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La lucha contra el Aedes aegypti exige mayor disciplina social y calidad en la labor del personal de la campaña, para lograr una disminución de la focalidad en esta ciudad, una de las más infestadas de Cuba.
Roberto González, jefe de área en el policlínico Santa Clara, comentó a la AIN las dificultades que enfrenta el personal con algunos vecinos, quienes en ocasiones no les dejan entrar en las viviendas o dificultan el tratamiento a los tanques.
A su vez, también planteó que, a pesar de contar con todo los trabajadores necesarios para el quehacer antivectorial, resulta imprescindible una mayor calidad en la labor, pues se observan, en ocasiones, insuficientes pesquisas en las viviendas por falta de preparación técnica y pobre control de los supervisores.
Irén González, directora del Departamento Provincial de Lucha contra Vectores, explicó que en febrero hubo un ligero descenso en la cantidad de focos en relación al mes anterior, en una ciudad que representa el tres por ciento de la infestación del país.
No obstante, esta leve tendencia a la disminución, en todas las áreas de salud de la urbe, el nivel de manifestación del mosquito supera la media nacional de 0,05 focos por cada centenar de locales registrados, con lo cual se mantiene el peligro en la transmisión de posibles enfermedades.
Se detectó la presencia del insecto en una docena de centros de trabajo y se aplicaron siete multas, pues resulta responsabilidad de las administraciones el cumplimiento del programa antifocal laboral, agregó.
González destacó que la mayor concentración de larvas se observa en las viviendas, fundamentalmente en los tanques sin tapar en aquellas zonas más afectadas por el ciclo de abastecimiento de agua.
