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WELLINGTON, abril.— La embajada norteamericana en Nueva Zelanda rechazó una carta de parlamentarios, concejales, académicos y líderes religiosos y sindicales, que exigía la liberación de los Cinco antiterroristas cubanos injustamente presos en Estados Unidos, según informó el diario neozelandés Scoop.
Los firmantes, entre los que figuran relevantes figuras de la política de ese país, se dirigieron el pasado lunes a la misión estadounidense para entregar la misiva dirigida al fiscal general Eric Holder.
En la carta, según destaca PL, solicitan al gobierno estadounidense que no se oponga a la apelación hecha a la Corte Suprema de ese país por la libertad de Gerardo Hernández, René González, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Fernando González.
«Demandamos la inmediata liberación de estos cinco jóvenes, injustamente condenados a largas penas de prisión sin evidencias convincentes de haber cometido los delitos que se les imputan, o por lo menos le exigimos que como fiscal general de Estados Unidos apoye la exigencia de su defensa de revisión del caso por el Tribunal Supremo», subraya el texto.
Los parlamentarios Hone Harawira, del Partido Maorí, y Sue Bradford, del Partido Verde, el concejal de la ciudad de Wellington Ray Ahipene Mercer, y los ex ministros Laila Harre y Matt Robson, se encuentran entre los suscriptores.
También entre los firmantes están Paul Piesse, presidente del Partido Alianza, y los líderes sindicales Robert Reid, presidente del Sindicato de Distribución, Trevor Hanson, del Sindicato Marítimo, y Peter Conway, secretario del Consejo Central de Sindicatos de Nueva Zelanda.
El concejal de la ciudad de Wellington, Ray Ahipene Mercer, y el secretario de la Sociedad de Amistad Wellington-Cuba, Gilliam Magee, trataron de entregar personalmente la carta, pero los guardias de la sede diplomática los rechazaron, indica Scoop.
La misiva fue enviada por correo postal a la embajada, y por vía electrónica directamente al despacho del procurador Holder, señala ese medio.
El documento recuerda la historia de flagrantes injusticias en el caso y la generalizada condena internacional que ha generado, incluida la denuncia emitida por la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.
Resalta, a su vez, la reciente solicitud de un grupo de notables personalidades de todo el mundo, incluidos diez Premios Nobel y parlamentarios de América Latina, Europa y Asia a la Corte Suprema de Estados Unidos para que se revise el caso.
