Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Poemas íntimos y amorosos de Carilda y Raidel

Decían, nuevo libro de Ediciones Vigía bajo la firma de Carilda y Raidel Hernández Fernández, viudo de la poetisa

Autor:

Hugo García

MATANZAS.— Un texto de poemas cruzados, íntimos y amorosos como un diálogo, es Decían, el nuevo libro de Ediciones Vigía bajo la firma de Carilda Oliver Labra, premio nacional de Literatura, y del poeta y escritor Raidel Hernández Fernández, viudo de la poetisa.

«Esos versos hablan del principio de la relación y de la defensa de la continuidad y el amor, y están dirigidos a las personas que quisieron romper la ilusión», dice a este diario Hernández Fernández, en la casona de Calzada de Tirry 81, donde se presentó el texto justo el Día de la Cultura Cubana y como parte de la tertulia que auspicia el proyecto Al sur de mi garganta.

Comenta el escritor que esos poemas Carilda los revisó y guardó para una ocasión como esta. Mientras, Agustina Ponce Valdés, directora de Ediciones Vigía, aseguró a Juventud Rebelde que han publicado mucho la obra de Carilda y que la siguen publicando.

«Ella quería que se publicara un libro con versos de ambos, y nosotros lo publicamos en defensa de esos años que ellos vivieron juntos y de ese tiempo que compartieron, no solo de relación, sino de leer poesía y prosa, de conocer juntos a numerosas personalidades», refiere quien tuvo a su cargo la edición de esta obra.

El texto se titula como uno de los poemas de Carilda, Decían, porque sobre ellos dos mucho se habló y todavía se sigue hablando, y creo que hacía falta que cada uno desde sus versos dijera quiénes eran y cómo fueron sus días juntos en la casona de Calzada de Tirry 81, resalta Ponce Valdés.

Esta edición consta de 200 ejemplares manufacturados e iluminados a mano como parte de la Colección del San Juan. El diseño y los dibujos son de Marialva Ríos, y en su realización fueron usados textiles; papel bond, gaceta y craft de diferentes texturas y gramajes, así como acrílicos, hilos de saco y café.

Ponce Valdés recuerda que Carilda siempre fue una defensora de Vigía como proyecto y participaba en sus actividades. «Hasta el último de sus días nos llamaba y animaba sobre el trabajo que hacíamos, creo que fue como la vigía mayor, porque también nos recomendaba autores a publicar y momentos en que se debía hacer.

«En nuestra editorial a la poetisa matancera se le publicaron textos como Canto a Matanzas, Madre mía que estás en una carta, Guárdame el tiempo, Canto a Fidel, Temblor bajo la piedra, Pronóstico gris… También hubo cumpleaños que lo celebramos aquí. Fue jurado de nuestros concursos y quien sugirió que el concurso de la casa se nombrara América Bobia, de carácter nacional. Ella siempre está presente en nuestra vida y quehacer».

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