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Ni Liván López (74), ni Yowlys Bonne (57), pudieron hacerse justicia con sus supplés, y fuera de lo esperado, los gladiadores cubanos del estilo libre cerraron sin medallas su actuación en el Campeonato Mundial de Lucha, que finalizó este sábado en Las Vegas, Estados Unidos.
Liván, medallista de plata en el Mundial de Budapest 2013 y bronce en Estambul 2011, fue quien más avanzó en el organigrama, pues llegó hasta un tercer combate.
Según reflejó el sitio web del certamen, el pinareño abrió con triunfo ante el kazajo Zhiger Zakirov, por superioridad técnica (16-6) y luego se deshizo 6-0 del armenio Grigor Grigoryan. Pero en cuartos de final, fue superado 5-16 por el indio Narsingh Pancham, quien después cayó frente al mongol Unurbat Purevjav.
Mientras, el guantanamero Bonne, tercero en Tashkent 2014, le recetó superioridad técnica de 10-0 al kirguizio Samat Nadyrbek. Ya en su segunda pelea, sucumbió 2-2 ante el bicampeón mundial Victor Lebedev, de Rusia. Como se aprecia, el guantanamero estuvo delante en el marcador. Entonces, el europeo consiguió el último punto para empatar y ganar el pleito, pero luego cedió ante el iraní Hassan Rahimi.
Al cierre se disputaban las finales de hoy, en la fecha de clausura de este mundial. Cuba presentó a cinco libristas de excelente aval técnico, pero estuvieron bien distantes de lo que se esperaba de ellos.
Entonces, una valoración final del certamen refleja que la selección del estilo grecorromano tuvo mejor eficiencia competitiva, pues asistió con cuatro hombres y firmó una medalla de oro (Ismael Borrero, 59 kg) y otra de plata (Mijaín López, 130).
