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Estos tres hombres (Yurisbel Gracial, Alfredo Despaigne y Roel Santos, de izquierda a derecha) llevaron el peso de la ofensiva cubana en el torneo. Autor: TV Yumurí Publicado: 21/09/2017 | 06:52 pm
Como en 2006 en el primer Clásico Mundial de Béisbol y en unos cuantos eventos más después de ese, una piedra nipona fue la causa del traspiés que dejó tendidos sobre el césped del estadio Tokyo Dome de Japón al equipo Cuba de béisbol, luego de haber logrado avanzar a la segunda fase del torneo con balance de dos victorias y un revés (también a manos de los anfitriones).
De esa manera el escenario quedó listo para que otro reconocido verdugo cubano: Holanda, les diera el tiro de gracia que nos dolió a todos, aun cuando muchos pronosticaron acertadamente la eliminación de los caribeños en la segunda ronda, mientras otros escépticos, ya más bien por experiencia, prefirieron no apostarle fichas a la nave antillana.
«En primer lugar, a mi entender, la dirección no tomó las decisiones que tenía que tomar en el momento que las tenía que tomar, y en segundo lugar, no jugaron como se esperaba; pienso que los errores mentales son peores que los errores propios de un juego de pelota», así se manifestaba un joven aficionado.
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Mientras otro aseguraba que «la alineación no fue la mejor, yo considero que Frederich Cepeda hace mucho tiempo dejó de ser el tercer bate de ese equipo, se pudo haber utilizado a otro, como también desde un principio se podía emplear a alguien más de quinto hombre para respaldar a Alfredo Despaigne porque William Saavedra no cumplió bien con esa tarea».
Una vez más los errores a la defensa; la alineación que pudo ser, pero fue muy tarde; la decisión que no se tomó; el relevo inefectivo; los que madero al hombro no lograron cumplir su función; quienes sí lo hicieron, o mejor dicho, quien lo hizo siempre, pero no fue suficiente; el tercer hombre que aún esperamos y por último, la calidad que parece sobrarle al contrario y nos hace preguntarnos por la nuestra, terminaron por pasar factura a los discípulos de Carlos Martí.
El equipo de JR Podcast Más que papel conversó también con el periodista de temas deportivos en nuestro diario Juventud Rebelde José Luis López Sado, quien nos indicaba que «la actuación de Cuba se centró prácticamente en un solo hombre, era Despaigne contra los rivales porque la mayoría de los jugadores no estaban ajustados al bate».
Para conexiones lentas, JR Podcast…
«Considero además que desde el primer momento Yosvany Alarcón tenía que haber jugado, siempre he pensado que primero se batea y después se defiende, por tanto, si llevaron al máscara tunero ¿cómo era posible que estuviera en el banco?, ese hombre tenía que alinear de regular y poner a Frank Camilo Morejón a reforzar la defensa después de un sexto capítulo, si Cuba estaba arriba en el marcador» -argumentó.
La realidad nos golpea y nos hace lamentarnos y añorar las emociones de una época que, tras cada evento que pasa, sentimos más distante, y lo peor es que cada vez somos menos los que albergamos una esperanza de volver a vivir aquellos tiempos.
El equipo de República Dominicana figura entre los grandes favoritos para subir el podio por segunda ocasión consecutiva. Foto: El tiempo
De momento, todavía queda Clásico Mundial para degustar y ya son muchos los que vaticinan una final entre República Dominicana y Estados Unidos, aunque no pocos tienen a Japón como favorito al podio. ¿Y tú, quién crees que será el campeón? Esperamos tus criterios en nuestra página de facebook Más que papel, en nuestro cajón de comentarios o a través del correo juventudrebelde.cu@gmail.com
