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El arte de precaver nunca sobra

El miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, recorrió este jueves territorios afectados por Idalia. Transmitió saludos del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, quien atraviesa por un proceso viral

Autores:

Alina Perera Robbio
René Tamayo León
Yaima Puig Meneses

Un reconocimiento a las autoridades y el pueblo de Pinar del Río, por la preparación y la disciplina antes, durante y después del paso del evento hidrometeorológico Idalia, transmitió el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, quien en la mañana de este jueves recorrió los dos municipios de Vueltabajo más impactados por el meteoro, Sandino y Guanes.

El Jefe del Gobierno de la República visitó áreas de Pinar del Río, Artemisa y Mayabeque, donde hizo llegar un saludo del Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel
Bermúdez, quien tenía previsto encabezar esta jornada, pero está atravesando un proceso viral del que todavía no se recupera, aunque está bien, informó Marrero Cruz.

Temprano en la mañana, el Primer Ministro llegó a la cabecera del municipio de Sandino, donde fue informado de los daños ocasionados por el meteoro y el rápido avance en el proceso de recuperación, tanto a nivel de provincia como en esta localidad.

Estuvo acompañado por el vice primer ministro Jorge Luis Perdomo Di-Lella, ministros y viceministros de varias carteras, y por la primera secretaria del Comité Provincial del Partido, Yamilé Ramos Cordero, y el Gobernador, Eumelín González Sánchez.

Ramos Cordero informó que de las más de diez mil personas que fueron protegidas, la mayoría de ellas en casa de familias, amigos y vecinos, solo quedan en esa situación 64 familias, unas 249 personas, que en las próximas horas ya deben regresar a sus hogares.

Sobre la electricidad, que durante el paso del evento se interrumpió en alrededor del 80 por ciento de la provincia, se supo que más del 90 por ciento de los clientes ya dispone del servicio, gracias al trabajo de las fuerzas propias del territorio y a la ayuda solidaria de brigadas de linieros de Matanzas, Ciego de Ávila, Camagüey, Villa Clara y Las Tunas.

Se estima que el sábado el suministro de electricidad esté normalizado en todo Pinar del Río, con las afectaciones inevitables del día a día.

De forma preliminar, 1 018 viviendas fueron impactadas, fundamentalmente por pérdidas parciales en los techos. Las afectaciones se acumulan en los municipios más occidentales; en Sandino se reporta el mayor número, donde se contabilizan
hasta ahora 658 viviendas con algún tipo de daño.

Las oficinas de trámites están activas, el propósito es hacer un trabajo de calidad, donde cada caso sea visitado y atendido, enfatizó también Ramos Cordero.

Sobre el sector hidráulico, se dio a conocer que los embalses acumulan el 67 por ciento de su capacidad y 135 fuentes de abasto están funcionando. El presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Antonio Rodríguez Rodríguez, informó de la llegada de nuevos equipos de bombeo, lo cual permitirá que la provincia esté en mejores condiciones para el suministro de agua que antes del paso de Idalia.

En la agricultura, se comentó que las afectaciones han sido mínimas y las lluvias han beneficiado, independientemente de las inundaciones que se constatan en algunos cultivos, ante lo cual la estrategia ha sido drenar de forma urgente los campos.

En el tabaco se perdieron cinco casas de cura, pero la provincia, a pesar de los grandes daños dejados en septiembre pasado por el huracán Ian, mantiene su propósito de disponer para la campaña 2023-2024 de las suficientes casas de cura que garanticen la cosecha de las casi 13 000 hectáreas de tabaco previstas a sembrar.

A punto de comenzar las clases, la tormenta Idalia dejó daños en 52 instalaciones escolares, sobre todo en techos, pero mayormente tampoco son situaciones complejas. Se aseguró que el curso escolar 2023-2024 comenzará en toda la provincia, en sus centros escolares, incluyendo la recuperación de las 127 escuelas que
continuaban pendientes tras el paso del huracán Ian.

Con respecto a los viales y otras infraestructuras, el ministro de la Construcción, René Mesa Villafaña, señaló que no hay daños de gran envergadura. Asimismo, explicó que para la recuperación de la vivienda están llegando materiales, además de los recursos que hay en las localidades, incluyendo la entrada de más de 250 toneladas de cemento, techos de donación y otros recursos.

