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Estudiantes que optan por carreras de ciencia pueden cursar el grado 12 en las universidades

Autor:

Margarita Barrios

La experiencia se aplicará en las universidades de La Habana, Oriente, Central de Las Villas, Holguín y CamagüeyUnos 1 800 jóvenes de todo el país que terminan este año el onceno grado optan por carreras de licenciatura en Matemática, Física, Química y Biología, a partir de la propuesta de que cursen el duodécimo grado en las universidades, y luego sigan allí formándose como profesionales.

En la clausura del Seminario Nacional de preparación del próximo curso escolar José Ramón Fernández, vicepresidente del Consejo de Ministros, significó que solo se necesitan unos 300 jóvenes, por lo cual podrá elegirse a los que posean mejores aptitudes.

Puntualizó que el país necesita de estos profesionales para el desarrollo científico, y las matrículas de esas carreras, consideradas poco atractivas fundamentalmente por lo difícil del currículo que debe ser vencido, no cubren las expectativas.

La experiencia se aplicará en las universidades de La Habana, Oriente, Central de Las Villas, Holguín y Camagüey.

La idea de hacer el duodécimo grado en la universidad permite prepararlos mejor, y ha sido muy bien acogida por los jóvenes, apuntó.

«Seguimos trabajando para que los institutos preuniversitarios de ciencias exactas reconquisten el papel por el cual surgieron: preparar a bachilleres que luego se consagren a las ciencias».

Fernández significó que hay que continuar enamorando a los jóvenes con la historia del país, para que conozcan profundamente los hechos que recogen la heroicidad y tradición de lucha de nuestro pueblo.

«La clase de historia tiene que ser en vivo; allí se tiene que debatir; todos tienen que aportar, y la figura del maestro es fundamental, porque tiene la misión no solo de enseñar, sino de educar».

Significó que hay que seguir trabajando en la captación para las carreras pedagógicas, y en cada territorio se deben buscar las alternativas necesarias para completar esas fuerzas.

«Es cierto que no les ofrecemos un lecho de rosas, pero ¿alguien pone en duda que no hay profesión más hermosa que la de educar? Es tarea de todos reconocer al maestro, a ese joven que está en el aula, e imbuirlos de la belleza de su labor».

Insistió en la importancia de continuar elevando la preparación de los maestros jóvenes, a lo cual deben aportar de manera decisiva los de más experiencia y los institutos superiores pedagógicos, que deben formar e investigar.

En el acto se encontraban Miguel Díaz–Canel Bermúdez, miembro del Buró Político del Partido y ministro de Educación Superior; Lázara Mercedes López Acea, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, y Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación.

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