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El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en la Sala Principal del Tribunal Supremo Popular, donde tuvo lugar el acto solemne de Apertura del Año Judicial. Autor: Maykel Espinosa Rodríguez Publicado: 14/01/2019 | 05:24 pm
«Contamos con ustedes», expresó en la mañana de este lunes a hombres y mujeres de nuestro universo jurídico, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en la Sala Principal del Tribunal Supremo Popular, donde tuvo lugar el acto solemne de Apertura del Año Judicial.
Con los asistentes de pie, y a modo de despedida, todavía todos inmersos en las magníficas interpretaciones que para la ocasión ofreciera el Coro Nacional de Cuba dirigido por la Maestra Digna Guerra, el Jefe de Estado hizo alusión al intenso y elevado ejercicio legislativo que sobrevendrá una vez que el próximo 24 de febrero, día de ratificar la Constitución de la República, se abra paso una nueva etapa de trabajo.
Hemos asistido al Acto de Apertura del año judicial 2019. Importante paso para el fortalecimiento de la institucionalidad y el perfeccionamiento del sistema de justicia. Demostración de la relevancia que tiene la labor judicial #SomosCuba #SomosContinuidad pic.twitter.com/Q9x64BFWxV
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) 14 de enero de 2019
A cargo de Rubén Remigio Ferro, Presidente del Tribunal Supremo Popular, estuvieron las palabras centrales del acto que contó con la presencia de Esteban Lazo Hernández, Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular; Yamila Peña Ojeda, Fiscal General de la República; Oscar Manuel Silvera Martínez, Ministro de Justicia; directivos principales de la Fiscalía General de la República, el Ministerio de Justicia y la Junta Directiva Nacional de la Organización Nacional de Bufetes Colectivos; así como miembros del Consejo de Gobierno del Tribunal Supremo Popular, magistrados y directivos de este órgano superior de justicia; los presidentes de los tribunales provinciales populares; y profesores y estudiantes de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, entre otros invitados especiales.
Realizar la Apertura del Año Judicial, expresó Remigio Ferro, «constituye un paso importante en el marco del fortalecimiento de la institucionalidad que se lleva a cabo en el país, como parte del proceso de actualización del modelo económico y social cubano, en cumplimiento de los acuerdos del VI y VII Congresos del Partido Comunista de Cuba».
Que la ceremonia haya tenido la presencia de las más altas autoridades del Estado cubano, junto a los máximos representantes de las instituciones y entidades que conforman nuestro sistema de justicia, es una demostración elocuente, dijo Ferro, de la relevancia que la labor judicial tiene para la vida del país. Y añadió:
«El año judicial que comienza nos plantea a todos —tribunales, Fiscalía, Ministerio de Justicia, Ministerio del Interior y Organización Nacional de Bufetes Colectivos— la responsabilidad de cumplir cada vez con mayor eficiencia y eficacia, la parte del deber que a cada uno concierne, para garantizar a nuestro pueblo que tan importante servicio satisfaga sus expectativas y necesidades con la mayor calidad».
Los asuntos que llegan a los tribunales en las diferentes especialidades —subrayó el Presidente del Tribunal Supremo Popular—, reflejan una parte importante del acontecer socioeconómico del país, con sus complejidades y peculiaridades; por lo cual el adecuado juzgamiento y solución de cada caso supone para los jueces el desafío de obrar con justeza y racionalidad, en el marco de la ley, ante conflictos y litigios no pocas veces muy difíciles.
«Impartir justicia en Cuba hoy —y hacerlo bien— requiere de mujeres y hombres capacitados, motivados, fortalecidos política e ideológicamente, poseedores de un elevado sentido de lo justo y de probada sensibilidad humana, honestos e incorruptibles», enfatizó Remigio Ferro, quien además resaltó que la mayoría de nuestros jueces profesionales son mujeres(el 81 por ciento del total), a la vez que es notable la proporción de jóvenes jueces profesionales en los órganos de justicia (34 por ciento), quienes suelen actuar «con dedicación y responsabilidad».
Los representantes de las nuevas generaciones acometen su labor, destacó Ferro, junto a un número importante de jueces experimentados para quienes el desempeño del oficio es un sentido de la vida.
El Presidente del Tribunal Supremo Popular no quiso pasar por alto le hecho de que, «desde hace algunos años, jóvenes estudiantes de la carrera de Derecho se han insertado, a tiempo parcial, como asistentes judiciales en algunos de nuestros tribunales», con lo cual brindan «una apreciable contribución al trabajo de los jueces, a la vez que incrementan sus conocimientos y habilidades».
Remigio Ferro aseguró, «en nombre de los jueces y demás trabajadores de los tribunales de justicia del país (…), que en el presente año, como en los sucesivos, continuaremos cumpliendo cabalmente las misiones y tareas encomendadas y seremos fieles guardianes de la nueva Constitución y las leyes».
Por su parte la joven Anabel Noris Tito, jueza profesional de la Sala de lo Económico del Tribunal Provincial Popular de La Habana, destacó la voluntad y el compromiso de las nuevas generaciones en su profesión, para asumir los desafíos que sobrevendrán. Mencionó cualidades necesarias como la profesionalidad, la prontitud, la responsabilidad, la imparcialidad, el humanismo,el patriotismo, la transparencia, y la honestidad; y aseguró que hay un ejército de jóvenes que no le fallarán a la Revolución.
Fotos: Maykel Espinosa Rodríguez
