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KANDAHAR, mayo 4.— La fuerza de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán vivió este sábado su jornada más mortífera desde que los talibanes comenzaron su «ofensiva de primavera» a finales de abril, con la muerte de cinco soldados estadounidenses por la explosión de una mina y la de otros dos militares ultimados por uno afgano, reportó AFP.
Los cinco soldados estadounidenses perdieron la vida cuando su vehículo blindado fue alcanzado por la potente explosión de una mina en la provincia de Kandahar.
La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad de la OTAN (ISAF, por sus siglas en inglés), proporcionó un balance similar sin informar de la nacionalidad de las víctimas. Los otros dos militares de la ISAF murieron en el oeste del país luego que un soldado afgano les disparara, según el bloque militar de la ocupación, que no dio detalles sobre la identidad de las víctimas ni sobre los motivos del hecho; tampoco sobre la suerte del soldado afgano.
