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Los villaclareños recuperaron la preferencia, pero esta noche deberán confirmarlo en el terreno. Foto: Alex Castro Con dos victorias para cada conjunto y la opción de una tercera como único camino de acceder a las semifinales, Villa Clara y Las Tunas disputarán esta noche, en el estadio Augusto César Sandino, de la ciudad de Santa Clara, el quinto y último juego de su candente play off de cuartos de final.
Ha sido esta una serie de altibajos. Primero, el cielo parecía naranja como en ciertos atardeceres; luego, las espinas tuneras hirieron los pronósticos y sus dos éxitos en sucesión parecían lapidarios; mas, súbitamente, la tropa de Víctor Mesa recuperó el aliento, levantó la cabeza, y embistió con furia para forzar el último duelo, el de la muerte.
Así, Villa Clara ha recuperado la preferencia, pues jugará en su patio y tiene a su favor la experiencia de tantos play off. El zurdo Rogelio Carrillo, que ya venció a los tuneros en el primer choque, tendrá la misión de «rematar» a los orientales, que en último cotejo dejaron a su público «vestido y sin ir al baile».
Sin embargo, si soportan la presión y pueden controlar la ansiedad, y si Osmani Urrutia se reencuentra con su ofensiva, Las Tunas pudiera todavía dar la sorpresa. Desde el montículo, Ubisney Bermúdez, un muchacho que a ratos parece tener para mucho más, será el encargado de tirar del carro.
Y ojalá veamos sobre el terreno otro juego táctico exquisito como el del pasado domingo, cuando ambos mentores movieron casi todas sus piezas en busca del triunfo. Ermidelio se arriesgó incluso a sustituir tempranamente a su receptor y a su torpedero regular —las llaves del cuadro, según se dice— y Víctor, fiel a su costumbre, fue temerario y movió la alineación, además de castigar en su momento a quienes tomaron mal las señas.
En fin, que si yo viviese en Villa Clara, a esta hora ya estaría enfilando para el estadio.
CLASIFICAR PRIMERO NO IMPORTAAl cierre de esta página, Pinar del Río y La Habana disputaban también un quinto juego rompecorazones en el estadio Capitán San Luis.
Aprovecho entonces para aclarar a los lectores que, si el clasificado fuera Pinar, la serie semifinal comenzará el viernes en Vueltabajo y no en la capital, como he escuchado por ahí.
¿El motivo? Sencillo: los verdes ganaron más juegos que Industriales en la etapa preliminar y merecen ese premio, a pesar de que los azules liquidaron primero su compromiso de cuartos de final.
Por el contrario, si fuese La Habana el agraciado, entonces sí la fiesta comenzaría en el Latinoamericano. Por el oriente, en cambio, no hay conflictos: sea cual sea su rival, la conga sonará primero en Santiago.
