Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Casi ocho años generando electricidad a partir del viento

Le ha ahorrado al país más de 500 toneladas de combustible, pese a las temporadas en que permaneció inactivo por situaciones técnicas

Autor:

Juventud Rebelde

Fotos: Nohema Díaz Muñoz y José De La Rosa corresp@jrebelde.cip.cu

Detalle de un aerogenerador CIEGO DE ÁVILA.— La moto avanza por un camino de campo en la isla de Turiguanó, al norte de la provincia. Lo hace casi todos los días, por un suelo cubierto de hierbas ariscas y pegadas al suelo. El conductor, ingeniero Adonis Pérez Lorenzo, hace un giro y Percy y Cory, los dos aerogeneradores eólicos, aparecen a la vista. Son blancos, de 32,3 metros de altura y con capacidad, cada uno, de generar 225 kilowatts.

«Cuando el viento sopla a 3,8 metros por segundo, ya pueden liberar los frenos automáticos. Esa es la velocidad de arranque», explica Adonis, mientras abre la puerta de la caseta de mando.

Dentro de dos años cumplirá la primera década como operador del Parque Eólico Demostrativo de la isla de Turiguanó, primera instalación construida en Cuba para generar electricidad mediante la fuerza del viento, con el apoyo de varias ONGs como ACSUR Las Segovias, KarEn y otras.

«El Parque se inauguró el 5 de junio de 1999, a propósito del Día Mundial del Medio Ambiente; posee una potencia media de 30 MWh y la mayor energía la produce entre vientos de cinco y ocho metros por segundo», explica el especialista, y a otra pregunta, sonríe:

El segundo aerogenerador «¿Cómo llegué aquí? Yo trabajaba en la empresa Geysel y supe de los proyectos. Pedí autorización y me dijeron que podía vincularme en los ratos libres. Lo hice y aquí estoy desde que empezaron a funcionar los “molinos”, como le dice la gente».

Ya en 1995 se tenían las mediciones del viento, que en la isla arrojaron fuerzas de seis metros por segundo, como promedio. No es el mejor lugar del país, comparado con otros, pero los datos sobre el viento, junto con el terreno llano, las posibilidades de conectarse al Sistema Electroenergético Nacional (SEN) y la cercanía de una comunidad para medir el impacto social, fueron elementos que pesaron a la hora de emplazar las turbinas.

Ahora, con dos parques eólicos en distintos niveles de ejecución, en la Isla de la Juventud y al norte de la provincia de Holguín, la mirada de los especialistas se dirige a los dos aerogeneradores de Turiguanó.

UN CLIMA INTERESANTE

Mientras los grupos electrógenos se emplazaban a lo largo del país, luego de la crisis energética vivida en 2004, los proyectistas comenzaban a repasar los datos sobre el manejo de la energía eólica.

Y había para meditar, pues la pregunta todavía se mantiene, sobre todo entre las personas que observan de lejos los aerogeneradores de Turiguanó: ¿Cuenta Cuba con posibilidades para obtener electricidad a partir del viento?

Luis Manuel Batista Tamayo, investigador titular y director del Centro de Formación Enegía Eólica de Ciego de Ávila «Tenemos condiciones de clima muy interesantes», responde Luis Manuel Batista Tamayo, investigador titular del Centro de Investigaciones de Ecosistemas Costeros (CIEC) de Cayo Coco y director del Centro de Formación de Energía Eólica de Ciego de Ávila.

Entre 1996 y 1997 Batista Tamayo participó en las mediciones que se realizaron en la región centro-oriental de Cuba, las que arrojaron que en la costa norte de esa zona, a 20 metros de altura, existen lugares con vientos sostenidos de ocho y hasta 12 metros por segundo de velocidad.

«Es un comportamiento muy estable y que marca el primer requisito para montar un Parque Eólico: que exista suficiente potencial del recurso viento», apunta Batista.

De acuerdo con los estudios, Cuba se favorece por el Anticiclón del Atlántico, cuyos vientos se superponen con las brisas de la costa norte, logrando mayor fuerza de penetración, en comparación con las del sur.

A ello se le unen ciertas corrientes locales, alejadas de la costa, pero favorecidas por embalses, valles y montañas, como las de la Sierra Maestra, que propician su organización.

