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WASHINGTON, mayo 8.— Según informes, la administración Trump está considerando un plan para que EE. UU. lidere la administración de Gaza tras el asedio israelí, de forma similar a cómo Washington dirigió Irak tras la invasión y ocupación liderada por Estados Unidos en 2003.
La agencia noticiosa Reuters informa que se han mantenido conversaciones de alto nivel centradas en un Gobierno de transición encabezado por un funcionario estadounidense que supervisaría Gaza hasta que se desmilitarizara y estabilizara, y surgiera una administración palestina viable.
Las fuentes, que hablaron bajo condición de anonimato por no estar autorizadas a comentar las conversaciones públicamente, compararon la propuesta con la Autoridad Provisional de la Coalición (CPA) en Irak que Washington estableció en 2003, poco después de la invasión liderada por EE. UU. que derrocó a Saddam Hussein.
La mayoría de los expertos citan al CPA como el catalizador de una insurgencia inminente que sumió al ejército estadounidense en la guerra en Irak durante más de una década, en la que cientos de miles de personas murieron a un costo de más de 3 billones de dólares.
Al igual que la guerra liderada por Estados Unidos en Irak, Reuters añade que «no habría un plazo fijo para la duración de una administración liderada por Estados Unidos [en Gaza]», mientras que «una autoridad provisional liderada por Estados Unidos en Gaza implicaría más profundamente a Washington en el conflicto israelí-palestino y marcaría su mayor intervención en Oriente Medio desde la invasión de Irak».
La publicación Responsible Statecraft toma la información de Reuters en la que Annelle Sheline, investigadora del Instituto Quincy, calificó la idea de «espantosa y absurda», y añadió: «Los estadounidenses deberían recordar la inutilidad de imponer un Gobierno en Irak a punta de pistola. El hecho de que Trump aparentemente esté considerando esto demuestra lo dominado que está por Israel, en lugar de priorizar los intereses de Estados Unidos».
«Si esto es cierto, representa un giro radical hacia las políticas de la administración Bush en cuanto a la ocupación de territorios de Oriente Medio», añadió Trita Parsi, del Instituto Quincy. «Es lo contrario de lo que Trump prometió al pueblo estadounidense en cuanto al regreso de las tropas y la desvinculación de Estados Unidos de la región».
Parsi continuó: «También demuestra que mientras continúe la ocupación israelí de los territorios palestinos, que es la causa fundamental de la violencia, Estados Unidos siempre enfrentará presiones para que se repliegue en Oriente Medio».
El Instituto Judío para Asuntos de Seguridad Nacional (JINSA), un centro de estudios neoconservador de línea dura, y la Coalición Vandenberg publicaron el año pasado un plan similar al que informó Reuters, que exigía la creación de una entidad privada, el «Fondo Internacional para el Socorro y la Reconstrucción de Gaza», dirigido por «un grupo de países árabes como Arabia Saudí, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos» y «apoyado por Estados Unidos y otras naciones».
Por otra parte, decenas de cocinas comunitarias en Gaza cerraron este jueves tras quedarse sin suministros debido al bloqueo total israelí sobre el territorio palestino, que está provocando hambruna a millones de civiles, informó antiwar.com.
Amjad al-Shawa, director de la Red de Organizaciones No Gubernamentales Palestinas (ONGP) en Gaza, declaró a Reuters que la mayoría de las 170 cocinas comunitarias en Gaza ya han cerrado y que las pocas que quedan pronto se quedarán sin suministros.
Tan solo un día antes, World Central Kitchen, una organización benéfica con sede en Estados Unidos, anunció que se vio obligada a suspender sus operaciones en Gaza.
