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Cienfuegos.— Lilian Alarcón Sánchez ingresó al Palacio de la Maternidad con dolores bajo vientre y contracciones por riesgo de prematuridad en su embarazo. Allí llevó su período de gestación a término y garantizó su salud y la de su bebé.
Como ella, ahora otras gestantes con vulnerabilidades esperan con ambientes más acogedores su fecha de parto, gracias a una inversión de miles de pesos.
«Restauramos todas las redes hidrosanitarias porque ese fue el principal problema por el cual tuvimos que mudarnos siete meses para otro local, aunque nunca decayó el nivel asistencial. Nuestras pacientes tienen ahora agua caliente en los baños y la cocina está en óptimas condiciones», explicó Mairobis Hernández Romero, directora de la institución.
«Aquí se ingresan a aquellas mujeres con riesgos de enfermedad hipertensiva, prematuridad y bajo peso al nacer de la criatura. La atención recibida ha permitido mantener en cero la mortalidad infantil de quienes egresan del Palacio. También las más de 440 pacientes ingresadas con hemoglobina baja solucionaron ese problema», agregó.
No solo esta institución asistencial contribuye a la protección y la salud de los miembros de la familia, sino también otros centros en Cienfuegos, en los cuales ascienden a más de dos millones de pesos los gastos en reparación y mantenimiento.
En ese sentido, unos cuatro círculos infantiles del municipio cabecera recibieron recientemente una restauración, para garantizar la atención y educación de los más pequeños.
En el barrio de Pastorita unas 158 madres trabajadoras pueden dejar a sus niños en el círculo infantil Mis Amiguitos, el que, tras meses de inactividad, muestra ahora una inversión ascendente a los 700 000 pesos.
Marisol Hernández Peralta, directora del círculo, dijo que en las labores se incluyeron el cambio de carpintería, del mobiliario y de las redes hidrosanitarias y eléctricas, el cercado perimetral, pintura e impermeabilización de los techos, lo cual influye en la calidad y satisfacción de trabajadores y niños.
Con igual estado de ánimo, se labora en el círculo infantil Pequeños Combatientes, de Buena Vista, donde 161 niños se benefician con el resultado de una inversión también de cientos de miles de pesos.
Más de medio millón costó igualmente la reparación de la escuela primaria Roberto Fleites González, en Junco Sur, la cual cuenta con mejores condiciones para aumentar la calidad del proceso docente educativo.
Los más de 250 alumnos tienen ahora una completa base material de vida y estudio, y laboratorios de Educación Laboral y Ciencias Naturales.
Yipsy Jiménez Fernández, directora de la escuela, dijo que en los 40 años del centro no se había reparado nunca y las desfavorables condiciones no contribuían al buen desempeño del colectivo.
