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El último de los primeros

Esta vez, en la llave H coincidirán cuatro conjuntos que, en mayor o menor medida, carecen de ese halo de favoritismo que ostentan otros. Sin embargo, a la vez son cuatro «pasajeros» clásicos de estos torneos, acostumbrados a jugar bajo los reflectores del mayor evento futbolístico

Autor:

Enio Echezábal Acosta

El grupo H es el encargado de cerrar la fase clasificatoria de la Copa del Mundo desde que en la edición de Francia ‘98 fueran incluidas 32 selecciones. Desde entonces, los integrantes del octavo apartado tienen la presión de ser los que oficialicen el debut de todos los aspirantes al trofeo más ansiado del planeta.

Luego de haber visto a las primeras 28 escuadras sobre la cancha, el día 24 de noviembre saldrán a escena las cuatro restantes. Cuando esto suceda, habrá terminado la ronda inicial y tendremos una impresión de cada elenco. Entonces llegará la primera gran avalancha de especulaciones de cara al resto de la cita.

Esta vez, en la llave H coincidirán cuatro conjuntos que, en mayor o menor medida, carecen de ese halo de favoritismo que ostentan otros. Sin embargo, a la vez son cuatro «pasajeros» clásicos de estos torneos, acostumbrados a jugar bajo los reflectores del mayor evento futbolístico.

La cuarteta de turno parece, a priori, encabezada por Portugal, campeón europeo de 2016 y uno de los conjuntos que lleva más tiempo trabajando la misma idea, en este caso la de Fernando Santos, quien está en el banquillo luso desde 2014.

En el que pudiera ser su «último baile» con el representativo de su país, Cristiano Ronaldo viajará a la nación asiática acompañado de un grupo de atletas que en su mayoría repite en este tipo de competiciones y junto a ellos aspira, como mínimo, a dejar bien parado el nombre que enaltecieron otros grandes como Eusebio o Luis Figo.

Acomodados a un sistema 4-4-2 con un bloque medio que busca ejercer una presión alta, la llamada selección de los Escudos (en homenaje a los cinco azules que aparecen en la bandera) alineará con Rui Patricio o Diego Costa en el arco y tendrá a Joao Cancelo, Pepe, Danilo y a la joven promesa Nuno Mendes de derecha a izquierda en la defensa.

La media cancha será responsabilidad del doble pivote que arman William Carvalho y Joao Moutinho, mientras que Bernardo Silva y Bruno Fernandes ejercerán como interiores/enganches de los dos puntas, posición esta en donde CR7 debe ser acompañado por uno de dos Rafas: Leao o Silva, toda vez que Diogo Jota, el titular más probable, se perderá la fiesta debido a una lesión.

Por detrás de los rojiverdes, aparece Uruguay, un conjunto que pocas veces ha lucido más poderoso en base a su talento individual. Dueños de la célebre «garra» que constituye el sello tradicional de la tropa celeste, ahora el conjunto que comanda Diego Alonso contará con la magia de varios hombres que prometen darle una gran alegría a sus hinchas.

Esta versión de los charrúas gira en torno a Federico Valverde, futbolista que ha mostrado un crecimiento enorme durante la presente campaña europea con el Real Madrid y que ahora mismo es considerado entre los box-to-box más completos del mundo.

Con Fede como «electrón libre» en la estructura, Alonso suele colocar dos líneas de cuatro para aprovechar toda la amplitud de la cancha, aunque a veces puede optar por un 4-2-3-1.

Más pegados al meta, que pudiera ser Fernando Muslera o Sergio Rochet, estarían Sergio Araújo (si supera la lesión), Diego Godín, Chema Giménez y Mathías Oliveira. Por delante de la línea zaguera juegan Valverde, Rodrigo Bentancur  y Facundo Pellistri, con Giorgian de Arrascaeta o Matías Vecino como cuarta variante. En ataque, Luis Suárez, Edinson Cavani y Darwin Núñez deberán pelear uno de los dos puestos.

Ghana y Corea del Sur, conducidas por Otto Addo y Paulo Bento, respectivamente, son dos combinados opuestos que encarnan con mucha precisión los defectos y virtudes del balompié africano y asiático, por ese orden.

Las Estrellas Negras tienen un físico imponente y ofensivamente pueden ser altamente complejas de controlar. En cambio, sus transiciones en defensa y el orden táctico son falencias recurrentes que pudieran empañar los méritos que consiga su propuesta, consistente en no buscar demasiado la tenencia de la pelota, sino intentar un fútbol directo aprovechando la velocidad por banda de sus efectivos.

El pivote Thomas Partey, los hermanos Jordan y André Ayew, Daniel Amartey, Alexander Djuku, Baba Rahman, Denis Odoi, Idrussu Baba, el portero Jojo Wollacott, Mohamed Kudus y Kamaldeen Sulemana deben ser el once tipo que envíe Addo para buscar los primeros tres puntos.

Por oposición, los Tigres surcoreanos sí cuentan con una disciplina más sólida sobre el verde. Normalmente usan un doble-5 en la medular e intentan salir tocando el balón raso desde la meta, un factor que en ciertas ocasiones les ha jugado en contra. Con par de volantes pegados a la raya y dos atacantes ubicados escalonadamente, los felinos rojiblancos tienen bastantes argumentos para incomodar.

Son Heung-min es el líder absoluto del conjunto que organiza Bento. Por detrás, deberían asumir un rol más protagónico el también talentoso Hwang Hee-chan y el joven Jeong Sang-bin como principales armas en el frente de ataque.

 

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