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MOSCÚ, enero 20.— El abogado de la hija de Muammar Gadaffi presentó una petición a la Corte Penal Internacional (CPI) para investigar el asesinato del dirigente árabe, señala hoy el canal de televisión Russia Today (RT), citado por PL.
Nick Kauman, un abogado israelí contratado por Aisha Gadaff, declaró al RT que envió una solicitud al procurador principal de la CPI, cuyo órgano, había reconocido públicamente a la muerte de Gadaffi como un crimen de guerra.
El letrado señaló que en respuesta a su solicitud, la referida instancia judicial argumentó que era necesario conceder cinco meses de plazo para ver si las actuales autoridades libias pueden resolver el caso, para solo entonces analizar que se puede hacer.
La CPI alegó también la posibilidad de regirse por el principio complementario, es decir, si las autoridades pueden realizar la investigación, se les concede esa oportunidad, pero Kauman estima que en Libia no existe ni la voluntad ni la capacidad para hacerlo.
El abogado israelí destaca, sobre todo, que la investigación del asesinato de Gadaffi es una operación compleja que debió iniciarse el mismo día del crimen o cuando más en el transcurso de una semana, pues no se trata de un hecho que pueda postergarse durante meses.
Para la pesquisa es necesario tomar muestras del lugar de los hechos y declaraciones a testigos, efectuar pruebas balísticas y de otro tipo, e incluso una autopsia del cadáver del líder libio, subrayó.
Cabe recordar que la CPI tiene todas las condiciones para haber iniciado hace mucho tiempo la indagación, pues se da por sentado que cuenta con los mejores criminalistas del orbe, afirmó Kauman.
Sin embargo, comparó, las dos órdenes de arresto por supuestos crímenes de guerra emitidas contra el dirigente libio fueron aprobadas de inmediato por la CPI, aún cuando se carecían de todos los argumentos para hacerlo.
Asimismo, se refiere al caso Saif al Islam, hijo de Gadaffi y quien debe ser juzgado en el país norafricano por alegados crímenes contra la humanidad, pero el letrado pone muy en duda un juicio justo en Libia, a cuyo poder llegaron dirigentes de la oposición armada.
