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SANCTI SPĺRITUS.— En la construcción de una nación más sólida desde el pensamiento se centran los debates del proceso asambleario de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, (Uneac), que tiene lugar en la Isla, previo al 9no. Congreso de esa organización, a efectuarse del 28 al 30 de junio venideros.
Es por ello que ha sido recurrente la insistencia en cada uno de los territorios, de la responsabilidad del intelectual en estos tiempos complejos, quien, en escenarios como el digital debe generar contenidos con argumentos sólidos para enfrentar la insistente agresión simbólica, una estrategia de dominación que solo puede ser anulada mediante el crecimiento personal y colectivo, la sedimentación, la fortaleza y la labor constante en pos de una obra cultural cada vez más profunda, cubana y revolucionaria.
Razones más que suficientes para que cada una de las membresías, donde se ha realizado el proceso hayan alzado sus voces para rechazar la activación del Título III de la Ley Helms-Burton y hayan llamado a encarar todas sus amenazas con la necesaria unidad como guía fundamental de nuestro proceso político.
En ese sentido, Luis Morlote Rivas, vicepresidente primero de la Uneac, reconoció en Sancti Spíritus, que nos tenemos que plantear cuál es la organización que queremos «porque tiene que ser útil para la cultura y la sociedad», acotó.
Para ello, también, resulta vital en estos ejercicios democráticos, donde el debate fructífero y provocador es la palabra de orden, defender el concepto de que las ciudades hablan cuando tienen memoria.
El enfrentamiento sin medias tintas a las tendencias a la pérdida o lesión del patrimonio tangible e intangible; aprovechar más los escenarios escolares como espacios de socialización más integradores, democráticos, masivos y donde menos han penetrado factores que han tendido a fragmentar y diferenciar, de una manera u otra la sociedad cubana, son imprescindibles para evitar que en un futuro cercano desconozcamos quienes somos por ser reproducciones de culturas foráneas.
Igualmente, se ha llamado, de forma general, a desterrar los obstáculos que impiden la comercialización de las artes plásticas; fortalecer el trabajo comunitario y eliminar las fisuras en la promoción y jerarquización del gremio artístico. Estos y otros temas, en consonancia con la realidad de cada territorio se pondrán sobre las mesas de análisis del cónclave de la Uneac, el cual dirigirá su pensamiento al presente y futuro de nuestra nación.
