Los Modelos de Naciones Unidas (MUN) emergen como espacios de formación profundamente transformadores. Autor: Cortesía del autor Publicado: 06/06/2025 | 02:40 pm
En un escenario internacional marcado por los desafíos del cambio climático, los conflictos armados, las crisis migratorias y los dilemas tecnológicos, los Modelos de Naciones Unidas (MUN) emergen como espacios de formación profundamente transformadores. Lejos de ser simples simulacros, estos eventos reproducen el funcionamiento real de la Organización de las Naciones Unidas, convirtiéndose en auténticos laboratorios de ideas, diplomacia y liderazgo juvenil.
Pero su verdadero impacto va mucho más allá de la simulación. En cada Modelo se construye una experiencia educativa que fortalece habilidades esenciales como la oratoria, el pensamiento crítico, la investigación, la redacción, la negociación y la empatía intercultural. Participar en un MUN prepara a los estudiantes no solo para entender el mundo, sino para actuar sobre él desde sus respectivas profesiones.
Diplomacia universitaria con sello artemiseño
En ese contexto integrador y formativo nació Mundiana, el Modelo de Naciones Unidas de la Universidad de Artemisa Julio Díaz González. Esta iniciativa, impulsada por estudiantes con respaldo institucional, es un orgullo colectivo que proyecta a la Universidad hacia horizontes globales, sin renunciar a su identidad local.
Mundiana, que estuvo sesionando entre el 2 y el 5 de junio, no solo simuló sesiones de la ONU, sino que convocó a todas las carreras a pensar el mundo desde la diversidad de saberes. Cada delegación que participó, cada comisión constituida, estuvo integrada por estudiantes que aportaron desde sus distintas formaciones académicas. Todos sumaron, todos aprendieron, todos crecieron.
Este Modelo fortalece así el perfil profesional de cada estudiante, sin importar su carrera, y potencia competencias clave para cualquier campo del saber: trabajo en equipo, argumentación lógica, respeto por la diferencia, liderazgo ético y visión estratégica. Mundiana representa una apuesta por la universidad cubana como centro de pensamiento crítico y acción transformadora.
Mundiana, el Modelo de Naciones Unidas de la Universidad de Artemisa Julio Díaz González. Foto: Cortesía del autor
Una plataforma que fortalece no solo al Derecho
Es cierto que los estudiantes de la carrera de Derecho encuentran en los Modelos de Naciones Unidas una plataforma excepcional para aplicar conocimientos sobre la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional, la diplomacia multilateral, los procedimientos jurídicos y los derechos humanos. Pero no es menos cierto que este espacio resulta también clave para todas las demás carreras, al propiciar una comprensión transversal del mundo contemporáneo.
Los retos del siglo XXI son multidisciplinarios por naturaleza. No pueden resolverse desde una sola perspectiva, y mucho menos desde una sola profesión. Por eso, Mundiana se convierte en un escenario privilegiado para el diálogo entre saberes, donde convergen el lenguaje técnico, la sensibilidad social, el pensamiento ético y la responsabilidad profesional.
Participar en un MUN prepara a los estudiantes no solo para entender el mundo, sino para actuar sobre él desde sus respectivas profesiones. Foto: Cortesía del autor
Cada intervención en un Modelo entrena la mirada global de los futuros profesionales, cualquiera sea su campo de acción. Por eso, participar en Mundiana es también prepararse para ejercer una ciudadanía activa, informada y comprometida con los destinos del país y del planeta.
Dialogar con el mundo y transformar
La Universidad de Artemisa, joven y dinámica, ha entendido que formar profesionales va más allá de la clase magistral o del examen final. Significa abrir las puertas al mundo, fomentar la curiosidad intelectual, cultivar el respeto por la diversidad y promover el compromiso social. Mundiana es la expresión concreta de esa filosofía educativa: un espacio donde los estudiantes se convirtieron en delegados, líderes, negociadores, pensadores globales.
Estos Modelos de Naciones Unidas entrenan la mirada global de los futuros profesionales. Foto: Cortesía del autor
Y no solo eso, Mundiana también fue cultura universitaria, convivencia, crecimiento humano. Es una experiencia que deja huellas en la formación profesional y personal de quienes participaron. Es preparación para el ejercicio ético de cualquier carrera. Es comunidad, es conocimiento, es futuro.
Desde Artemisa, su universidad se proyecta hacia el mundo a través del pensamiento, la palabra y la acción. Y lo hace con jóvenes que se entrenan para no ser espectadores del mundo, sino protagonistas activos de su transformación.