Betsy Díaz Vélazquez, titular de Comercio Interior, informó que para la canasta básica se garantizan las siete libras de arroz. En diez municipios se dispone ya de la totalidad de este producto y el azúcar, al tiempo que se asegura la distribución del pollo del mes de agosto.

Se respalda, además, la distribución de los alimentos previstos para personas en situación de vulnerabilidad, que suman más de 15 000 pinareños; y la distribución de un kilogramo de arroz adicional por núcleo.

Perdomo Di-Lella destacó el trabajo realizado en la provincia por el personal de Salud para el control de epidemias y garantizar otras atenciones médicas a la población.

En Manuel Lazo e Isabel Rubio

El Primer Ministro recorrió zonas de los consejos populares de Manuel Lazo e Isabel Rubio, donde intercambió con pobladores que lo esperaban. Alegría hubo en Manuel Lazo cuando se informó que la tarde noche de este jueves ya debe llegar el servicio eléctrico a la comunidad, mientras por la carretera avanzaban las brigadas de linieros que asumirán la tarea.

En los encuentros, los lugareños también le expresaron a Marrero Cruz
varias insatisfacciones, especialmente en Isabel Rubio, donde vecinos que colindan con el río Cuyaguateje mostraron preocupación por la recuperación de los bienes perdidos, el estado de sus casas y la disponibilidad de alimentos agrícolas y procesados.

En un intercambio con la prensa, el Jefe del Gobierno de la República recordó que este recorrido es parte del sistema de trabajo de Gobierno, cada vez que ocurre un evento de este tipo, y que siempre encabeza el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

Destacó la preparación que hizo la provincia, previo a la llegada del evento hidrometeorológico. Aquí ha habido
—dijo— «un proceso de preparación, de activación de todas las autoridades, incluso de la población, para enfrentar este fenómeno». Pinar del Río, subrayó, es un ejemplo de preparación ante estos fenómenos.

Recordó también que el Gobierno central envió, ya después del paso del evento, al vice primer ministro Jorge Luis Perdomo con un grupo de ministros para apoyar al territorio, apreciar la situación de los daños y trabajar en el proceso de recuperación.

Marrero Cruz ponderó la experiencia acumulada en Pinar del Río durante muchos años ante estos eventos meteorológicos, incluyendo el paso del huracán Ian en septiembre pasado, todo lo cual les ha permitido avanzar en la recuperación

Señaló que los daños provocados por Idalia tampoco fueron de gran magnitud, pero que no por ello se puede subestimarlos, porque siempre hay personas afectadas y también se dan problemas en la economía.

Sobre los contactos directos con la población, el Jefe del Gobierno de la República señaló que hay un reconocimiento a lo que se ha hecho, «pero también, por supuesto, hay insatisfacciones».

Comentó al respecto que estas preocupaciones, como las planteados en Isabel Rubio, van más allá de los daños concretos provocados por la tormenta Idalia, pues se trata de problemas acumulados de eventos anteriores.

Enfatizó sobre la importancia del diálogo con la población. «Siempre es importante escuchar al pueblo, lo que nos sugiere que tenemos reservas desde el punto de vista organizativo y que, a pesar de las dificultades con los recursos, siempre se puede hacer un poco más, siempre se puede llegar a las personas y buscar, si no las soluciones definitivas, sí algunas parciales para aliviar los problemas.

Nosotros, añadió Marrero Cruz, vamos a continuar este proceso de seguimiento —tanto aquí como en Artemisa y Mayabeque— y vamos a estar acompañando el territorio hasta que logremos la recuperación total de estas afectaciones y las pendientes de otros eventos.

En Artemisa, el reto de cosechar con agilidad

Las afectaciones que dejó en la provincia de Artemisa el paso de la tormenta tropical Idalia fueron mínimas, aseguró la presidenta del Consejo de Defensa Provincial, Gladys Martínez Verdecia, en declaraciones al equipo de prensa de la Presidencia, tras concluir aquí un recorrido del Primer Ministro por varias áreas productivas del municipio de Güira de Melena.

