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BEIJING, octubre 26.— China y Japón se comprometieron este viernes a forjar vínculos más estrechos y continuar mejorando las relaciones, en una intensa jornada de visita del primer ministro nipón, Shinzo Abe, al gigante asiático.
Durante un encuentro celebrado en la Casa de Huéspedes Diaoyutai, en Beijing, el presidente chino, Xi Jinping, dijo que los vínculos entre las dos naciones regresaron al camino correcto y muestran un impulso positivo, destacó PL. Por su parte, Abe expresó confianza en que puedan trabajar de conjunto para abrir una nueva era de cooperación.
Previamente, ambas naciones firmaron varios acuerdos de colaboración económica que sustentan esa nueva etapa en las relaciones bilaterales y ratifican el compromiso de los dos países con el libre comercio.
La amplia gama de acuerdos abarca casi los 3 mil millones de dólares, según detalló AFP. De acuerdo con el primer ministro japonés, citó PL, con esta firma se podrá avanzar conjuntamente en proyectos de infraestructura en terceros mercados y fortalecer una amplia gama de cooperación que va desde el financiamiento hasta la innovación.
En conferencia de prensa conjunta, Abe y el primer ministro chino, Li Keqiang, anunciaron que los acuerdos abarcan otros sectores como el comercio, el deporte, el intercambio cultural y el diálogo de alto nivel.
Li expresó la disposición de China de mantener relaciones de largo plazo con Japón, mientras que Abe ratificó esta posición al agregar que ambas naciones comparten metas y responsabilidades que influyen en la estabilidad regional.
Un futuro brillante nos espera, enfatizó el líder japonés, quien realiza su primera visita de Estado a China desde que asumió el poder en 2012.
Abe llega al gigante asiático en el contexto del aniversario 40 de la firma del Tratado de Paz y Amistad entre los dos pueblos, escenario propicio para que Beijing y Tokío traten de normalizar sus relaciones bilaterales, marcadas por un pasado de disputas territoriales y diferencias de criterios históricos.
Esta es la primera visita a China de Abe, quien está en el poder desde 2012, y su octava reunión con Xi. Japón, que se vio perjudicado por los aranceles estadounidenses, busca afianzar sus relaciones económicas con nuevos mercados, un objetivo primordial también de Beijing.
