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La recreación debe ser algo de masas, y el Consejo Popular debe ser el ámbito por excelencia, el corazón de todo cuanto se haga. Si no hay actividades que movilicen para ver películas, o para emprender caminatas; si el esparcimiento no es con todos, entonces estamos muy lejos de tener la recreación que se quiere.
Este miércoles el vicepresidente del Consejo de Estado, Esteban Lazo Hernández, compartió ese razonamiento en la reunión de la Comisión Central de Recreación que viene pulsando esfuerzos, resultados y deficiencias de instituciones y organismos responsabilizados con las opciones de la temporada estival.
La idea tuvo como punto de partida el análisis de lo que se hace por el esparcimiento de la gente en el Consejo Popular Lotería, del Cotorro, en la capital.
La exposición pormenorizada de su presidenta, Estrella Barrera Delgado, sobre actividades desarrolladas en espacios e instalaciones del territorio, dio paso a reflexiones e interrogantes que —como quedó claro en el espíritu de la reunión— nunca serán suficientes si se trata de un tema tan sensible y profundo como el de recrearse.
Es preciso entender, comentó Esteban Lazo, que sin una mirada integral al asunto no existirán resultados: «¿Habrá movimiento de masas sin la participación activa de los jóvenes comunistas, de la Federación de Mujeres Cubanas, de los Comités de Defensa de la Revolución, de los campesinos, de los combatientes, de todas las fuerzas posibles?», indagó el Vicepresidente cubano.
«Se pueden hacer muchas actividades, y la gente sentir que no se recrea —meditó el también miembro del Buró Político—; porque no se trata de números, sino de lograr sumar a las personas, de verdad, desde la base».
Esa percepción resultó recurrente en la Comisión, en la cual más de un participante dijo que podría no alcanzar el tiempo a las entidades del país que se propongan exponer cuánto se ha hecho y se hará en pos del disfrute del pueblo. Pero lo esencial, se dijo, es que lo realizado tenga un efecto palpable, y que cada vez haya menos trecho entre los informes y la realidad del día a día.
Otros conceptos abordó Esteban Lazo, como la lucha contra la indisciplina y contra valores ajenos al ser humano que deseamos formar. Al hacer alusión a la complejidad que entraña pensar y lograr una recreación desde la Isla, el dirigente recordó que se trata de una verdadera lucha, pues Cuba no vive en una burbuja.
«No podemos apartarnos del mundo —expresó—, pero tampoco dejarnos arrastrar por él. Esa es nuestra gran batalla ideológica, nuestra lucha espiritual». Y añadió: «Alguien dijo que los seres humanos se parecen más a su tiempo que a sus padres. Pero hay valores morales y espirituales que los padres no pueden permitir que se pierdan. Podrán cambiar algunas costumbres, pero no los mejores sentimientos».
Hacia el final del encuentro, el miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, Víctor Gaute, comentó conceptos a tener en cuenta en esa contienda nada fácil por la recreación: un informe puede elaborarse impecablemente; pero siempre que sea posible, habrá que ir a los lugares para constatar de primera mano cómo funcionan las cosas; es preciso que cada quien cumpla con sus deberes, y no solo eso, sino que además lo haga con verdadero empeño; de lo que sale mal debemos conocer hasta el último detalle, y solo así sabremos cuándo las deficiencias obedecen a falta de recursos y cuándo a problemas subjetivos.
