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El gol de Isco le dio un respiro al Real. Autor: EFE Publicado: 21/09/2017 | 06:56 pm
El derby madridista ya expiró, y el Real se llevó «el gato al agua». Pero este miércoles, el club del técnico Zinedine Zidane se las vio bien feas en los primeros 20 minutos contra el Atlético, que ganó 2-1 el partido de vuelta en su feudo del estadio Vicente Calderón, aunque no les bastó. Recuérdese que el club merengue venció 3-0 en la ida, con tres goles de Cristiano Ronaldo (CR7).
Todos los goles cayeron en el primer tiempo. Saúl Ñíguez adelantó a los «colchoneros» en el minuto 12, con certero testarazo al saque de un córner. Y Antoine Griezmann marcó el 2-0 al transformar un penal en el 16´, cuando Raphael Varane derribó en el área a Fernando «el Niño» Torres.
El pavor comenzaba a cundir entre los hinchas del vigente campeón. No creían lo que estaban viendo sobre la cancha. Pero en el minuto 43, Isco firmó el importante y, a su vez, tranquilizante gol para los hinchas del cuadro blanco, al quedarse solo con el balón tras un rechace del portero rojiblanco Jan Oblak, sin dudas, un baluarte del infructífero triunfo.
El Atlético salió voraz y decidido a todo. No tenía –ni había- otra estrategia. Ataque y más ataque, si quería remontar el 0-3 en contra firmado en el estadio Santiago Bernabéu. Corrieron, presionaron y el Real cometió varias imprecisiones en los pases y en la salida con la pelota. Pero después del minuto 20 y con el 2-0 a su favor, el rival le robó el balón con Isco como «director» de la orquesta en compañía de Luka Modric. Y a los alumnos del «Cholo» Simeone no se les volvió a repetir oportunidades claras de gol.
Por demás, el gol de Isco, en el cual se lució Karim Benzema con una bonita gambeta pegada a la línea de meta, fue letal para el Atlético, que así estaba obligado a marcar tres goles para dar la vuelta a la eliminatoria. Y su gasto físico en la primera mitad, les pasó factura.
Así, el Real Madrid se metió en su segunda final consecutiva de «Champions», donde se medirá a la Juventus de Turín el próximo 3 de junio en Cardiff.
