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Los opositores celebraban junto a los restos de la emblemática estatua del líder libio aplastando con el puño el F-16 de EE.UU. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:12 pm
TRÍPOLI, DOHA, agosto 23.— El jefe del opositor Consejo Nacional de Transición (CNT), Mahmoud Jibril, afirmó este martes que hay zonas del país como las regiones del sur que no han podido conquistar y permanecen bajo control del líder libio, Muammar al-Gaddafi, al tiempo que en la capital se reportaban actos de vandalismo luego de que los opositores armados penetraran en el complejo residencial de Bab al-Aziziya, donde no se encontraba el líder libio, cuyo paradero seguía siendo una incógnita.
Según Telesur, el cabecilla de los opositores armados aseguró que desde ahora el resguardo de las ciudades de Libia queda en manos del Consejo Nacional de Seguridad, instancia recién creada por ellos que presidirá y se encargará de ocupar algunas de esas localidades del sur que aún se encuentran en manos de las fuerzas leales a Gaddafi.
Jibril también reconoció que «se deben tomar medidas, especialmente en Trípoli», para evitar retrocesos en los territorios conquistados hasta el momento, lo cual puso de relieve que se mantienen los enfrentamientos por su control. .
Luego de que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y las grandes potencias quisieron dar la imagen, la víspera, de que el Gobierno de Gaddafi había caído, el jefe de la rebelión tuvo que admitir este martes, además, que la toma total de la capital podría demorarse todavía, según dijo a EFE la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, quien afirmó haber tenido una conversación telefónica con Jibril. Aunque 24 horas antes el CNT aseguraba tener más del 80 por ciento de la ciudad controlada, el coronel Roland Lavoie, portavoz de la OTAN, señaló ahora que dar porcentajes es «muy arriesgado», y negó que la Alianza Atlántica y los opositores armados tengan «el control absoluto» sobre Trípoli.
Despachos cablegráficos daban cuenta de un estado de confusión en la capital luego de que los insurgentes penetraran y saquearan el complejo residencial de Gaddafi.
Según Reuters, los rebeldes celebraban alrededor de la emblemática estatua del líder libio aplastando con el puño el F-16 de Estados Unidos, que fue destruida. Centenares de opositores armados se llevaron cajas enteras de municiones y dispararon sus armas al aire.
Fuentes de los alzados dijeron, según ANSA, que no había rastros de Gaddafi ni de sus hijos en el complejo del líder libio, al tiempo que los atacantes se llevaban pertenencias personales del coronel.
La conquista de Bab al-Aziziya, apuntó PL, tiene sobre todo un carácter simbólico, pues Gaddafi sigue libre y este martes había reiterado en una llamada telefónica que no tiene intenciones de abandonar su país, en el que permanecerá hasta el final.
El ataque a Bab al-Aziziya, en el que fueron utilizados morteros, ametralladoras pesadas y baterías antiaéreas, ocurrió horas después de que el hijo de Gaddafi, Saif al-Islam, apareciera en público para desmentir las declaraciones de los insurgentes de que él había sido capturado.
Al respecto, desde Doha, el jefe del CNT, aseguró que la noticia falsa de la detención de Saif al Islam, aparecida la noche del domingo, facilitó el avance rebelde en Trípoli y «produjo ganancias políticas y militares a los rebeldes».
Según Jibril, cuando se divulgó esa versión, 11 países reconocieron al CNT como «el representante legítimo de Libia» y un gran número de militares, entre ellos altos oficiales, entregaron sus armas, reportó EFE.
En tanto, Italia, Francia, Reino Unido y Canadá consideraron que la guerra en Libia vive un momento estratégicamente favorable para su «solución» y el nacimiento de lo que llamaron «una Libia democrática y unida» sin Gaddafi, e instaron a «no bajar la guardia» y a «mantener la presión».
Los ministros de Defensa de esos cuatro países conversaron telefónicamente sobre «el futuro papel de la OTAN» cuando concluyan las operaciones militares, considerado «esencialmente como un rol de asistencia y apoyo» para «la reconstrucción y estabilización del país».
Asimismo, coincidieron en la necesidad de una nueva resolución de la ONU, «que tendrá que ser adoptada en el momento en el que el CNT asuma el pleno control del país».
También trascendió que Estados Unidos se encontraba trabajando urgentemente para desbloquear de manera inmediata hasta 1 500 millones de dólares procedentes de los bienes bloqueados al Gobierno libio y concedérselos al CNT, para destinarlos a lo que calificaron como una «transición democrática» en la era pos-Gaddafi, detalló la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, en conferencia de prensa. Igual compromiso expresó la alta representante de Política Exterior europea, Catherine Ashton.
Por su parte, el presidente sudafricano, Jacob Zuma, acusó a Occidente de eludir la aplicación del plan de paz de la Unión Africana para resolver la crisis y evitar la muerte de miles de civiles.
EE.UU. y UE piden sanciones contra Siria
En tanto, desde Ginebra trascendió que el Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la ONU aprobó finalmente este martes una resolución en la que solicita investigar supuestos crímenes contra la humanidad en Siria, de los cuales acusa a las autoridades del país. El documento fue adoptado con la oposición de Rusia, China, Cuba y Ecuador, que consideraron la iniciativa como un mecanismo dirigido a desestabilizar la situación en la nación árabe.
Otros nueve miembros del Consejo se acogieron a la abstención, mientras 33 votaron a favor.
Como EE.UU. y la Unión Europea (UE) intentan una condena a Siria en el Consejo de Seguridad de la ONU, mostraron preocupación por el contundente rechazo de Rusia y China al documento del CDH.
EFE dio cuenta de que Washington y la UE hicieron circular en el Consejo de Seguridad un nuevo proyecto de resolución que incluye sanciones contra individuos y entidades sirios, así como un embargo de armas.
