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Compras en una tienda a oscuras en Napa California. Autor: Internet Publicado: 09/10/2019 | 10:41 pm
SAN FRANCISCO, octubre 9.— La compañía de servicios públicos más grande de California, Pacific Gas & Electric (PG&E), comenzó a cortar la electricidad a 800 000 clientes, ya que las condiciones secas y ventosas han aumentado la amenaza de incendios forestales en 34 de los condados del norte y centro de ese estado del oeste estadounidense, informó Democracy Now.
Los apagones sin precedentes siguen al devastador Camp Fire del año pasado, que mató a 85 personas, el incendio más mortal en la historia de California, y según la cadena televisiva CNN PG&E ha sido criticada en los últimos años por el papel de su equipo en una serie de incendios forestales catastróficos en todo el estado, incluido el Camp Fire 2018.
En junio, la empresa de servicios públicos pagó mil millones de dólares en daños a los gobiernos locales por incendios vinculados con sus líneas eléctricas, postes y otros equipos, la mayoría relacionados con el Camp Fire, que también destruyó miles de hogares. La ciudad más afectada fue Paradise, que quedó carbonizada y recibirá 270 millones de dólares para resolver las reclamaciones por incendios forestales.
Ahora, en prevención de siniestros similares, esa empresa eléctrica advirtió en febrero que podría cortar la energía de manera proactiva con mayor frecuencia y a más clientes durante condiciones climáticas peligrosas como un medio para prevenir incendios forestales causados por fuertes vientos que derriban equipos de energía en vivo.
El plan, dicen los críticos, permite a PG&E salirse con la molestia de incomodar a sus clientes y costar a las empresas en lugar de actualizar su infraestructura para evitar incendios.
La cifra de 800 000 clientes en apagón implica a 2,5 millones de personas sin electricidad, como estimado, pues se cuenta como un solo cliente edificios de apartamentos completos.
El descontento prima entre los usuarios del servicio y el senador Jim Nielsen, cuyo distrito electoral incluye Paradise, ha dicho que «el corte masivo de energía es inaceptable». En un comunicado, el legislador aseguró: «Esto tiene que cambiar. La decisión de PG&E de protegerse de la responsabilidad a expensas de los californianos trabajadores no será tolerada. Ignora los medios de vida de las personas. Dependemos de la electricidad para vivir y ganarnos la vida».
Funcionarios de San José también dijeron que preferían que PG&E mejorara sus equipos en lugar de imponer los cortes.
«Realmente queremos presionar a PG&E para que haga inversiones en su infraestructura y sea segura y confiable para que no tengan que cerrar cuando haya eventos climáticos», dijo el subdirector de la ciudad, Kip Harkness. «Y estamos hablando con ellos y dándoles a conocer esa postura», dijo.
El alcalde de San José, Sam Liccardo, advirtió a los residentes de esa ciudad de un millón de habitantes que son clientes de PG&E —unos 38 000 que afectan a 200 000 personas— que se prepararán para estar sin energía unos siete días. Otras dos grandes ciudades en apagón son Oakland y Berkeley.
Por su parte, los científicos del clima dicen que las condiciones más cálidas y secas en esa región de la costa del Pacífico, debido al aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, han hecho que los incendios forestales sean más generalizados y más intensos.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos advirtió de los fuertes vientos y la baja humedad sobre vegetación seca, que actúan como «combustibles». «Esta es una receta para el crecimiento explosivo de incendios, si se inicia un fuego», dijo el servicio meteorológico. «Ten lista tu mochila».
El servicio que comenzó temprano el miércoles por la mañana emitió advertencias de bandera roja para algunas áreas. Las advertencias significan que «se espera que las temperaturas cálidas, las humedades muy bajas y los vientos más fuertes se combinen para producir un mayor riesgo de incendio», dijo el servicio.
