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Bogotá, abril 3.— La convocatoria de la embajada francesa a la senadora colombiana Piedad Córdoba para que acudiera a una reunión urgente en esa sede diplomática, mostró este jueves los primeros atisbos de concreción de una misión anunciada por Francia para dar asistencia médica a Ingrid Betancourt en la selva, y a otros retenidos por las FARC.
La cita fue dada a conocer por el periódico El Espectador, quien precisó que la congresista —gestora con el presidente venezolano Hugo Chávez de una mediación para el canje, interrumpida por decisión del gobierno colombiano— estuvo acompañada por la presidenta de la comisión de Paz del Senado, Gloria Inés Ramírez, y la madre de Ingrid, Yolanda Pulencio.
Informaciones de la víspera habían dicho que la misión, resultado de la iniciativa del presidente francés Nicolas Sarkozy, ya se encontraba en Colombia y «estaba en marcha» con el acompañamiento de Suiza, España, y la Cruz Roja Internacional. Pero la ausencia de un pronunciamiento de las FARC al respecto, sembró dudas sobre su certeza.
Otros despachos daban a conocer la anuencia del presidente colombiano Álvaro Uribe, quien dijo que suspendería las acciones militares en el lugar, «una vez que nuestras autoridades competentes sean informadas sobre las coordenadas del sitio».
Analistas destacan que la ausencia del Comandante Raúl Reyes, vocero y negociador de la guerrilla asesinado en marzo durante un operativo colombiano en Ecuador, interrumpió todos los contactos. Las FARC han asegurado que Reyes se disponía a entrevistarse con funcionarios galos, en relación con Ingrid. La liberación unilateral de Clara Rojas y Consuelo González, y luego de otros cuatro ex congresistas, había abierto muchas expectativas.
Ahora, una carta firmada por el denominado canciller de las FARC, Rodrigo Granda, y el comandante Jesús Santrinch, descartó otras liberaciones unilaterales. «No es admisible que nos pidan más gestos de paz, cuando después de tantas muestras fehacientes de nuestra voluntad política por encontrar salidas al conflicto, se nos responde con infamias», afirma la misiva, dada a conocer por ANNCOL, y advierte que «solo como consecuencia de un canje de prisioneros, saldrán libres quienes están cautivos en nuestros campamentos».
