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Tito Díaz, coordinador de la Oficina Subregional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) para Mesoamérica, señaló la importancia de orientar y diseñar programas de protección social centrando la atención en el papel que desarrollan las mujeres en el sector rural.
Las referidas declaraciones, realizadas en Panamá por la fecha del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, reafirman que donde se pondere el desempeño de las féminas puede aumentar el impacto de la seguridad alimentaria y reducirse la pobreza.
De acuerdo con la FAO, las mujeres rurales representan cerca del 50 por ciento de la fuerza de producción de alimentos en el mundo, y ocupan un rol importante en la preservación de la biodiversidad, la recuperación de prácticas agroecológicas y, por consecuencia, en la garantía de la soberanía y la seguridad alimentaria y nutricional.
Díaz —quien la semana próxima visitará la Isla—, reconoció que las actividades y responsabilidades productivas de las mujeres rurales se suman a sus actividades de alimentar y cuidar a sus familias.
«Esta carga doble y a veces triple de trabajo en el campo, en el hogar y en la comunidad generalmente no es remunerada, ni reconocida», agregó el Coordinador de la FAO para Mesoamérica.
