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Maceo, la mejor síntesis de la historia común, dijo el Presidente Solís al rendirle homenaje al Titán de Bronce en el Cacahual. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 06:23 pm
«Los cuatro objetivos de esta visita se han cumplido exitosamente», aseguró el presidente de Costa Rica Luis Guillermo Solís en un encuentro con la prensa nacional y extranjera acreditada en La Habana, poco antes del inicio del recibimiento oficial y las conversaciones con el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros de Cuba, General de Ejército Raúl Castro.
El mandatario tico puntualizó la gran importancia que tiene Cuba para la política exterior de su país y en el área de Centroamérica y el Caribe, el avance del proceso de normalización iniciado en la década de los ‘90 y cuyo colofón fue el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países en 2009 y el acercamiento entre el sector privado costarricense y las empresas cubanas.
«En estos momentos ya están ocurriendo más de cien citas de negocios de más de 50 empresarios costarricenses con sus homólogos cubanos», reveló el Presidente, quien dio a conocer que se han firmado diversos acuerdos entre las respectivas autoridades de Educación.
«Se ha confirmado que esta visita sería buena para abrir puertas, para generar condiciones favorables, y estamos seguros de que las relaciones serán aun más intensas», destacó en un salón del Hotel Meliá Habana.
Antes de pasar al tiempo de preguntas, el mandatario hizo una declaración especial sobre los migrantes cubanos en Costa Rica.
«El Gobierno de Costa Rica ha seguido trabajando intensamente en el plano diplomático con el fin de lograr pasos que permitan su salida de territorio nacional. Hoy tenemos un número cercano a 4 000 alojados en 29 albergues, en ocho circunscripciones territoriales, llamadas cantones, a lo largo de la frontera con Panamá, con Nicaragua», apuntó.
«Seguimos esperanzados de que se reconozca el derecho de tránsito de los emigrantes, derecho que les asiste, porque son ciudadanos salidos de su país debidamente documentados», agregó.
Sobre el tema, el presidente Solís se detuvo ampliamente.
«Quisiera insistir en el hecho de que este no es un problema bilateral de Costa Rica con ningún país, sino que debe ser visto con una perspectiva multinacional en la que estamos incluidos todos los países involucrados en esa migración, incluidos los Estados Unidos», aseguró el mandatario, quien espera que puedan darse noticias positivas en la reunión de jefes de Estado que se celebrará próximamente en San Salvador.
En respuesta a preguntas de la prensa, Solís afirmó que «lo que procede es que se viabilice su paso hacia su destino final». Agregó que si voluntariamente algunos de esos migrantes desean volver a su país de origen, ese regreso está garantizado por el Gobierno de Cuba y por los mecanismos bilaterales que han trabajado desde el inicio de esta crisis. «Lo que toca al Gobierno de Costa Rica es que aquellos que deseen volver puedan hacerlo con seguridad y aquellos que deseen seguir lo puedan hacer garantizándoles los Gobiernos el tránsito seguro», aseveró.
Sobre la implicación del Gobierno de Estados Unidos, principal responsable de esta situación, aclaró: «La realidad es que hay una condición privilegiada para los cubanos que desean migrar a los Estados Unidos producto de una circunstancia histórica que está en plena evolución. Corresponde a los Estados Unidos administrar sus leyes y corresponde a quienes somos víctimas de esas leyes analizarlas también con responsabilidad», expresó Solís en La Habana.
En otro momento, y sobre su visita a Cuba, expresó su certeza de que esta permitirá que se desbrocen todos los caminos en los distintos sectores.
«Cuba vive un momento estelar», dijo y reconoció la lúcida mirada de futuro del Presidente cubano, a quien felicitó además por los éxitos del proceso de paz en Colombia.
