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¿Tablas? ¡De eso nada! Ivanchuk está que corta en Sofía. Foto: FIDE El astro ucraniano Vassily Ivanchuk (2740), a quien extrañamos por estos días en el Memorial Capablanca de ajedrez, derrotó anoche con piezas negras al Gran Maestro (GM) armenio Levon Aronian (2763), y completó una primera vuelta perfecta en el fortísimo torneo Masters de Sofía, en Bulgaria.
Les recuerdo que este evento, de categoría XX, se inserta en la serie del Grand Slam de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE), cuya gran final se disputará durante la primera quincena de septiembre en Bilbao, España. Así, impresionan las cinco victorias en línea de Ivanchuk sobre rivales de la súper élite del juego ciencia.
Imagínense que, antes de vencer a Aronian, había superado también con negras al azerí Teimour Radjabov (2751) y al ídolo local Veselin Topalov (2767). Y luego, con blancas, al chino Bu Xiangzhi (2708) y a otro jugador de la sede, Iván Cheparinov (2695). De tal manera, el campeón de las tres últimas ediciones del Capablanca amenaza con alcanzar uno de los performances más impresionantes de la historia.
Claro, en el reglamento del certamen de Sofía hay una ley que empuja: los jugadores tienen prohibido acordar tablas entre sí. El árbitro es la única persona que puede decidir si una partida termina igualada y ello solamente se produciría por las tres razones siguientes: triple repetición de la posición, jaque continuo o perspectivas teóricamente empatadas.
Detrás del líder marchan Topalov (3.5), Cheparinov y Radjavov (2), Aronian (1,5) y Bu (1). Mañana comenzará la segunda fase.
Mientras, al cierre de esta página se desarrollaba la cuarta jornada del grupo Élite en el clásico habanero. Sin Ivanchuk, y con los empates a la orden del día, los punteros eran los cubanos Leinier Domínguez (2695) y Walter Arencibia (2534), junto al alemán Igor Khenkin (2609), todos con dos unidades.
A continuación, con 1,5, se ubicaban el holandés Sergey Tiviakov (2634), flamante campeón de Europa; el representante de Turjikistán, Farrukh Amonatov (2625); y otros dos criollos: Lázaro Bruzón (2608) y Jesús Nogueiras (2559).
Cerraban la tabla, con apenas una rayita, el polaco Radoslaw Wojtaszek (2625) y los restantes cubanos en concurso: Yuniesky Quesada (2567) y Holden Hernández (2568).
