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La policía italiana reprimió a los manifestantes que salieron a las calles a protestar contra las nuevas medidas gubernamentales. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:16 pm
ROMA, enero 25.— La policía italiana reprimió este miércoles a manifestantes que intentaban penetrar en el Parlamento durante la jornada de huelgas contra las medidas restrictivas del gobierno del primer ministro Mario Monti.
Según reseñó ANSA, al menos dos personas resultaron heridas como consecuencia de la acción policial que se desató cuando cerca de un centenar de pescadores, concentrados en las cercanías del congreso, expresaban su malestar por el aumento de precio de la gasolina, y por la introducción en breve de una licencia de pesca por puntos.
«No tenemos futuro» gritaban los pescadores frente a Montecitorio, sede de la Cámara baja del Parlamento. Otros manifestantes alzaban carteles que advertían: «El precio del combustible sube, nuestros sueldos bajan».
También este miércoles prosiguió, la huelga de los camioneros, medida de fuerza que está generando tensiones, caos en el tránsito, cierre de fábricas, problemas de abastecimiento y sobreprecios, según fuentes oficiales.
El gremio de camioneros, Transportes Unidos, anunció que continuarán la protesta hasta el próximo sábado en caso de que el Ejecutivo no se pronuncie con opciones favorables, reportó PL.
En ambos casos las protestas apuntan en gran parte contra las medidas impulsadas por el gobierno Monti que desde la semana pasada ha provocado la reacción de los trabajadores contra las severas medidas de austeridad del gobierno que, con severos ajustes, trata de equilibrar la alicaída economía del país.
la ministra de Interior, Annamaria Cancellieri, declaró que seguían con atención y firmeza las protestas, y aunque estaban abiertos al diálogo, también a «usar todos los instrumentos que la ley nos pone a disposición».
Los mercados italianos estaban abarrotados de personas ante el miedo al desabastecimiento de los alimentos, hecho que fue aprovechado por comerciantes para aumentar precios.
Varios sindicatos, entre ellos, el de los ferroviarios, planean unirse a las demostraciones contra la abolición, prevista en el decreto de desregulaciones, de la obligación de la empresa de adoptar un específico contrato.
El gobierno italiano promueve un régimen de libre competencia y abre el mercado al exterior, con el apoyo del capital privado.
