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Nunca más
«No vuelvo a tomar nunca más en mi vida», es una de las promesas más traicionadas a lo largo de la historia por bebedores cuyo arrepentimiento dura apenas un santiamén. Sin embargo, un escocés de 37 años, ingresado en la sala de emergencias del Hospital de Glasgow, tiene razones de peso para mantener su palabra si no quiere volver a sufrir medio año de resaca, como le sucedió tras «catar» 35 litros de cerveza durante cuatro días. No en balde, cuatro semanas después de su atracón, decidió internarse para recuperar la normalidad de su visión y eliminar la jaqueca que lo carcomía. Al parecer Escocia ganó un abstemio.
Besucona, ¿no?No se trata del beso de Judas ni tampoco el de la mujer araña, aunque posiblemente pasará a la historia como el más costoso. Y es que Rindy Sam, una francesa de 30 años, tendría que pagar hasta 4 500 euros de multa por haber «tatuado» con el carmín de sus labios un lienzo del famoso pintor estadounidense Cy Twombly, durante una exposición en la ciudad de Aviñón. Al artista le horrorizó el «gesto de amor» de la joven, que enfrentará cargos por «canibalismo» debido a la marca distintiva que aportó al óleo —antes de un blanco inmaculado—, perteneciente a un tríptico valorado en dos millones de euros.
TirapiedrasRussel Byars, un estadounidense de 43 años, fue nombrado el mejor lanzador de piedras del mundo e ingresó al libro de los Récords Guinness, tras arrojar un guijarro que «saltó» en el agua unas 51 veces. Antes de que la plusmarca fuese homologada, varios expertos analizaron los círculos concéntricos que la roca realizó en el agua. Así se registró este triunfo histórico de Byars, cuyas habilidades —y tiempo libre— le permitieron desplazar a 40 predecesores de la fama del lanzamiento de rocas, un hobby tan antiguo como el hombre mismo, que para algunos debería tenerse en cuenta para ser incluido en los Juegos Olímpicos.
