Aún con las inconformidades latiendo en la universidad luego de anunciados el pasado lunes los reajustes en los planes de datos para los estudiantes, el camino escogido fue el diálogo Autor: Archivo de JR Publicado: 07/06/2025 | 09:08 pm
EN los pasillos de la casi tricentenaria Universidad de La Habana no se detiene el ajetreo permanente. La mística de la Colina conserva a sus jóvenes como los más fieles protagonistas de la cotidianidad. Pero, a esa vorágine diaria se ha sumado ahora, y desde hace alrededor de una semana, la expectación, el diálogo, los cuestionamientos.
Cualquier espacio les resulta idóneo a los muchachos para conversar sobre lo acuciante y actual. Las recientes medidas anunciadas el pasado 30 de mayo por la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) causaron, desde un principio, una manta de insatisfacciones en el estudiantado que, de inmediato, por la vía digital o en persona, desencadenó distintas posturas y opiniones.
La búsqueda de consensos cuando existen incomprensiones y fallas, sin duda, es una tarea difícil, muy compleja. Y a su vez resulta una práctica legítima y honesta dentro de la Revolución. Juventud Rebelde conversó con tres líderes estudiantiles sobre los recientes acontecimientos para entender qué ha venido sucediendo puertas adentro.
¿Qué ha pasado en las universidades?
Al referirse casi de manera cronológica sobre el asunto, José Alberto Almeida Cabrales, secretario de la coordinación provincial de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) en La Habana, comentó que todo parte, como se conoce, de los desacuerdos de los estudiantes con las nuevas medidas.
Recuerda que el primer espacio que tuvieron de intercambio luego de puestas en vigor las disposiciones de Etecsa fue en el Consejo Provincial de la FEU en La Habana, el propio viernes 30 de mayo. Existía una gran interrogante inicial, porque no teníamos en la mano los argumentos para explicarle al estudiantado de la FEU los porqués de las medidas, puntualizó.
Al día siguiente, el sábado, se propició un espacio en el Partido Provincial de La Habana que, al decir de José Alberto, fue un escenario muy crítico por las propias inconformidades que traían las personas, no solo estudiantes. Allí participaron la Presidenta y la Vicepresidenta Comercial de Etecsa. Además, estuvieron los presidentes de la FEU de las universidades de la capital, acompañados por la UJC y los rectores.
En ese instante, apuntó, nos centramos más en las vulnerabilidades que tenían los estudiantes, profesores, investigadores y médicos frente a las nuevas disposiciones, sin desconocer, por supuesto, la afectación al pueblo. También se realizaron cuestionamientos fuertes, agregó, sobre el contexto en que se aplicaron las medidas (por qué ahora) y la consulta previa que pudo haber ayudado a una mejor toma de las decisiones.
«Debo decir que en ese instante la dirección de Etecsa respondió con mucha humildad, y se enfocó en escuchar y en buscar soluciones para los estudiantes. Incluso, se realizaron varias propuestas en aquel marco».
De manera autocrítica, Almeida Cabrales reconoció que ese día faltó, al culminar el encuentro, divulgar lo que allí sucedió con transparencia por parte de los líderes estudiantiles, aunque también reiteró que las maneras y formas de comunicar institucional y televisivamente la medida no resultaron, como ya se ha dicho desde la máxima dirección del país, las mejores.
Esta semana, aún con las inconformidades latiendo en la universidad luego de anunciados el pasado lunes los reajustes en los planes de datos para los estudiantes, el camino escogido fue el diálogo, en la búsqueda de alcanzar consensos, explicó.
En la evolución del discurso una de las exigencias fundamentales de los universitarios estuvo relacionada con la profundización y transparencia en la información que se brindaba en cada espacio, comentó.
Sí hay que reconocer que a partir de ese momento se apostó más por los intercambios a lo interno del Alma Mater y en otras universidades de la capital, agregó. La dirección de Etecsa ha ido de manera sistemática a esos encuentros para explicar y, sobre todo, escuchar las opiniones del estudiantado, el cual ha demandado también una mayor participación en la toma de decisiones.
Ciertamente, según explica José Alberto, hemos tenido el acompañamiento en las universidades, siempre prestos al diálogo, del Partido, la UJC y las autoridades pertinentes. «Nosotros apostamos al intercambio y a la búsqueda de soluciones entre todos. Jamás haremos algo para dañar la Revolución. Que a nadie le quepan dudas», puntualizó.