Los daños, esencialmente en los sembrados de plátano, detalló, ocurrieron en lugares que antes ya estaban en período de cosecha, y lo que se ha hecho en los últimos días es acelerar el ritmo para que las pérdidas sean mínimas.

Con los beneficios que ha dejado aquí la lluvia, había reflexionado poco antes junto a los productores el Primer Ministro, el reto está en saber aprovechar la humedad de los suelos para seguir sembrando todas las tierras que sean cultivables.

«Mientras más sembremos, aun cuando no se alcancen los rendimientos esperados, más comida podremos llevar al pueblo», insistió Marrero Cruz, quien estuvo acompañado por las máximas autoridades de la provincia y el municipio, así como por el ministro de la Construcción, René Mesa Villafaña, y el presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, Antonio Rodríguez Rodríguez.

Tres fueron las formas productivas visitadas por Marrero Cruz, todas dedicadas a la producción de cultivos varios: las cooperativas de producción agropecuaria Niceto Pérez y Waldo Díaz, así como la cooperativa de créditos y servicios Antero Regalado.

En la CPA Niceto Pérez, su presidente, Omar Barroso Miranda, explicó al Primer Ministro que ahora están inmersos en «la recuperación platanera» de 16 hectáreas. Aquí, detalló, se está cosechando y clasificando el plátano en el menor tiempo posible para poder aprovecharlo, tanto para consumo de la población como animal. La premisa, aseguró, es sacar del campo todo lo que sea posible.

Son unas 500 hectáreas de cultivos varios las que de manera general se atienden y ponen a producir en esta cooperativa, que fue visitada en siete ocasiones por el Comandante en Jefe.

Poco después, en la CPA Waldo Díaz, al decir de Yasmani Toirac Laffita, jefe de la finca Granma 1, el evento meteorológico «solo viró un poco algunas plantaciones de yuca que, además, estaban en tiempo de cosecha». Las labores, según se pudo apreciar durante el recorrido, se realizan con agilidad para disminuir pérdidas.

De manera particular en la CCS Antero Regalado, un lugar que al decir de su presidente, Abelardo Álvarez Silva, se mantiene «cosechando algún cultivo cada mes», en estos momentos están en plena preparación de la campaña de frío, y las lluvias de Idalia fueron sumamente beneficiosas.

Fundamental es el peso de esta provincia en la producción de alimentos, no solo para llevar comida a la mesa de la familia artemiseña, sino también para cumplir con los compromisos de entrega a La Habana. De ahí la insistencia del Primer Ministro en aprovechar los beneficios de las aguas de estos días y aumentar el ritmo de siembra para que a futuro se pueda disponer de mayores alimentos.

En Mayabeque

Todo cuidado es poco si se trata de evitar pérdidas humanas y materiales. Sobre esa máxima que deja en claro el valor de prever reflexionó en la tarde de este jueves, desde el territorio ubicado al occidente del país, Marrero Cruz.

En la Empresa Pesquera de Mayabeque —perteneciente al Surgidero de Batabanó, que ha sido golpeado por la depresión tropical Idalia—, el Jefe de Gobierno recibió una detallada información sobre el actual estado de un escenario inmerso en resolver problemas de ahora, y también otros
acumulados en el tiempo y acrecentados por el paso de sucesivos eventos meteorológicos.

La comunidad conocida como Plataforma Uno, en el Surgidero, fue el siguiente punto en el itinerario del Primer Ministro. «Ha quedado bonito esto aquí», dijo él en el lugar embellecido con adocretos sobre las calles, mientras observaba viviendas de mampostería, y también otras de madera; estas últimas, recién hechas.

Plataforma Sur fue el siguiente punto en la agenda. Allí Marrero Cruz recorrió varias viviendas, terminadas o casi terminadas; y entre constructores y futuros beneficiarios habló sobre la
importancia de tener presente los detalles, el acabado de cada obra, y una calidad óptima que es posible alcanzar.

Luego el recorrido tuvo como destino la casa infantil donde son cuidados, en el municipio de Batabanó, los hijos de los trabajadores pertenecientes a la fábrica de muebles Signo. El lugar, con capacidad para 25 pequeños, ha sido acondicionado con excelencia. Allí hasta las sillas hechas para los niños están marcadas por el confort y la belleza.

