblos indígenas, niños, etc. Destacó que el ALBA-TCP busca cerrar las grandes brechas sociales y resaltó el sistema de salud de Cuba que aseguró una efectiva respuesta a la pandemia.

Propuso la necesidad de la integración regional sustentada en principios de solidaridad, complementariedad y cooperación para generar las transformaciones estructurales y el sistema de relaciones necesarias para alcanzar el desarrollo integral.

En otro momento manifestó el rechazo de la Cepal a las sanciones impuestas a los países miembros del ALBA-TCP, como las medidas coercitivas unilaterales impuestas por el Gobierno de Estados Unidos contra Cuba, Venezuela y Nicaragua.

Por otra parte reconoció el gran ejemplo de Cuba al enviar médicos a otras naciones para apoyar al enfrentamiento de la COVID-19.

ALBA-TCP: siempre al frente de los procesos y las batallas de nuestro pueblo

 «Desde Caracas, capital de la patria de Bolívar les doy mi abrazo a todos nuestros hermanos y hermanas», con estas palabras dio inicio a la reunión virtual del organismo de integración regional el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.

Agradeció la participación de representantes de los países miembros, y anunció la presencia de un invitado especial, el líder indígena y expresidente de Bolivia Evo Morales Aima.

Esta es una jornada de trabajo e intercambio de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (ALBA), siempre al frente de los procesos y las batallas de nuestro pueblo.

Estamos llegando a la semana 14 de que la pandemia del nuevo coronavirus haya hecho su aparición en nuestras tierras, y además del impacto en la salud de nuestros pueblos, también hay efectos coyunturales, de corto plazo, estructurales sobre la economía, expresó.

Hoy hemos convocado a esta plenaria del ALBA, para intercambiar la visión que tenemos de la economía pos pandemia. El Alba surgió como una alternativa al neoliberalismo en todas sus formas de expresión, nació como una alternativa y se convirtió en una alianza humanista, democrática y progresista. Hemos dado muchos pasos y debemos seguir andando.

Hemos visto nacer Petrocaribe, y asumimos el compromiso de reanimarlo este año; hemos dado pasos en la fundación del Banco del Alba, y deberá tener un papel importante en la recuperación de la pandemia; creamos el sucre como moneda regional, que permite el intercambio económico unificado entre los países miembros de la región, dijo el mandatario. 

Señaló que la situación económica se suma al reto de salud que se mantendrá en el tiempo hasta que se complete una vacuna y un tratamiento y estos sean accesibles y seguros para toda la población de la región.

Si algo ha quedado claro es la necesidad de una economía basada en la complementariedad y la solidaridad. Una nueva economía y una nueva sociedad deben emerger, planteó.

A propósito de las protestas del pueblo estadounidense en su lucha contra el racismo, a la brutalidad policial y la injusticia del sistema, ha surgido la necesidad de una nueva sociedad.

Hay quienes han dicho que las protestas de EE. UU. son las primeras muestras de presión por los cambios que están por venir, dijo. El Alba, con la luz infinita de su fundadora, se pondrá al frente de este nuevo mundo que está forjándose.

Cinco hitos en la historia del ALBA-TCP

Resultado de la visión estratégica de los líderes revolucionarios Fidel Castro Ruz y Hugo Chávez Frías, el ALBA-TCP surgió en 2004 por iniciativa de Cuba y Venezuela, con el fin de constituirse en plataforma de integración de los países de América Latina y el Caribe.

  • La propuesta del ALBA la formuló por primera vez el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez, en el marco de la III Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Asociación de Estados del Caribe, en 2001.
  • Es una plataforma de integración enfocada para los países de América Latina y el Caribe que pone énfasis en la lucha contra la pobreza y la exclusión social con base en doctrinas de izquierda. Se concreta como un proyecto de colaboración y complementación política, social y económica.
  • Como Alianza Bolivariana para América fue la contrapartida del ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas), impulsada por Estados Unidos.
  • El acrónimo ALBA pasó a ser ALBA-TCP, a solicitud del presidente boliviano Evo Morales, para incluir y reflejar el Tratado de Comercio de los Pueblos.
  • Luego pasó a llamarse «Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos en el entendido de que el crecimiento y fortalecimiento político del ALBA-TCP la constituye en una fuerza real y efectiva», refiere la Declaración de la Cumbre Extraordinaria de Maracay.

Para más información pinche aquí

XVII Cumbre del ALBA-TCP, 15 años de integración

La última Cumbre de ALBA-TCP, la XVII, se celebró el 14 de diciembre de 2019 en La Habana, en conmemoración de los 15 años de fundada la importante organización.

Para ampliar el tema le recomendamos leer:

De igual forma puede leer el Discurso pronunciado por Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de la República de Cuba, en el acto político cultural por el XV Aniversario del ALBA-TCP.

Para consultar la Declaración de la XVII Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del ALBA-TCP. 15 años en defensa de la unidad, la paz y la integración, lea aquí.

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