«La misma fisonomía curva que tiene nuestro país en el oriente y el centro posibilita también la influencia de los vientos sobre varios puntos que pueden ser utilizados para obtener energía», puntualiza Batista.

Por su parte, el investigador cubano Raúl Novo Mesegué, en su artículo El Viento en Cuba, publicado en el número 32 de la revista Energía y Tú, menciona que las mediciones hechas durante dos años en Cayo Sabinal, al norte de la provincia de Camagüey, y en los cayos Coco y Guillermo, en Ciego de Ávila arrojaron resultados que deben tenerse en cuenta.

«En esos lugares —dice— a 20 metros de alto se detectaron vientos iguales o superiores a los registrados a 50 metros de altura en la costa norte de Europa Occidental».

Novo invita a pensar. En esa zona del Viejo Continente funcionan miles de aerogeneradores; entre esos, una parte importante de los que cuenta España, país que en enero último alcanzó los 11 615 MW de potencia eólica instalada.

LO QUE EL VIENTO NOS DEJÓ

Adonis Pérez Lorenzo, operador del Parque Eólico Demostrativo de Isla Turiguanó. «De todos modos estamos empezando y tenemos mucho que aprender», expresa Adonis. «El primer impacto ya lo tenemos: el Parque le ha ahorrado al país más de 500 toneladas de combustible, pese a las temporadas en que permaneció inactivo por situaciones técnicas».

Otra experiencia es que el mantenimiento de los aerogeneradores puede ser más flexible, lo que no se recomienda con las máquinas generadoras de electricidad a partir de combustibles fósiles, las que hay que parar al cumplirse un tiempo de explotación.

También el costo de operaciones es menor, al ser máquinas automatizadas y que permiten que un solo especialista atienda varios «molinos». Por otra parte, su «combustible», el viento, es una fuente abundante, barata e inagotable, con comportamientos de altas y bajas, pero que pueden ser predecibles.

«Hay que marcar algo —señala Adonis—; los parques eólicos por sí solos no pueden cubrir toda la demanda de un SEN debido a la intermitencia del viento, que puede ser más fuerte a una hora y débil en otro momento. Por eso hace falta una eficaz interconexión».

Y esa es una enseñanza que ha arrojado el Parque Demostrativo de Turiguanó. No se puede desarrollar la energía eólica con enlaces débiles o no ajustados a las características de generación, pues se corre el riesgo de provocar anomalías en el funcionamiento de los aerogeneradores; una de estas, que no se produzca toda la corriente posible, pese al buen viento.

«Otra irregularidad aparece cuando el sistema automatizado detecta una sobrecorriente de fase a tierra, debido, entre otras causas, a que el follaje de los árboles roza las líneas y el aerogenerador entra en frenado brusco. Imagínense parar con rapidez dos toneladas, que es el peso total de las aspas en cada turbina», explica el especialista.

—¿Y el impacto sobre las aves? Los ecologistas han señalado que los parques eólicos se construyen en zonas donde existen corredores de aves y que estas pueden sufrir por colisiones contra los aerogeneradores. ¿Cómo ha sido esto en Turiguanó?

—No hemos tenido impacto. En cambio, observamos que las aves bordean los aerogeneradores. Claro, eso no implica que el riesgo no esté. Por eso los Parques en Cuba deben construirse dejando espacios para que vuelen sin peligro.

—¿Existen posibilidades en Cuba de construir parques de este tipo en el mar?

—(Adonis sonríe) Tal vez en un futuro. Pero, en mi opinión, tenemos mucha tierra que usar, para estar pensando en el mar.

Energía limpia

En potencial de generación elólica , España es seguida por los EE.UU. con 11 603 MW. Alemania se mantiene a la cabeza del rubro. Ya en 2003 ese país generaba más de 15 000 MW gracias a la energía producida por el viento. (Agencia IPS y www.aeolica.es)

A diferencia de las energías convencionales, la eólica no altera los mantos acuíferos ni por conumo ni por contaminación de residuos. Tampoco genera gases tóxicos, que dañen la capa de ozono y provoquen lluvia ácida.

Un parque eólico de 10 MW de potencia nominal evita la emisión al año de 28 480 toneladas de dióxido de carbono (CO2) y puede propiciarles electricidad a 11 000 familias. (www.energias-renovables.com)

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.