Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Sindicato: ábrete sésamo

Mientras crece la afiliación de cuentapropistas en las organizaciones sindicales de base en Guantánamo, la CTC también adquiere experiencia y aprende a asimilar los requerimientos y necesidades de esta fuerza laboral

Autores:

Lisván Lescaille Durand
Raciel Sayú
Yoíma Flores Govea

Un paso atrás ni para tomar impulso. La sentencia encaja perfectamente en las intenciones de los más de 12 500 guantanameros que decidieron alistarse en el sector no estatal de la economía del territorio. Tales expectativas se hilvanan adecuadamente con la política del país de favorecer nuevas oportunidades de empleo, a la vez que esta fuerza laboral se convierte en una vigorosa fuente de ingreso para las arcas de la nación.

Los números dejan ya un saldo favorable en la más oriental provincia cubana, desde que se amplió el diapasón del trabajo por cuenta propia y entraron en funcionamiento nuevas formas de gestión de la economía. Según Walter Urgellés, director de Trabajo y Seguridad Social en la provincia, al cerrar septiembre los ingresos del cuentapropismo superaban en casi 1 400 000 pesos lo previsto en los planes de 2013, indicador que refleja una tendencia alcista cada año.

De acuerdo con el directivo, aquí están representadas el 99 por ciento de las actividades aprobadas en el país, con una mayor presencia de negocios del comercio y el transporte. Pero tan esencial como el aporte financiero, se destaca que el 62 por ciento de los incorporados a las diversas modalidades de empleo son jóvenes, mientras el 35 por ciento pertenece al sexo femenino.

Con semejante empuje en la vida económica y social del territorio, los trabajadores por cuenta propia no podrían deslindarse de los apremios y expectativas del movimiento obrero cubano, que también camina por las cuerdas de la actualización del modelo económico de la Mayor de las Antillas. En tal sentido, no son pocos en esta provincia a los que les llegó ya la invitación de la CTC para unirse al movimiento sindical.

Funcionarios de esta organización y del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social dijeron al diario local Venceremos que el 88 por ciento de los 12 500 referidos están ubicados en secciones sindicales, y continúa creciendo la afiliación. Pero a pesar de la disposición expresada en tal guarismo, aún se dejan escuchar criterios reticentes para incorporarse a las organizaciones sindicales de base.

Deshojando margaritas

¿Me afilio, no me afilio? Pareciera como si se deshojaran margaritas cuando este equipo interrogó a decenas de trabajadores no estatales acerca de insertarse en secciones sindicales en las cuales poder ventilar sus preocupaciones. Así muchos ven ese espacio necesario, para que opiniones como las de Arislay González Castillo sean canalizadas.

Ella ejerce como modista o sastre y está afiliada al Sindicato de Comercio desde hace casi un año; sin embargo, considera que a pesar de tramitar sus preocupaciones aún no se siente enteramente parte de esa organización.

Por fortuna, buena parte de los cuentapropistas evitó deshojar la margarita y sacaron las mejores lecciones luego de unirse al sindicato. Soraya Obret Montes de Oca, comerciante no estatal de bisuterías, útiles del hogar y cuidadora de bolsos es un magnífico ejemplo de lo que se dice. Esta laboriosa mujer lleva cuatro años laborando por cuenta propia, y de estos, dos años incorporada a la sección sindical de Comercio, creada en marzo de 2012 en la cabecera provincial.

«Integrarme al sindicato fue un gran paso para mí; era la manera de no sentirme desamparada o desatendida laboral y legalmente. La CTC me representa, defiende mis intereses, viabiliza mis preocupaciones y crea espacios para intercambiar criterios con los organismos encargados de solucionarlas», explica Soraya.

Al igual que esta dama, casi una veintena de ciclistas que conducen bicitaxis tienen en alta estima la labor del sindicato, que contribuyó a que se inscribieran como cuentapropistas y salieran de la ilegalidad; los visibilizó hasta el punto de contar con un delegado al Congreso de la CTC y les proporcionó en pleno centro histórico una piquera adonde acuden los clientes, afirmó Orioldys Maturel, secretario de la sección sindical que agrupa a  unos 15  bicitaxistas.