Cambios y metas en el surgidero de Batabanó

Cuando este jueves los reporteros llegamos a la calle 64 del Surgidero de Batabanó, había allí un fuerte movimiento de mujeres y hombres enfrascados en mover el fango que históricamente se ensaña con los caminos y pasadizos siempre que un temporal golpea al pueblo con la subida de las aguas.

Hubo cambios notables en ese escenario de pescadores, donde viven más de 5 700 personas; pero las metas son de tal magnitud, y tan diversas, que siguen quedando en pie problemas por resolver, como el asfaltado de todas las calles y la construcción de más de siete kilómetros de acera.

Margarita Píres, quien vive en el Surgidero hace ya casi 40 años, habló con los reporteros en nombre de quienes, desde las cinco de la madrugada de este jueves, luchaban por quitar la suciedad en la calle 64. En medio de sus preocupaciones, comentó que la buena noticia es que ya el vecindario tiene agua por redes y que la gente no tiene que poner motorcitos en la orilla de sus casas para poder acceder al preciado líquido.

No lejos de Píres un grupo de trabajadores llegados desde otros municipios ayudaban en la limpieza. En el poblado
había grandes camiones, hombres chapeando la hierba alta y pescadores con sus botas para agua, caminando de un lugar al otro.

A decir verdad, aunque mucho falta por hacer, en el Surgidero ya no se aprecia aquel ambiente del año 2022, cuando el huracán Ian hizo estragos y la subida de las aguas se mezcló con que no había drenaje para los desechos de las casas, y eso generaba angustia en la gente que salía directo de sus hogares al fango de la calle.

En septiembre de 2022, Díaz-Canel recorrió el poblado e indicó agilizar los proyectos que habían sido definidos desde el 2018 —los cuales estaban destinados a construcción de viales y drenajes, abastecimiento de agua, así como restauración y levantamiento de viviendas. Hoy se despliegan esfuerzos para resolver esos problemas antiguos, y también los de nueva data.

LOS GOLPES DE IDALIA

Esta vez, cuando volvió a inundarse la parte baja del Surgidero de Batabanó, la experiencia de las autoridades locales y de los pobladores contribuyó a  enfrentar eficazmente los daños dejados por el paso del huracán Idalia.

Así lo explicó a los periodistas
Manuel Aguiar Lama, gobernador de
Mayabeque, quien, además, dijo que en lo referente a la vivienda no hubo derrumbes, ni afectaciones que se sumaran a las de momentos anteriores.

En el caso de la provincia —según detalló el Gobernador— hubo inundaciones costeras en la playas Caimito y Mayabeque. En el primer lugar hubo inundaciones en viviendas y se logró evacuar oportunamente a todas las personas que lo necesitaban. En cuanto a la agricultura, el sector sufrió afectaciones; y en lo referente al servicio eléctrico, hasta 50 mil clientes fueron perjudiciados. Al respecto, informó que hoy ya están resueltos los daños producidos por el temporal.

Otros municipios —enfatizó— confluyen hoy en el Surgidero para ayudar en la recuperación general, en limpieza de las calles, pintura, y en «tratar de dejar, como ha dicho el Presidente Díaz-Canel, que las cosas queden más bonitas que como estaban originalmente».

Una de las metas que quedan en el horizonte tiene que ver con la colocación de adocretos, idea de lo funcional y de lo bello, en la cual ha insistido el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.

Hay un espacio en el Surgidero de Batabanó, en el cual esas piezas hechas de áridos han sido muy bien utilizadas: Plataforma Uno, donde las calles lucen bellas y limpias gracias al adocreto. Bien lo sabe María Antonia Hernández Aragón, vecina del lugar, quien vive contenta porque al salir de su casa lo ve todo despejado y en orden.

Fue ella quien nos hizo reflexionar con una expresión suya que alude al
bienestar y a la profilaxis: ¿Qué hubiera pasado si con estas aguas —indagó—, en vez de adocretos, solo hubiera habido fango más allá de la puerta?

En la agricultura las principales afectaciones están en cultivos como el plátano. Foto: Otoniel Márquez

 

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