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La sonda Mars Express Autor: Tomado de Internet Publicado: 26/07/2018 | 09:29 pm
En el acordeón del P14, una señora rellenita comprueba su superioridad sobre tu delgadez, pero todo sea soportado en nombre de poder llegar pronto a casa y enterarse de lo que queda de Barranquilla 2018 para hoy. Prender el televisor luego, superada la epopeya guaguística, y darse cuenta de que al ritmo que sudas, bien podrías ser tú misma la que está pedaleando, nadando, corriendo… a la par de los atletas. Pero nada de quejas, que es el verano de Cuba.
Una ducha fría después, enterarse rápido de las noticias de la ciencia por estos días. Y ahí sí, ya sin dudas, comprobar que el universo es capaz de conspirar y burlarse de una. La Tierra con puntos de récord de calor, y ahora, justo en medio del canicular mes de julio, señoras y señores, ¡hay un lago de agua fría en Marte! ¿Es en serio?
Muy en serio
Sí. Muy seriamente ha trabajado la sonda Mars Express, responsable tecnológica de este descubrimiento. Desde 2012 hasta 2015, esta pequeña nave ha recorrido con su vuelo un área de al menos 200 kilómetros en el polo sur del planeta rojo, con temperaturas inferiores a los 110 grados bajo cero.
Si lo que viene a la mente es que la cifra es baja, la explicación es fácil: Mars Express no sobrevuela simplemente las áreas de Marte, sino que un complicado sistema de emisiones radiales comprueba la existencia de líquido en la superficie rastreada. A que eso complica un poco el cuadro.
El instrumento que se encarga de emitir ondas radiales para la comprobación, llamado Marsis, no detectó agua en el terreno que ahora se considera un lago hasta rastrearlo por vez número ¡30! Por eso justo ahora que tantos en este planeta sudamos en densidades y colores varios, ha sido el momento en que un equipo italiano de astrónomos dio la noticia de que, si usted lo desea y puede, ya es posible darse el chapuzón en el planeta rojo.
Se trata de un lago de 20 kilómetros de largo, pero a 1,5 kilómetros bajo la superficie del hielo, y por supuesto, las implicaciones de este primer hallazgo de agua en Marte van más allá de burlarse de nuestro calor: ahora es más acertado pensar en vida habitando ese planeta.
Sobre la posible profundidad del lago, Roberto Orosei, del Insituto Nacional de Astrofísica de Italia y líder del estudio que dio a conocer la noticia en la revista Science, ha explicado a la prensa que es muy complicado conocer la profundidad «porque el agua absorbe las señales del radar», pero también aseguró «al menos hablamos de una profundidad de un metro».
Sobre la cantidad de agua líquida que ya podemos llamar marciana, aunque nos siga sonando a chiste, el astrónomo aseguró que será necesario horadar esa superficie para saber si se trata de rocas porosas infiltradas de agua o de un lago propiamente dicho. Se trataría de una misión bastante compleja, pero Orosei cree que con la tecnología que ya tenemos es posible llevarla a cabo.
Ese radar tiene un tornillo suelto
Como era de esperar de un espíritu científico que se toma en serio, lo optimista del descubrimiento es tomado con cautela por la comunidad de astrónomos en general, que han apuntado ya a las flaquezas de asumir el hallazgo sin otras comprobaciones.
Otros instrumentos de detección de líquidos deberán llegar a resultados similares que los de Mars Express para poder hablar de pruebas definitivas; sin embargo, tratándose apenas de un diez por ciento del polo sur marciano explorado, dar con este tipo de datos tempranamente vuelve a muchos optimistas.
Asimismo, otros riesgos dificultan los pasos por venir. Lo más complicado estaría en evitar falsos positivos de vida si el agua es contaminada con los microbios que viajen en los dispositivos para perforar la capa de hielo, lo cual generaría confusiones muy peligrosas.
La otra gran dificultad para la esperanza de hallar organismos es aún más lógica, tiene que ver con las temperaturas extremas y la salinidad.
Esta masa de agua muy fría es salada, un hábitat no muy propicio para la vida, según los datos extraídos de las imágenes del orbitador. No obstante, los científicos piensan que puede existir de modo similar a las reservas subglaciales de la Antártida terrestre, donde sí se han encontrado organismos sencillos, llamados extremófilos, por las condiciones extremas en que sobreviven y crean sus ecosistemas adaptados.
Otro obstáculo a resolver por los astrónomos de la Agencia Espacial Europea es el tiempo de la misión: con solo el diez por ciento del polo marciano recorrido, se necesitarían más de diez años para revisar el resto de ese territorio.
«Necesitaríamos por lo menos 15 años más para explorar todo el polo sur de Marte, pero apenas nos quedan cuatro o cinco años más de operación, nuestras baterías están ya muy desgastadas y queda poco combustible. Cuando se agote seremos incapaces de gobernar la nave», explicó Orosei.
Un aplauso para Mars Express y Marsis
Steve Clifford fue pionero en teorizar hace 30 años que podría haber lagos de agua líquida bajo los polos de Marte de modo similar a los casquetes polares terrestres. De esa idea nació la misión de Mars Express desde 2002, pero la nave atravesó la dificultad del gasto de memoria y en lugar de grabarse todas las emisiones de su radar, solo se analizaba cada 100 ecos de radar como si fuera uno solo, hallando una media de la intensidad de cada eco.
Este método dejaba fuera los ecos radiales más intensos, precisamente los capaces de evidenciar la presencia de agua líquida a profundidad.
Para 2011 los ingenieros de la misión modificaron el software de la nave y se comenzaron a recibir los datos en bruto que hicieron posible esta noticia.
La tierra caliente
Este hallazgo llega en medio del calor en la Tierra. Y no solo el literal, ese que nos está sacando el agua del cuerpo a nosotros, sino también el calor de la carrera astronómica entre potencias por hacerse del primer lugar en la esperanza de hallar vida en Marte.
Aunque las primeras sondas que detectaron paisajes de cañones y lechos de ríos que sugerían que el agua había fluido sobre la superficie de aquel planeta rojo fueron las norteamericanas Viking y Mariner, de la NASA, en la década de los 70, la Mars Express es representante de la Agencia Espacial Europea, que esta vez se hace con la gloria de dar con la noticia astronómica más relevante después de la comprobación de las ondas espaciales.
Pero es la potencia china la que espera que ante las dificultades de energía y memoria de Mars Express, y el límite de tiempo de su misión, sea posible enviar un orbitador similar para el año (estratégico) de 2020 que sea capaz de terminar la tarea y comprobar la existencia del lago un paso más lejos.
Por si fuera poco, este viernes habrá un eclipse de Luna roja que se anuncia como el más largo en lo que va de siglo, con una hora y casi 43 minutos de fase total.
Este tipo de eclipses toma el nombre popular de Luna roja por el tono rojizo que adquiere el astro cuando la luz solar es interrumpida por la posición de la Tierra.
Aunque no será visible desde Cuba, a los terrestres acalorados, ventiladores de por medio y mucha fuerza emocional, nos queda el regocijo por las noticias astronómicas recientes y esperar a que las potencias luchen por descubrir cada vez más los planetas vecinos mientras acá abajo, venga de donde venga el dato, y con un abanico, podamos alegrarnos con la noticia astronómica en nuestros televisores.
Los cráteres que sugieren presencia de antiguos lagos en Marte fueron descubiertos por misiones anteriores, pero hasta hoy, no se había localizado un lago actual. Foto: Tomada de www.teinteresa.com