En ello tampoco desconocen, sin ser un sentir mayoritario, otras posturas o acciones diferentes abordadas por algunos estudiantes o facultades en jornadas anteriores como vías de actuación para la construcción de soluciones, ninguna vinculada a hechos que alteren el orden social, según detalló el también estudiante de sociología.
La respuesta a las distintas posturas siempre ha sido conciliadora y, nuevamente, de debate franco, recordó. Lo hemos visto en el transcurso de esta semana, por ejemplo, cuando la Rectora de la Universidad de La Habana y el Ministro de Educación Superior participaron, indistintamente, en intercambios con facultades dentro del campus universitario, como fue el sostenido con estudiantes de la Facultad de Matemática y Computación.
Esos espacios y métodos han intentado tergiversarlos desde
el oportunismo de la contrarrevolución, aclaró. Si bien distintas estructuras de la FEU lanzaron sus posicionamientos y planteamientos de manera pública, otras convocatorias puestas en redes sociales son totalmente falsas, como aquella que comenzaron publicando con inteligencia artificial sobre una supuesta sentada en la histórica escalinata habanera.
«Es indignante e irresponsable que personas, sobre todo, desde fuera del país actúen de manera tan burda», añadió José Alberto. Los estudiantes universitarios no se han propuesto acciones que pongan en peligro la tranquilidad popular, ni lo harán, además, porque entendemos con suficiente madurez y conciencia histórica qué es importante para el bien de la Patria, reconoció.
Carlos González Rodríguez, estudiante de Química y vicepresidente de la FEU de su facultad, precisa que existen hoy los mecanismos para que los estudiantes expresen sus inquietudes y sean escuchados dentro de la universidad.
Evidentemente, dice, la parte mediática influye en los escenarios que enfrentamos porque magnifican hechos que ocurren con naturalidad y luego azuzan otros actos. ¿Que existe una inconformidad manifiesta con las nuevas medidas? Eso es indudable, pero lo que sí se continúa intentando son soluciones legítimas desde la participación.
Reconoce que encontrar el entendimiento no ha sido una tarea fácil a lo interno de la casa de altos estudios, e incompleta aún. De ahí que cada facultad haya organizado de forma espontánea sus propios espacios de intercambios y debates. En la inmensa mayoría de los casos se apuesta a ese camino conciliador, apunta.
De todos estos escenarios de construcción del diálogo han nacido nuevas propuestas que prometen mejores salidas en el corto y mediano plazos de tiempo, como es el recién conformado grupo multidisciplinario de trabajo.
¿En qué consiste?
Según explicó Ricardo Rodríguez González, presidente nacional de la FEU, este grupo multidisciplinario, conformado el pasado jueves, tiene entre sus objetivos analizar los estados de opinión y las propuestas que se están manejando por parte de los estudiantes, así como la de trabajar de conjunto con Etecsa para encontrar salidas.
Estamos ahora mismo en un punto de construcción colectiva junto a representantes de la Universidad de La Habana, la Cujae y otros centros docentes, detalló, para organizarlo de la mejor forma posible, y llevarlo a la participación constructiva. El grupo lo integran no solo estudiantes, pues cuenta con la visión de profesores e investigadores de diferentes perfiles y ciencias, junto a especialistas de Etecsa, comentó.
Al ahondar en el actual contexto, Rodríguez González precisó que los pronunciamientos de las estructuras de la FEU han sido respetuosos, y se han enfocado en abogar por soluciones para todos. Y eso lo han tratado de manchar desde fuera. Con el aliento de los desesperados, se han lanzado a intentar manipular a nuestra gente con fake news que, incluso, en muchos casos van acompañadas por la utilización ilegal del logo de la organización estudiantil para darle un supuesto carácter legitimo a la mentira por las redes.
Lo cierto es que, dentro de la Revolución, el estudiantado pedía diálogo e intercambios desde que se anunciaron las medidas de Etecsa. Y así ha sucedido y continuará sucediendo en todos los centros universitarios del país dentro de espacios que generó la propia FEU. Por esa línea, dijo Ricardo, seguiremos trabajando para encontrar puntos de consenso y de construcción colectiva.