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El impacto del pensamiento crítico en el campo cultural cubano desde 1959 hasta la actualidad fue tema de análisis ayer para historiadores y científicos sociales, durante un encuentro celebrado en el Instituto de Historia de Cuba, el cual forma parte de un ciclo de estudios que se extenderá hasta julio del próximo año.
Intelectuales como Fernando Martínez Heredia, Premio Nacional de Ciencias Sociales, y Rafael Hernández, director de la revista Temas, frecieron su visión acerca de la realidad cubana y de los conflictos y situaciones límite que han acompañado al proceso revolucionario.
Ambos conferencistas coincidieron en que la Revolución cubana, como afirmó Martínez Heredia, «es la causa fundamental de la aparición de un nuevo pensamiento que hemos llamado crítico».
Para entender la eclosión del pensamiento y de la cultura cubana hay que tener en cuenta primero que el propio discurso político de la dirigencia de la Revolución implicaba posiciones valientes, inteligentes, analíticas, rigurosas y críticas.
«Los principales incentivos al pensamiento crítico vinieron de ella, de Fidel Castro, el Che Guevara...», subrayó Rafael Hernández, quien se refirió igualmente a las diferentes visiones que han acompañado a ese pensamiento y a cómo estas han influido en el modo de conducir la cultura y las ideas.
Sin embargo, se insistió en que el papel desempeñado por cada una de las esferas de la cultura en la consolidación del proyecto social revolucionario requiere múltiples valoraciones.
El debate, que en esta ocasión se redujo a tres horas, tendrá continuidad el próximo jueves, fecha prevista para reflexionar sobre los fundamentos socieconómicos y políticos de la cultura cubana.
