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LA PAZ, diciembre 29.— La bancada oficialista en la bicamaral Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia reconoció este miércoles que el Decreto 748, que nivela los precios de la gasolina y el diesel con los países vecinos, es «duro» pero, a la vez, necesario para extirpar el «tumor» que amenaza con arruinar la estructura económica del país en el futuro, informó ABI.
De acuerdo con los cálculos oficiales, Bolivia perdió este año al menos 150 de los 380 millones de dólares que destinó para subvencionar el precio de los combustibles y benefició a los contrabandistas y a algunas naciones que lindan con su frontera.
«Sabemos que la nivelación de los precios de combustible es una medida dura, pero necesaria, ya que el país no podía seguir desangrando su economía para beneficiar a los contrabandistas y a otros sectores», expresó Emiliana Aiza, jefa de la bancada del Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Cámara de Diputados.
La subvención a los combustibles subió de 80 millones de dólares en 2005 a 380 millones en 2010 y, de no enmendarse esa fuga de recursos, «en cinco años más iba a llegar a los mil millones de dólares», advirtió el jefe de la bancada del MAS en el Senado, Isaac Ávalos.
El Decreto Supremo 748, que prevé el aumento de los precios del diesel y la gasolina para equipararlos al estado actual en naciones cercanas al territorio, fue aprobado por el gabinete de ministros en una reunión que se realizó el pasado domingo en el Palacio de Quemado, sede del ejecutivo.
Por su parte, el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, anunció que se implementará una política intensa para incentivar la producción de petróleo, que paralelamente aumentará la producción de distintos combustibles; se congelarán los precios de los servicios básicos, luz, agua, telefonía, y se autorizará compras inmediatas y directas de equipos de reconversión a gas natural para vehículos que funcionan con gasolina, además de la importación, con arancel cero, de repuestos para el transporte público, entre otras medidas.
