Foot cover de Noticia Autor: Juventud Rebelde Publicado: 03/06/2025 | 09:10 pm
Los Palacios, Pinar del Río.— Vueltabajo fue reconocida por muchos años como una de las provincias más arroceras del país; junto a Sancti Spíritus, Camagüey y Granma, la más occidental de nuestras provincias sobresalía por garantizar una parte importante del principal grano del plato de los cubanos.
A pesar de que las tierras que se cosechan bajo la conducción de la Empresa Agroindustrial de Granos Los Palacios, otrora CAI Arrocero Los Palacios, se erosionan con facilidad, son arenosas y pobres en nutrientes, siempre se ha apostado por esta zona agrícola ubicada al sur del municipio palaceño, pues solo requiere de la aplicación de fertilizantes.
Los años de explotación de la maquinaria, así como el uso de los terrenos conllevaron a una disminución notable de las áreas a cultivar y de los rendimientos. Por ello, y en aras de revertir esta situación, se decidió trabajar desde febrero de 2023 de conjunto con la empresa vietnamita Agri VMA, luego de una serie de evaluaciones de factibilidad del proyecto.
La entidad comenzó a establecer por esa fecha en Cuba una sucursal de producción de alimento animal con maquinaria, materias primas y fórmulas de producción. Una vez estudiado el clima, el suelo y otras condiciones, se convirtió en la empresa pionera del país asiático en participar en la producción de arroz en la nación caribeña.
Los Palacios sería el mejor candidato para el desarrollo de un proyecto conjunto enfocado en las posibilidades reales de Cuba de alcanzar su soberanía alimentaria.
Entre las condiciones que se tuvieron en cuenta se destacan las fuentes naturales de agua para riego, campos planificados para la mecanización agrícola y un alto nivel técnico de los agricultores.
En cambio, el terreno requería de una alta inversión en fertilizantes, lo que llevó a Agri VMA en 2024 a trasladar hasta la zona de siembra materiales, equipamiento, insumos y personal especializado para llevar a cabo el trabajo, según precisó Nguyen Thi Thom, directora de la empresa vietnamita.
El área conocida como Cubanacán fue la escogida para echar a andar el proyecto. Allí ya se cosecharon las primeras 16 hectáreas (ha) con un rendimiento fuera de temporada de 6,5 toneladas de arroz/ha.
Cubanacán tiene de Vietnam
Un total de 1 000 ha, correspondientes a cinco lotes del área de Cubanacán, ha destinado la Empresa Agroindustrial de Granos Los Palacios a este proyecto, según confirmó Ariel García Pérez, director de la entidad.
De ellas, ya estaban plantadas más de 870 y al cierre de mayo se debieron sembrar el resto de las pactadas.
García Pérez explicó que la zona tiene garantía de agua, pues 12 presas tributan a un canal magistral de más de 80 kilómetros, que distribuye el agua en 11 puntos por un sistema de compuertas.
Precisó que «la empresa dispone de la infraestructura industrial necesaria para recibir por encima de las 700 toneladas (t) de arroz cáscara húmedo y 400 t diarias de arroz consumo».
Hasta el momento, la compañía vietnamita concentra el proyecto en la implementación de tres modelos: uno en el que alquilan los servicios de maquinaria de la empresa arrocera cubana; otro que establece la cooperación con entidades de nuestro país, y un tercero, basado en la comercialización de insumos agropecuarios.
La compañía ha implementado la producción de arroz en tierras agrícolas con derechos de uso de la tierra, detalló Thi Thom. Firmó contratos directos con 47 trabajadores cubanos, y se han sembrado más de 800 hectáreas, en su mayoría con variedades híbridas de arroz vietnamita.
La Directora de Agri VMA señaló que unas 60 ha están plantadas con variedades de arroz cubano, y 40 se extienden con variedades puras vietnamitas para servir a la producción de semillas, con el fin de garantizar la que demandará el proyecto y también para comercializarla en Cuba en un futuro.
Explicó la empresaria que el segundo modelo, del cual ya se realizó una implementación piloto en un área de 16 ha con la variedad híbrida CT 16, consiste en el suministro, por parte de Agri VMA, de semillas, fertilizantes, pesticidas y expertos consultores, mientras la parte cubana brinda la maquinaria para la preparación del suelo, la siembra, la fertilización, la cosecha, el secado y el molinado, con una relación de división del producto a partes iguales.
Entre los productores que se acogen a esta modalidad en aras de buscar mejoras en sus resultados y una mayor producción, están los jóvenes Reinier Iglesias González y Alain Rodríguez Silvera.
«Lo importante aquí es tener mejores cosechas y mayores rendimientos, que es en realidad lo que necesita el pueblo. Estamos insertados en un plan de 200 ha que serán distribuidas entre varios campesinos», dice Iglesias González.
El cultivo de tierras en más de 200 hectáreas correspondientes al segundo modelo se extenderá hasta junio venidero, fecha en la que debe iniciar la cosecha de primavera, con el incentivo del envío de contenedores con materiales y maquinarias agrícolas.
Sobre el tercer modelo, explicó Thi Thom que desde enero de 2025 la empresa vietnamita comenzó a entregar materiales a la EMSA (Empresa Mayorista de Suministros Agropecuarios), a la vez que realizan investigaciones y registran materiales agrícolas como semillas, fertilizantes y pesticidas vietnamitas que sean adecuados y satisfagan la demanda del mercado cubano.
Crecer para el futuro
«La empresa está proponiendo que Cuba asigne más área de producción para el modelo uno y se concentre en expandir los modelos dos y tres. Prevemos continuar transfiriendo líneas de tecnología moderna de secado y molienda para convertir a la provincia de Pinar del Río en una zona de producción de arroz de alta tecnología en el país», recalcó.
Ello se corresponde con los resultados de investigaciones previas que apuntan que las variedades de arroz vietnamita son adecuadas para las condiciones del suelo y el clima, en aras de lograr altos rendimientos en Cuba.
«Se espera que con el desarrollo de variedades originales, sea posible abastecer con semillas unas 6 000 hectáreas de la provincia», comentó.
Con un sistema de chequeo sistemático y a pesar de las dificultades actuales generadas por el déficit de electricidad, de combustibles y la obsolescencia de la maquinaria cubana, el proyecto logra resultados muy relevantes, que sirven para aspirar a más apoyos gubernamentales que faciliten las condiciones de expansión de las áreas de siembra.