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TOKIO, abril 6.— Los técnicos japoneses que luchan por controlar la situación en Fukushima dieron a conocer que lograron detener la fuga de agua contaminada con altos niveles de radiación al Océano Pacífico, reportó Reuters.
Tokyo Electric Power (Tepco), la compañía que explota la central nuclear, aseguró que se consiguió taponear la grieta del reactor número 2 por la que estaba manando sin control el agua contaminada, responsable de que la radiación haya sobrepasado en 7,5 millones de veces la cantidad que se considera segura.
La grieta, que medía 20 centímetros, fue eliminada con la inyección de 1 500 litros de silicato de sodio en la grava por debajo del fondo del depósito por donde el agua radiactiva se estaba filtrando. Anteriormente los técnicos habían intentado sellar la estructura, primero con hormigón y luego con polímeros absorbentes, pero fracasaron.
El Gobierno japonés había ordenado endurecer las medidas de control y supervisión radiactiva en alimentos marítimos, ante el vertido del material.
Según trascendió, los controles sanitarios se aplicarán a los alimentos marítimos básicos en la dieta de la población japonesa como diversas variedades de pescado, almejas, algas y otros mariscos consumidos comúnmente y se extenderá a verduras cosechadas en las prefecturas más afectadas.
Según AP, Tepco ahora planea entablar las partes rotas de un dique en la costa para evitar que el agua contaminada siga expandiéndose mar adentro, y con el mismo objetivo estudia la posibilidad de colocar cortinas gigantes de sedimentos submarinos en tres lugares, incluyendo uno cerca de una salida de agua del edificio del reactor número 2.
Asimismo, trascendió que el ejecutivo nipón comenzó a medir la radiación en 1 400 escuelas alrededor de la central de Fukushima, con vistas a calmar la inquietud de los padres de los niños que viven en esa prefectura.
Por otra parte, la policía nipona dio cuenta del aumento de la cifra de fallecidos a 12 468, mientras el total de desaparecidos se elevó a 15 091.