Para este hombre curtido por el sol y el esfuerzo de sus piernas, las puertas abiertas de la CTC significaron el acceso a todos a servicios de mantenimiento y reparación de sus bicis en un taller estatal, pero sobre todo cuentan con un espacio de diálogo donde son escuchados, incluso por las máximas autoridades del Partido y el Gobierno guantanameros, evocó este joven cuentapropista.

Sin embargo, Roberto Hernández Fernández y otros como él quisieran gozar de la misma suerte que disfrutan los que ya están sindicalizados. Este hombre que lleva ejerciendo como arrendador de habitaciones desde hace dos años, no sabe a qué sindicato pertenece la actividad que ejerce, ni tampoco alguien se le ha acercado para que se integre a algunas de las secciones constituidas.

«Por esa misma razón no tuve la posibilidad de dar mis valoraciones acerca del Anteproyecto del nuevo Código de Trabajo, analizado por los trabajadores guantanameros hace cerca de un mes», dice Roberto.

Y sin embargo se mueve

Bastaría extender el brazo —y sujetarse la billetera—, para moverse de un lado a otro de esta ciudad sin el menor contratiempo. Si los bayameses se precian de sus coches, en La Habana pululan almendrones y en Santiago de Cuba rugen las motos, en esta ciudad se combinan armoniosamente todos esos medios como una oferta viable y sólida para el desplazamiento de su gente.

En la cabecera provincial reunir en secciones sindicales a este grupo de trabajadores devino asunto complejo, como reconoce Yordanis Neyra Varona, secretario del sindicato del Transporte en el municipio, una de las personas más implicadas en el trabajo no estatal. «Aquí se contabilizan unos 500 trabajadores sindicalizados, de los alrededor de 2 200 registrados en esta labor en toda la provincia.

«Sin embargo —afirma—, aún se está organizando el trabajo de estas secciones sindicales de manera que funcionen adecuadamente, y el sindicato influya con mayor eficacia en el gremio de bicitaxistas, camioneros, cocheros, mototaxistas, y poncheros. Hemos podido guiar el desempeño de cuatro secciones sindicales de cocheros que se ubican en las principales piqueras de la ciudad».

El debate con esa membresía resulta provechoso, en tanto se analizan asuntos que les preocupan, y se dilucidan cuestiones sensibles, como las ilegalidades en esa actividad, los planes inversionistas para arreglar las calles por donde transitan los coches, la acción de los inspectores y las regulaciones del tránsito para ese medio de tracción animal, entre otras muchas cuestiones, ventiladas en activos trimestrales, explicó Neyra.

Resultado del ordenamiento del trabajo por cuenta propia en el país, la CTC también adquiere experiencia y aprende a asimilar los requerimientos y necesidades de esta vital fuerza laboral, de manera que a estas personas se les pueda orientar y encaminar adecuadamente sus planteamientos, opina Elio Frómeta Herrera, dirigente obrero de larga trayectoria, quien está al frente de la Oficina de Control, Afiliación, Funcionamiento y MTT, en la CTC provincial.

Apunta Frómeta Herrera que se han creado más de 108 secciones puras y mixtas y 103 comités que reúnen hasta 25 trabajadores cada uno, además de 89 delegaciones sindicales de hasta diez trabajadores que realizan actividades afines.

Precisa que es fundamental la capacitación de dirigentes sindicales, perfeccionar las estructuras de base, así como los métodos y estilos de trabajo que propicien un mejor intercambio y comunicación con esa fuerza laboral.

Por tal motivo el reto de la Central de Trabajadores de Cuba apunta hacia la necesidad de atraer a sus filas también a todos  esos trabajadores y que la vean como la organización capaz de velar por sus derechos y conducirlos en sus aspiraciones.

Fotos Relacionadas:

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.