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Ante tan desbordante recibimiento, él, a no dudarlo, se sintió sacudido, y respondía con un enérgico saludo Autor: Juventud Rebelde Publicado: 08/02/2020 | 11:48 pm
Santa CLARA, Villa Clara.— La gente presentía, las conjeturas vuelan, que en un momento u otro podía aparecer por cualquier calle del corazón de la ciudad. Y cuando descendió del auto, justo donde comienza en la calle Independencia el bulevar santaclareño, el estruendoso aplauso confirmó que estaba allí el Presidente cubano. Entonces fue la apoteosis.
Ante tan desbordante recibimiento, él, a no dudarlo, se sintió sacudido, y respondía con un enérgico saludo, cerrado por las palabras de cariño, pero iba más allá al estrecharles la mano o abrazar a las personas e intercambiar momentáneamente frases con ellas.
No se podía avanzar, prácticamente, por la céntrica calle, mientras la gente le gritaba Miguel, o Presidente, y él se les acercaba, les correspondía con esa amabilidad que impactaba a todos.
Hubo, por supuesto, expresiones de satisfacción por su trabajo, de qué bueno que estés de nuevo por aquí, y de que sigue como siempre, obviamente, dichas por personas que lo conocen desde hace tiempo para connotar que el cargo no se le ha subido para la cabeza.
También dialogó con trabajadores y dirigentes administrativos de centros de prestación de servicios recientemente remozados en el bulevar como la Casa de la Ciudad, el Daiquirí, la tienda Guamá y taller de reparación de equipos electrodomésticos.
Así fue este nuevo encuentro de Díaz-Canel con la gente de su entrañable ciudad que, obviamente, se siente muy, muy orgullosa de él. Lo despidió con el deseo de que todo le salga bien al Presidente de los cubanos, fiel discípulo de Fidel y Raúl.
Acompañado de cientos de personas, Díaz-Canel realizó un recorrido por sitios emblemáticos de la ciudad de Santa Clara.
