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Disputar el partido por el tercer lugar de un mundial debe dejar en los jugadores una sensación rara. Puede ser desilusión, o tal vez resignación después de haber dado todo para llegar a una meta ahora imposible. Algo así como buscar desesperadamente el agua, y luego morir de sed junto a la fuente.
Esta vez tocó a alemanes y uruguayos animar el partido que ninguno de ellos soñó. Pero está en juego, entre tantas cosas, el orgullo de dos naciones de amplia trayectoria futbolística, y que no merecen regresar a casa con las manos vacías.
Ambos equipos, desde perspectivas diferentes, concretaron un mundial notable e inesperado. Los europeos exhibieron un fútbol armónico y eficiente, a pesar de la inexperiencia de muchos jugadores titulares. Mientras, los sudamericanos mostraron solidez en todas sus líneas y la acostumbrada garra que los hizo llegar hasta la antesala de la gloria.
Así, mientras el mundo se prepara para presenciar la final inédita entre España y Holanda, tendrá la posibilidad de asistir a un duelo muy pocas veces visto en estas lides, y con interesantes aderezos.
Ya la FIFA anunció sus candidatos al premio de Mejor Jugador del torneo, y aunque las mayores posibilidades recaen en los tres españoles nominados —Xavi, Villa e Iniesta— y los dos holandeses —Robben y Sneijder—, en la lista también aparecen el uruguayo Forlán y los alemanes Özil y Schweinsteiger, todos confirmados para el partido de esta tarde.
También pudiera aprovechar la jornada el alemán Thomás Müller para inclinar a su favor la nominación que comparte con el mexicano Giovanni Dos Santos y el ghanés Ayew al galardón del Jugador Joven más sobresaliente del certamen.
Asimismo, tanto Müller como Forlán pudieran dar un último impulso a sus candidaturas al trofeo como máximos goleadores de la cita sudafricana. Por si fuera poco, todos estarán pendientes a la última oportunidad que tendrá el delantero teutón Miroslav Klose de igualar o superar el récord que posee el brasileño Ronaldo, con sus 15 dianas anotadas en citas universales.
Por Alemania pudieran pisar ahora el pasto alguno de los jugadores que no se han estrenado aún en el torneo. El propio Klose fue reportado con molestias y otros como Podolski y Lham tienen gripe.
Uruguay también buscará el triunfo con el regreso de Suárez, Fucile y Lugano. Tampoco hay razones para que Forlán, resentido en la semifinal, se quede en el banquillo.
