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Recuerdo esa parte, cuando Israel extravió en su mente la letra exacta y le agradó al público de la Plaza de la Revolución José Martí. Yoel, sin dejar de tocar la guitarra, le indicó cómo retomar el hilo. Israel, humano al fin, terminó de cantar Guantanamero entre sonrisas y con un coro de seguidores.
Les sucedió con un tema de los inicios. De esa época en que decidieron «salir con una guitarra y hacer canciones», como dice Yoel. La escena aparece ahora en Buena Fe live (EGREM 2009), el DVD con signos vitales de la banda que celebra diez años de vida en la música, entre títulos que hacen pensar, y sin dejar a un lado el romanticismo.
Recapitularon una década en una noche. ¡Qué noche! Aquella del 12 de agosto de 2008 cuando reunieron a un público numeroso en la Plaza de la Revolución, y ahora nos devuelven la velada en este disco, que se une a los festejos por todo ese período juntos.
«No ha habido mucho tiempo para andar de “vacacionistas”», reflexiona Israel Rojas, voz y líder del grupo. Él sostiene que la agrupación ha mantenido las premisas de los inicios, allá en su natal Guantánamo. En esencia, han tratado (antes como dúo, actualmente como banda) de hacer crónicas de la realidad que viven, y les imprimen su sonoridad característica.
«Los postulados con los que comenzamos nuestro trabajo se han cumplido con creces. Pero esos mismos han sido lo suficientemente fértiles como para generar nuevas estrategias de trabajo, nuevas cosas que decir», afirma Israel.
Buena Fe live toca de una forma u otra esos cinco álbumes que conforman los «pulsos» discográficos del grupo, desde Déjame entrar —el primero de los CD— hasta Catalejo. En cada tema se insiste en mostrar una manera propia de interpretar y con letras llenas de vivencias personales y situaciones cotidianas.
Ese optimismo en los textos se logra porque siempre, «a la hora de la creación, es tan colectivo el trabajo, tan divertido y placentero, que uno se olvida de la trascendencia», apunta Israel.
Por eso el DVD, que se presentará este mes a propósito del cumpleaños del grupo y que tuvo una primicia para la prensa, ha sido «una necesidad existencial y creativa».
Así tienen que ser las cosas de estos muchachos. Ellos están seguros de que «mañana, cuando los discos ya no vendan, seguiremos haciendo producciones musicales, porque hacer canciones es lo que nos gusta».
El proceso de filmación en la Plaza, y luego la terminación, les tomó algunos meses. La idea surgió cuando «la UJC nos propuso hacer el concierto allí. Vimos la posibilidad de realizar el DVD. Ian Padrón, quien durante años ha sido nuestro amigo, se sumó para dirigirlo. Y así nació esto que parecía loco, pero nos salió».
Dentro del DVD aparecen cuatro videoclips: Propuesta, Soñar en azul, Nacimos ángeles y Catalejo. Igualmente se añade un disco compacto con 14 sencillos. El material audiovisual cuenta con el hilo conductor de Yoel Martínez e Israel Rojas. Ellos introducen las escenas del concierto y saben tocar esa sensibilidad que puede crearse en un momento especial.
Con La Habana de fondo, ambos músicos confiesan ante la cámara que esa noche del 12 de agosto el espíritu de José Martí estaba no solo con ellos, «sino con toda esa gente, al calor de esas canciones…».
Otras imágenes develan ese contacto estrecho e íntimo con el público cuando se siente La comparsa, de Lecuona, en el piano de uno de los músicos. Se tararea: Tengo un catalejo / con él la Luna se ve, Marte se ve… La gente y los artistas baten palmas. El tema (Catalejo) cala en el auditorio. Buena Fe describe un escenario de realidades. Sus canciones son eso. Un coro se suma en la interpretación.
Las fotos de portada y contraportada, de Carlos Otero Blanco, también se unen a ese criterio de existencia que lleva el título del material audiovisual. En las instantáneas se palpa ese encuentro cercano entre músicos y seguidores, concepto que se extrapola al diseño del estuche del DVD, hecho por Tomás Miña.
Pues es eso Buena Fe live: más que un recuento, una ruta musical en el tiempo. Con este DVD nos damos cuenta de que, como en la vida, la banda sobrepasa sus propias pautas y sigue, aunque diga en sus temas que hay «una bomba de tiempo» que marca la existencia, ellos no decaen porque siempre van en evolución.
