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«Con el nuevo programa energético que estamos aplicando ahorraremos las dos terceras partes de la electricidad que venimos consumiendo, y en el futuro próximo el ciento por ciento de las familias que cocinaban con kerosén cocinarán con electricidad, y el ciento por ciento que cocinan con gas, también lo harán con electricidad, pues ya se han distribuidos más de diez millones de artículos eléctricos y faltan más por repartir».
Así afirmó el Comandante en Jefe Fidel Castro durante su intervención en el acto de inauguración de la mayor batería de grupos electrógenos instalados en Cuba, celebrado anoche en la provincia de Holguín, en el marco del aniversario 53 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.
«El país está ahorrando más de un millón de kilowatts de electricidad con la implantación de este programa. No quedará un motor de agua por sustituir. En ocho meses los cambiaremos porque consumen mucha corriente. También sustituiremos toda la red eléctrica para ahorrar aún más corriente», aseveró Fidel.
Durante su intervención el presidente cubano se refirió a la disposición del país de colaborar en la formación de profesionales de la salud para que luego laboren en sus respectivas naciones.
«En estos momentos tenemos 21 000 jóvenes latinoamericanos estudiando medicina en Cuba, y dentro de diez años formaremos 100 000 nuevos médicos para que presten servicio en sus respectivos países de América Latina.
«Los médicos del Tercer Mundo están aún por formar, y en ese sentido Cuba solo está aportando su granito de arena para cumplir con una misión que salvará la vida de millones de personas en este continente».
El líder del Revolución cubana reafirmó la disposición de la Isla de continuar desarrollando este tipo de programas con la idea de formar los médicos que necesita el continente.
«Los centros de estudios para esos futuros galenos cuentan con todas las condiciones para que ellos se gradúen como un médico formado en una universidad europea y tal vez con mayor preparación.
«Estos jóvenes tienen la posibilidad de contar con muy buenos programas audiovisuales, donde mediante imágenes y documentales conocen las partes de un ser humano. Además —explicó— cuentan con computadoras donde tienen archivadas el contenido de todas las bibliotecas del mundo.
«¿Cuándo un estudiante de medicina tuvo eso a su alcance?, preguntó el Comandante en Jefe. Recuerdo que antes los estudiantes de medicina solo veían un cuerpo humano fragmentado cuando algún pobre o desamparado aparecía muerto y nadie reclamaba su cuerpo, entonces lo llevaban para las escasas facultades de medicina y se lo mostraban a los muchachos.
«Eso ahora ya no es así, y hay muchas otras cosas que han evolucionado considerablemente por lo que los médicos de hoy deben graduarse con mayor profesionalidad que los anteriores», acotó Fidel.
«Cuba ha demostrado cómo con voluntad política se pueden alcanzar grandes logros. Esta misma provincia de Holguín acoge ahora 1 600 estudiantes de países latinoamericanos pero si se lo propone puede recibir 2 000 o 3 000 también. Sé que pueden hacerlo. Con un modesto esfuerzo de las familias cubanas podemos tener hasta más de 100 000 familias dispuestas a recibir estudiantes de medicina», explicó el líder cubano.
«Este país ha formado alrededor de 600 000 profesionales universitarios, y más de medio millón de jóvenes se encuentran realizando estudios superiores, todos los cuales, en mayor o menor medida, cuentan con una vivienda, porque las sedes universitarias están extendidas ya hasta los municipios del país y muchas de esas personas van desde sus casas hasta la universidad», manifestó el Comandante en Jefe.
